🌸 ES POR UN BIEN MAYOR 🌸

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—Es momento de que experimentes el verdadero dolor... Naruto.

Escuché muy por lo bajo, mis sentidos ya no estaban alerta, estaba a punto de perder la conciencia, mis ojos entre cerrados alcanzaron a ver la expresión de Naruto, su cara pálida, como si le hubieran arrebatado el alma.

—Decide, tú a cambio de la mocosa.

»No, no, por favor no lo hagas ¡Naruto!« Quise gritarlo, pero la sangre comenzaba a ahogar mi garganta. Él solo seguía viendo, inmóvil, tenía que tomar una decisión entre abandonar la lucha y entregarse, o perder a una amiga.

—Vamos, zorro, no es tan difícil — sentí su enorme mano abarcar mi mentón sujetando con fuerza —no le queda mucho tiempo — lo dijo acercándose a mi oído.

Lo quería matar a golpes, el sentimiento de impotencia se apoderó de mí, la desesperación de no poder hacer nada para evitarle a mi mejor amigo tanto sufrimiento me estaba doliendo más que las heridas.

—¡Déjala ir, maldito bastardo! — al fin escuché su voz, sí, ese era mi chico, explosivo como siempre, pero su cuerpo seguía temblando y su voz se cortaba, jamás lo había visto tan aterrado.

Habíamos dado todo por el todo en el campo de batalla, a ninguno nos sobraban las fuerzas, mi última reserva la había utilizado para curar sus heridas más graves, y ahora me había convertido en el objeto de negociación y la posible causa de perder esta guerra.

—Sentí tu presencia hace mucho, ¿cuando piensas unirte al baile?

Mi visión se tornó aun más borrosa, pero pude distinguir a Sasuke salir de entre los escombros, ¿Cuánto tiempo se estuvo ocultando?

—¿Buscabas una forma de atacar? — rió sin gracia —no encontrarás el punto ciego que estas buscando.

—¿El pequeño Uchiha se quiere unir a la negociación? — su mano que sujetaba mi mentón se deslizó hasta mi cuello apretando con más fuerza, una mueca de dolor se escapó en mi expresión.

—Hmh, lo único que me interesa es terminar con esta guerra, no pienso dejar que Naruto haga una tontería — dijo de lo más tranquilo.

—¡¿Qué mierda estás diciendo, Sasuke?!

—Sabes perfectamente lo que está en juego... Naruto.

Entonces él apartó la mirada clavandola al suelo, sus puños se apretaron y su mandíbula se tensó.

Sonreí aliviada, yo no sería la causa de perder esta guerra, yo no sería la causa de que Naruto muriera...

Las lágrimas se mezclaron con la sangre seca y la suciedad de mi rostro, sabía que este era el final de mi camino a su lado como el equipo siete, y aunque posiblemente le cause un gran dolor a Naruto, estaba feliz de poder protegerlo una última vez.

Cerré mis ojos, agradecida, realmente agradecida por haber vivido una buena vida, llena de tan bellos momentos a lado de personas increíbles, de lo único que me arrepentía era de que no podría vivir para ver de nuevo a esos dos haciendo locuras.

—Bien, mi paciencia está a su límite, no creo que dejen morir a tan bella flor, así que el zorro de las nueve colas y el rinnegan a cambio de su amiga.

Mis ojos se volvieron a abrir cuando escuché un paso, luego otro, Naruto se estaba rindiendo, caminaba hacia el enemigo con la guardia baja.

El metal de la katana siendo desenfundada se escuchó, Sasuke la alzó ante Naruto impidiendo su marcha.

—Sasuke, no te metas en esto — sus cabello rubio hizo sombra a sus ojos azules.

—Sí vas a morir, prefiero que sea por mi mano.

Estaba a punto de verlos pelear de nuevo, no, no quería ver esto.

—Sé que lo entiendes, Sasuke, no hay necesidad de explicarlo.

Su brazo bajó quitando su arma, dejando así avanzar a Naruto.

»Oh no, no lo voy a permitir, ¡tú nunca te vas a rendir Naruto! ¡Tú serás el hokage! ¡Detente! ¡Haz algo por favor, Sasuke!«

Con la poca energía que tenía articulé las que serían mis palabras de despedida...

—Sa-Sasuke-kun... Na-Naruto... — ambos fijaron sus miradas en mí, entonces sonreí, y al final solo pude mover mis labios para decir —los amo, gracias — sin emitir ningún sonido.

Sus ojos se expandieron, la expresión de ambos al comprender mis palabras sería lo último que vería.

Con el poco chakra que pude acumular, hice explotar mi propio corazón, no pude contener la sangre y comenzó a derramarse de mi boca, solo podía sonreír satisfecha.

Mis captores soltaron una maldición, probablemente no se lo esperaban.

Mis ojos comenzaron a cerrarse, el cansancio me estaba venciendo, el frío me estaba cobijando, escuché los gritos de mi mejor amigo muy lejos, cada vez más lejos, llamándome una y otra vez por mi nombre, y tal vez fue un delirio o alucinación auditiva, porque también escuché la voz de Sasuke gritar mi nombre.

Confío en ellos, y en que mi muerte valió la pena, sé que esto destrozó a Naruto, pero también sé que ES POR UN BIEN MAYOR, y él será un excelente hokage.

—Nos volveremos a encontrar... Mis amores.

Los Cuentos de PinkuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora