Una sección especial donde habrá historias cortas (de uno o dos capítulos) tipo drabble, one-shot o two-shot.
Las parejas pueden variar, al igual que los temas y situaciones, siendo en su mayoría SasuSaku (amo esa pareja) y pertenecientes a la franq...
Creía tener todo eso, me creí un shinobi excepcional, y también me creí con el derecho de juzgar al hokage... Mi padre.
Pensé que todo era sencillo, por qué para mí lo fué, nunca me detuve a pensar por todo lo que él tuvo que pasar para estar en el lugar en el que está. Siempre pensando en que descuidaba su obligación como esposo y padre por cumplir con su trabajo de hokage.
«—Tsk, ni que eso fuera tan importante —.» Lo dije una y otra vez, mostrando mi infantil enfado por no tener su atención.
Tal vez es tarde para ver mi error... O para arrepentirme.
(...)
—¿Pa-papá? — estaba en shock, mis ojos se clavaron en las múltiples barras que atravesaban el abdomen del séptimo. Él me protegió del ataque en medio de la batalla.
—Boruto — pronunció con dificultad mientras la sangre de su boca se derramaba —todo está bien, sal de aquí — sonrió.
—¡No papá! ¡No voy a dejarte! — mis ojos comenzaron a desbordar lágrimas.
—Boruto, déjame cumplir con mi misión de padre y hokage... Debo proteger a mi familia.
No, no lo entendía, realmente, ¿mi padre iba a morir por proteger a otros?, ¿eso era lo que significaba ser shinobi?, ¿eso era lo que significa ser hokage? Tanto esfuerzo para hacerse poderoso era para morir por otros, ¿qué iba a pasar con mamá y Himawari? Se quedarán solas... ¿Y yo?
Iba a gritar que "no" nuevamente, pero los ojos azules de mi padre me miraron con rudeza, como si supiera lo que estaba pensado. Mi voz se acalambró, los sollozos inadvertidos me quitaron el habla.
—Boruto, ser shinobi significa muchas cosas, pero la más importante... — una vez más, sonrió —... Es poder proteger a los que amas, aún a costa de tu propia vida.
—Por... Favor... Papá — las lágrimas eran cascada por mis mejillas.
—Nunca me rindo, ni retrocedo a mi palabr... — una bocaranda de sangre lo azotó —por que ese es mi camino nin... — sus ojos azules fueron perdiendo el brillo hasta cerrarse, su cabeza colgó chocando su frente con la mía. Seguía sonriendo, pero su corazón ya no seguía latiendo...
—Papá... Yo... Lo siento... Por todo...
(...)
Después de todo, ser un shinobi no es un juego de niños, no es tan fácil como creí. Somos niños jugando a ser héroes y olvidamos lo verdaderamente importante, ignoramos que, hay cosas valiosas que proteger y no las apreciamos cuando las tenemos, hasta que las perdemos...
Yo, tuve que perder a mi padre para entender lo que es ser un verdadero shinobi. Él cumplió su misión, ahora es mi turno de cumplir mi camino ninja...
El séptimo hokage, Uzumaki Naruto, mi padre, murió con una sonrisa en su rostro, como un héroe, como un auténtico y verdadero shinobi.
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