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Maratón [2/3]

—Entonces, Jimin a la panadería, Yoongi tú ve al restaurante de los señores Bong, tú Taehyung al hospital y Hoseok y yo a la cafetería dónde se conocieron.—Ordenó Seokjin bajo la atenta miradas de todos los chicos (a excepción de Taehyung, quién estaba incrédulo. ¿¡Cómo Yoongi lo había convencido!?).—¿Quedo claro?

Hoseok, Jimin y Yoongi asintieron al unísono. Seokjin alzó una de sus cejas al ver que Taehyung solo lo miraba fijamente con unos ojos llenos de confusión y algo más que no sabría descifrar. 

—¿Qué pasa, Taehyung? ¿No te quedó claro?—Cuestionó. 

—¡Lo que pasa es que le da miedo!—Exclamó Yoongi.

Taehyung abrió sus labios, con cierta indignación. 

—¡No me da miedo, es un tonto hospital!

—Ay, mentiroso, tu sabes que te da miedoo.—Canturreó Hoseok.

—¡Hey, compórtense!—Gritó Jimin, llamando la atención de todos los demás chicos. Sus mejillas adquirieron un color rojizo, algo apenado por haber gritado.—Recuerden que estamos aquí para ayudarme a encontrar a Jungkook, no para pelear.

—Exacto, ¡Ese es mi esposo!—Yoongi aplaudió. Todos los demás voltearon ahora a verlo a él, en completo silencio.—¿Qué? ¿Por qué me miran así? Mejor caminen imbéciles.


Taehyung daba pasos apresurados y algo confusos, ya que no recordaba muy bien el camino al hospital abandonado. Sus pies ya se encontraban cansados y dolían, y sinceramente ya estaba perdiendo la calma y la paz que tenía aquella mañana.

Recordó la vez que Jungkook le dijo que a veces se quedaba a dormir allí. Él pensaba, ¿cómo? ¿acaso no le da miedo? y después ¿pero por qué?, y luego ¿será que se encuentra allí?. Su mente era todo un torbellino, sentía que explotaría en cualquier momento. 

—Dios, Taehyung—Habló para sí mismo. ¿Qué diablos se encontraba haciendo? 

De verdad que deseaba y anhelaba con toda su alma que Jungkook no se encontrará allí. No sabría que hacer, que decir. Un ''hola, sé que te grite y traté mal, pero novio de mi amigo te busca y necesito que vengas conmigo'' sería muy raro. O eso creía él. ¿Debería pedirle perdón? ¿Dejar que se explicará? ¿O simplemente no ir al hospital abandonado y huir? 

Sí, podría irse de Corea, así no se sentiría tan mal por Jimin. Él había escuchado que Hawai era un buen destino. 

Sacudió su cabeza, sacando todos esos tontos pensamientos y soltó un gran suspiro cuando terminó al frente de la fachada de ese (tenebroso) hospital. Nunca se cansaría de decir que ese lugar le daba un miedo pero de que te cagas en los pantalones. Es que, ¿quién en su sano juicio le gustaría venir hacía acá? 

Obvio, solo a Jungkook.

Contó hasta tres (varias veces) antes de entrar en el lugar. Estaba exactamente como lo recordaba la única vez que fue, igual de espeluznante. Juraría que de alguna habitación saldría Gasparín a saludarlo. 

Caminaba consumido en sus pensamientos, recordando que tenía que pasar por dos pasillos más para llegar hasta las escaleras que lo llevarían a la azotea, dónde recordaba que se encontraban las cosas de Jungkook, pero sus pasos frenaron de golpe cuando oyó algo moverse. Era como si arrastrarán una camilla, y Taehyung juró que podía sentir sus bolas en la garganta*. 

Se quedo estático en aquél lugar, mirando rápidamente a sus alrededores. Estaba por la mitad del segundo pasillo, a su derecha se encontraba una gran cartelera de madera, dónde suponía que pegaban los avisos cuando el hospital estaba en función, y a su izquierda se encontraba una habitación, la cuál tenía la puerta entreabierta. 

De allí había provenido el sonido. 

Pensó en entrar a la habitación para saber qué era. También pensó en correr. Pero nada de eso lo podía hacer, era una sensación horrible, sintió que sus piernas se habían congelado y ya no tenía el control de estás. Solo estaba parado allí, esperando a que la vida lo golpeará en la cara nuevamente.

Como no había escuchando otro algún sonido salir de allí se tranquilizó a sí mismo, diciendo que solo fue su imaginación, pero en ese momento la puerta se terminó de abrir. 

No miró nada, no tuvo tiempo de reaccionar. Lo único que hizo fue gritar. Gritó como nunca antes en su vida había gritado, la vena de su cuello y frente se podían apreciar claramente. Su piel palideció y sus piernas flaquearon, todo le falló en aquél momento y se desvaneció, acabando desmayado en el suelo.


—Taehyung...Taehyung...¡Taehyung!

El mencionado se levantó de golpe, aturdido y confundido por lo que había sucedido. Su cabeza dolía, al igual que todo su cuerpo. De pronto, recordó que se encontraba en el hospital abandonado y estaba a punto de levantarse de donde se encontraba tirado, pero un cuerpo cayó encima de él, asustándole aún más.

—¡Que bien que estás aquí!—Le dijeron. Y entonces supo quién era. Solo una persona tenía esa tan inefable voz y ese era Jungkook. Sus ojos divagaron por su cabellera castaña, pasmado en aquél lugar.

''Que bien que estás aquí'', ¿eso significaba que no estaba molesto por la forma en que lo trato? Entonces, ¿no había razón por la cuál sentirse mal y tenso? Era algo inexplicable, se supone que él no quería verlo, pero su corazón se encuentra latiendo a mil y sus brazos habían correspondido el abrazo de Jungkook sin darse cuenta.

Taehyung no hablaba, a pesar de tener miles de sentimientos por dentro, su rostro ahora no expresaba nada. 

—Déjame que te explique, por favor...—Susurró Jungkook, separándose del abrazo que le había estado dando al mayor.

—Ah, ¿qué me quieres explicar?—Habló con voz ronca. Se levantó del piso y sacudió sus pantalones, quitándose cualquier partícula de polvo.

—Tu sabes lo que te quiero explicar.—Jungkook mordisqueó su labio inferior.—Sé que odias mucho y que me ves como alguien malo, pero realmente quiero explicarte porqué hice lo que hice.

Taehyung guardó silencio un minuto mientras que sus ojos repasaban a Jungkook. Parecía estar más delgado, sus grandes y bonitos ojos avellanados habían perdido el brillo que alguna vez resplandeció en ellos. También deducía que la ropa que tenía puesta no la había lavado hace días. Se miraba triste, algo decaído y Taehyung se sintió raro. Tuvo un mal presentimiento de todo aquello.

—Está bien, explícame. 


* Es una expresión de cuando sientes miedo. ''Las bolas se me subieron a la garganta.''

Ej: Ay, la moto se devolvió tres veces. Sentí que las bolas se me subieron a la garganta. xD

bRoOO, estoy teniendo problemas con el wifi juSTO AHORA, jUSto HOY.
venezuela es 1 chistexd

quiero poder publicar el tercer capítulo prometido del maratón para más tarde, pero si el internet no me deja lo terminaré publicando mañana, espero que comprendan):

lxs quiero mucho, tomen agua, coman sano y atropellen pedófilos <3

Nudes | VkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora