Capítulo 15

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"..Sweet creature

Had another talk about where it's going wrong

But we're still young

We don't know where we're going

But we know where we belong.."


La mañana del martes me levanté con Peter enredado en mis sábanas, abrí un ojo y giré sobre mi cuerpo estirando mi brazo para agarrar mi celular. Estaba estallado de mensajes. El rumor de mi separación ya era casi una confirmación por redes sociales. Un periodista de espectáculos fue él que se comunicó directamente conmigo. No solo le confirmé la separación, sino que también le pedí unos minutos para hacerlo yo antes que él. Y así fue, envié un tweet informando que estaba separada, y automáticamente mis redes sociales activaron una cadena de mensajes interminables. Leí algunos de los que iban llegando en forma de apoyo y dejé el teléfono en la mesa de luz. Estiré mi brazo nuevamente pero para abrazarlo a Peter. Besé su espalda despacio para que se despertará. Habíamos tenido una noche larga e intensa juntos, por eso recién a las once de la mañana logré despertarlo. Sus ojos estaban completamente cerrados mientras preguntaba qué hora era con su voz aún dormida. Sonreí y le prometí el desayuno en la cama, asintió sonriendo para volver a girar y poner su almohada sobre su cabeza.

La cabeza ya empezaba a dolerme mientras miraba fijamente cómo la cafetera hacia nuestro café. Puse mi mano en mi frente y presioné para calmar el dolor de alguna manera. Las primeras dos tostadas se me quemaron y putee en silencio mientras las raspaba – iban a ser para mi – y puse las otras dos. Armé la bandeja y cuando subí a la habitación lo vi sentado en la cama, refregándose los ojos con su celular en la mano. Seguramente ya se había enterado que había confirmado mi separación, porque sin decir nada, pero diciéndolo todo, estiró su mano para que la agarrara y cuando lo hice después de apoyar la bandeja en la mesa de luz, me tiró sobre él y me abrazo fuerte.

- ¿Estás bien vos? – dejó un beso en mi boca y asentí –

- ¿Ya te enteraste? – reí y él también, por eso asintió y volvió a besarme – Sí, estoy bien, muy bien – sonreímos juntos –

- Ah mirala – señaló la bandeja – no podes más de amor por mí ¿no? – escupí una carcajada y él colocó sus brazos detrás de su cabeza y sonrió orgulloso –

- ¿Te levantaste con ganas de burlarme? – levanté un hombro y coloqué la bandeja en la cama –

- Un poco, pero es más divertido cuando saltas – besó mi cuello –

- No voy a darte el gusto – sonreí orgullosa y le pasé su café - ¿Tenes mucho qué hacer hoy? – lo miré –

- Voy a tener que ir a mi casa un rato, ¿sabes? – asentí y mordí la tostada, que todavía tenía gusto a quemado – ¿Vos, qué vas a hacer? –

- No sé – suspiré – creo que voy a sentarme a trabajar un poco más el disco, me corren un poco las fechas, y quisiera tenerlo más armado – sonreí de costado –

- ¿Hay una canción para mí? – negué con la cabeza y me mordí el labio –

- Definitivamente, te despertaste chistoso hoy – rió y negó, se acercó a mí para besarme –

Peter salió de mi casa con su mochila y sonriendo. Dejo un beso en mi cabeza mientras yo hablaba por teléfono. Acordé una reunión en las oficinas de Sony para determinar el rumbo de la nueva música. Mientras manejaba hacia mi destino, mi teléfono rebasaba de mensajes, mis amigas festejaban, algunos que solo eran conocidos me daban el pésame y mis fanáticos se dividían entre los que festejaban – y me hacían reír – y los que buscaban consolarme. No tardó mucho en llegar los mensajes preguntándome si había un tercero en discordia, y me encargué automáticamente de negar esos rumores. Me vinculaban a mí con un compañero de rodaje, que nada más lejos, lo que no sabían, mientras especulaban, es que a pesar de que la relación estaba completamente desgastada, quién me había ayudado a dar ese paso, había sido mi ex novio. Me sentía libre, porque los burlaba sin que ellos lo supieran, y aunque quienes nos seguían a nosotros dos, hace muchos años, empezaban a rezar o a pedir por nuestra vuelta, tampoco lo sospechaban. Todo marchaba mejor de lo que esperaba. Estaba en Buenos Aires, dormía con Peter todas las noches, veía a mi familia y compartía tiempo con mi ellos, pero además tenía tiempo de dedicarme a mi música. Con Peter, al no haber oficializado en ningún momento, no tocábamos el tema. Sé que él lo esquivaba mejor que yo, porque tenía la suerte, que su vida personal, solo se había visto afectada en determinados momentos, pero siempre mantuvo el perfil más bajo que pudo, y lo había logrado. Me asustaba, porque era inevitable que si en algún momento decidíamos mostrarnos juntos, no estaba tan segura de que pudiera soportar tanta exposición.

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