Recordando el pasado

141 6 0
                                    


Luego de un rato, Diana se separó de fede y este mismo odio su accionar, anhelando volver a tenerla en sus brazos. "¿Pero que estoy pensando?", pensó fede, sin poder creer el rumbo que habían tomado sus pensamientos. "Solo es una amiga, nada más." se dijo a si mismo, recordando a flor y el amor que aún seguía allí, latente.

- ¿Puedo preguntarte algo? - le pregunto la chica, con una seriedad que asustaba. Fede asintió, sin saber a dónde quería llegar y ella le interrogó - Cuando vos decís "Juntos", ¿No te referirás a tener algo... más... sexual? -  fede se sonrojo en cuánto ojo la pregunta y negó con la cabeza con rapidez. Eso le causo risa a la morena, ¿Desde cuando un hombre se sonrojaba por hablar de sexo? - Perdóname si fui desubicada, pero es mejor dejar las cosas claras desde un comienzo.

- ¡Ni loco! - exclamo desde, de solo pensar en intimar con alguien que no fuese florencia y le aseguró - Para mí, vos sos una amiga como tute, nada más.

La chica suspiro aliviada, ignorando la molestia que sintió por dentro. Pues ella no quería nada con él, por más que pensará que era guapo, bueno y que le hacía recordar a su adri. Antes muerta que deshonrar su memoria y el amor que aún sentía por ella. Diana le sonrió en respuesta y le contesto, aliviada - Me alegro de que pensemos lo mismo.

- ¿Acaso algún amigo se enamoró de vos? - le pregunto fede con desconfianza, sintiendo molestia de solo pensar que un chico podría estar con ella.

- Ehh....naa, nada que ver. - mintió la chica de forma muy poco convincente. No es que quisiera contarle, pero sentía que no debía saber eso aún. Para desviar la atención, le dijo - Ahora que lo pienso,  no se casi nada de vos ni vos de mí. No estaría mal preguntarnos cosas acerca de nosotros...ya sabes, lo básico: nuestra edad, segundos nombres, hábitos. Ya sabes, para conocernos mejor. Y más ahora, que te tengo que ayudar.

- Es cierto. - le dio la razón y agrego - Y mas ahora, que tenemos la misión de engañar a mi propia familia, dicho sea de paso.

- Si, sobre todo a mati. - le dijo diana y le confeso - Aunque se me hará algo difícil: jamás le he ocultado nada. Ya que no nos guardamos ningún secreto.

- No sabia que...fueran tan cercanos. - le dijo fede, algo molesto ante lo que parecía demasiado obvio. Pues podía observar el cariño con que hablaba de su mejor amigo. Aunque no debería de sorpréndele, habían pasado muchas cosas mientras el estuvo muerto.

- Si, lo somos. - le confirmo la chica y continuo - Pero no te preocupes, que sea cercana no significa que no te vaya a ayudar. Claro que me sabe mal mentirle, pero es necesario en este caso: tenemos que garantizar tu seguridad. Y hare lo necesario para llevarlo a cabo. - aseguro la joven con determinación.

Fede asintió, incapaz de ir en contra de la seguridad en su voz. Esa chica cada vez lo sorprenda mas, pues resultaba obvia su predisposición de ayudar a otros, aunque eso significa ocultarle la verdad a alguien tan cercano para ambos. El rubio apenas se podía reconocer a si mismo. En otra época, el hubiera odiado (Y posiblemente, ni lo hubiera consentido) decir una mentira u ocultarle la verdad de tan maño calibre a alguien a quien consideraba su hermano. Pero, al parecer, los tiempos cambiaban y el tenia que hacer lo que fuera necesario para que su familia no supiera absolutamente nada. Una vez mas, la vida le estaba enseñando que no todo era blanco o negro, sino que había una variedad de grises y que mentir o engañar no eran mas que el desenlace de esos grises.   

- Bien. - se limito a decir fede con voz impersonal y le pregunto - ¿Cuál es tu nombre completo?

- Diana Calamiello. - le contesto ella y le respondió con otra pregunta - ¿Cuántos años tienes?

- Tengo 25 años. - contesto fede, algo confundido y agrego - O al menos, los tenia hace casi 16 años.

- Mierda. -musito la chica, sin poder creer que el chico hubiera quedado congelado a esa edad. 

Si no fuera FlorenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora