Los Cuentos de Pinku

💕 SENSEI TRAVIESO 💋

Ya hace más de un año que Sasuke partió en su viaje de redención, durante su larga espera, Sakura se ha sumergido en el trabajo para olvidarse un poco de él, pero no ha funcionado como ella quisiera. Sigue suspirando con nostalgia y anhelo, más aún cuando ve las felices parejas pasear por la aldea.

Una tarde, antes de que el sol se ocultara, Sakura se apresuró a la cumbre Kage para entregar el informe semanal del hospital y la solicitud de insumos. Caminaba apresurada ya que pronto anochesería y rogaba porque el séptimo estuviera aún en su oficina.

Agitada abrió la puerta sin tocar, —justo a tiempo — Kakashi-sensei estaba quitándose la capa para partir. Dio una reverencia en forma de saludo —mis disculpas, sexto.

El peli-plata la miró sin interés, estaba agotado tras un largo día de tareas para la aldea. —¿Qué pasa, Sakura? Pudiste traerlo mañana.

—Lo-lo siento, ruego que me perdone, es que...

—...Puedes enfermar por tu intento de olvidarlo — la interrumpió.

Ella bajó la mirada, apenada, odiaba ser tan obvia y más ante los ojos de su sensei.

Suspiró, Sakura era demasiado transparente para él —está bien, déjalos en el escritorio, los revisaré y firmaré antes de irme — colocó su capa en el asiento giratorio tras el mueble.

Ella se animó y sonrió —muchas gracias, Kakashi-sensei — caminó a grandes zancadas al escritorio y colocó el sobre amarillo ahí.

—Hace mucho que no me llamabas “sensei” — sonrió tras la máscara.

—Oh, lo lamento — talló su nuca —se me escapó, es por la costumbre, sexto.

—No dije que estuviera mal, es solo que me trae nostalgia — caminó rodeando el escritorio para acortar la distancia entre ellos.

—Eso quiere decir que... ¿puedo seguir llamándole “Kakashi-sensei”? — sonrió abiertamente.

Por una extraña razón, el corazón de Hatake dio un vuelco y sus mejillas tras la tela enrojecieron, era la primera vez en mucho tiempo que veía a Sakura sonreír realmente.

—Me sentiría mal si no lo hicieras — sonrió y posó una mano sobre la cabeza rosa —oh...— notó algo y se le quedó mirando con detenimiento.

—¿Qué pasa, Kakashi-sensei? — sus ojos verdes lo miraron.

—Veo que has crecido un poco más que la última vez que posé una mano en tu cabeza — sonrió —pero sigues siendo más baja que Naruto y Sasuke — recordó que a ellos ya no les tocaba la cabeza.

La chica clavó su mirada al suelo, escuchar tan solo su nombre la ponía mal, a pesar de todo, Sasuke ocupaba su mente y corazón.

Los ojos oscuros lo notaron y sintió la tristeza. Él y Naruto han sido testigos del amor que Sakura le ha tenido al Uchiha y también de todo el dolor que eso a conllevado.

—¿Piensas seguir esperando? — preguntó, aunque ya sabía la respuesta.

—Él dijo que me buscaría... — respondió sin levantar la mirada.

—Eso no fue lo que pregunté, Sakura... — buscó su mirada.

Los ojos verdes se encontraron con los negros.

—Yo... Sí, no creo que sea capaz de amar a alguien más, usted más que nadie debería saberlo.

—¿Cómo puedes estar tan segura de eso? Si nunca has experimentado con alguien más.

Dejó caer sus hombros con resignación y un suspiro cansado  se escapó —eh recibido muchas confesiones de amor, pero yo simplemente no puedo... — su mirada triste enfocó hacia afuera de la oficina, por los grandes ventanales, con la esperanza de que Sasuke apareciera por ahí.