Nudes | Vkook

057

Taehyung.

-Te lo juro, angelito. Lo he pensando mucho, y creo que es la mejor idea que pude haber tenido.- Imploré, sin tener respuesta a cambio. - ¡Hazme caso!

Mi querido novio, tan hermoso el como siempre (notese el sarcasmo, si es hermoso, eso no lo dudo, pero estábamos en un momento crucial de nuestras vidas y se negaba a escuchar) arrugó su entrecejo.

-¿Me acabas de gritar? -inquirió, a lo que yo negué con la cabeza.

- Simplemente exclamé con impaciencia. - el bufó. - si nos esta yendo tan bien, ¿por que no intentar?

Por supuesto que nos estaba yendo bien. Les resumo, Jungkook entró a terapia, ha estado yendo sin faltas y ha tenido un muy gran avance, y estoy muy orgulloso de el por eso, por supuesto, que haya tenido un muy bien desempeño con su terapeuta no significa que de la noche a la mañana dejara de ir, tiene que pasar un poco más de tiempo para asegurarnos que esta lo suficientemente estable. 

Tambien se inscribió en la escuela nocturna. Al principio estaba muy desanimado porque decia que esas escuelas eran para señores de cuarenta años que jamas se graduaron, pero despues de regañarlo por haber dicho ese comentario el día en que se estaba inscribiendo, justo en la fila donde estaban algunos señores mayores inscribiéndose tambien, el entendió que lo importante era progresar sin mirar atrás. Lo bueno de esas escuelas es que en aproximadamente cuatro meses te graduas. 

Luego de terminarla estuve en la búsqueda de una secundaria nocturna para él. Entre todas las que habia, elegí la que creí más adecuada, con un horario adaptable a su nuevo trabajo, y que pudiera graduarse rápido. Esta vez, el acepto sin quejas porque era algo que él quería y necesitaba. 

Ha pasado un año y cuatro meses desde entonces. Se graduó justo hace cuatro meses, y durante su pequeña ceremonia no dejaba de mirar y sonreirle al título,  ¡toda su atención se la llevó ese trozo de papel!

Ahora, le estaba rogando para comprar una casa más grande. Nosotrros viviamos juntos desde hace un tiempo, pero el apartamento donde estamos es minusculo. No puedes hacer alguna actividad física con libertad y la sala es del tamaño de un cacahuate. En el baño se filtra una pared y desde nuestra habitación los vecinos nos pueden ver o escuchar cogiendo. Y era excitante, pero ahora es perturbador. 

Necesitamos un espacio mejor.

- Amor...- él suspiró, cansado de la situación. - no tenemos suficiente dinero para pagar una casa así aún, ni con patio como decíamos que la queríamos, ni con dos habitaciones, ni una sala mas grande. - decía en tono de regaño, pero se que por dentro se sentia triste al decirlo. - aún no tengo una carrera finalizada, ni siquiera me he inscrito aún, y por si no lo recuerdas, trabajo en un simple cybercafe...

- Yo se todo eso, angelito, pero...

- Dejame hablar. - me miró con los ojos entrecerrados, y yo exhale, buscando toda mi paciencia. - y si, tengo ahorros, pero aún así no nos alcanza. Y yo sé que trabajas duro, pero no creo que tu trabajo te de lo suficiente para esto. 

Abrí mis labios indignado.

- Primero que nada, auch. - él me miró arrepentido por haber dicho eso último. Yo sonreí para que no le diera importancia. - Y como te decía, yo sé todo eso. Lo que no tienes en cuenta es que yo reuno desde mucho antes de conocerte. Además, si no tenemos una casa que si parezca un hogar, ¿donde tendremos a nuesto perrito?

Jungkook me miro confundido. 

- Taehyung, nosotros no tenemos perro. - aclaró, como si fuera obvio. 

Yo sonreí, nervioso, porque esto solo podría salir de dos maneras; uno, se pondría feliz, me abrazaría, besaría y cogeríamos como conejitos teniendo precaución de los vecinos chismos. O, dos, me rompería un florero en la cabeza por hacer cosas que no debería.

- Claro que tenemos uno. -Dije, aparentando calma. - ¡Milo! - exclamé, y tan pronto como lo hice se escucharon los ladridos provenientes del pasillo de afuera del apartamento y un cachorro de cinco meses apareció por la puerta robusta que había dejado abierta minutos atras cuando llegue del trabajo, dando su gran entrada triunfal a esta mini familia.

Volteé a ver la cara de mi novio, y no podía descifrar muy bien su reacción. Era como si tuviera diez reacciones combinadas en una, sus ojos estaban brillantes, sus labios en una mueca de sorpresa y sus cejas estaban hacia abajo, en clara señal de enfado. Por un momento, tuve el presentimiento de que se iba a levantar del sillón donde estábamos y me iba a golpear, pero despues de dos minutos así su cara se relajó.

Suspiró, viendo como el cachorro jugaba con los dedos de sus pies y sonrió, para posteriormente mirarme a mi. 

- Muy irresponsable de tu parte. - me regañó y yo rei. - hablo en serio, ¿que haremos con el?

- Es nuestro. - le dije, tomando seriedad. - y tambien sera nuestra la casa con un patio que queremos, porque yo tengo los medios y lo haré posible, porque te lo mereces tan solo por existir y un hermoso angel como tu no puede vivir en una pocilga como esta. Así que, nada de ponerte a la defensiva con esta idea y es hora de apoyar a tu sexy y guapo novio y acompañarlo a ver casas bonitas que tengan un agradable patio donde nuestro Milo pueda jugar.

Vi como permanecía en silencio, meditando todo lo que dije recientemente. Parecia saborear cada oracion, se tomaba el tiempo de manejar la informacion, desencriptarla y buscarle una respuesta a eso. 

- Esta bien, amor. - se rindió en su discusión inútil y no dude en lanzarme encima de él, provocando que cayera hacia atrás en el sofá, y besé sus labios repetidas veces y de manera rápida.

- Te amo muchísimo, mi ángel precioso.Tte prometo que no te vas a arrepentir. 

Él sonrió abiertamente, mostrando sus blanquecinos dientes, y besó la punta de mi nariz.

- Yo también te amo mucho. Y espero que el que no se arrepienta seas tu. 

Yo negué, mirándolo acusadoramente. 

- No te atrevas a decir esas cosas, shh. - cubrí su boca con una de mis manos y besé su frente. - Ese es el diablo quien te obliga a decir eso, yo jamás me arrepentiría. 

él alzó su mano para quitar la mia que le impedía hablar.

- Pero es verdad que te amo mucho. - Sonreí recibiendo el beso que me dio.

- Bueno... - miré hacia el techo, fingiendo pensar. - ya tenemos el perro, pronto la casa... - lo volteé a ver nuevamente. - ahora tenemos que casarnos. 

Él me miró expectante. 

- Cuando me lo pidas, hazlo bien. - sugirió, y abrazó mi cintura con sus piernas acercando más nuestros cuerpos. 

- ¿Y por qué no me lo pides tu?

El rió ronco, con su boca cerca de la mia. Joder, ya me estaba encendiendo. 

- Porque yo quiero que lo hagas tu. - dijo simplemente y acerco sus labios a mi cuello, rozandolo lentamente. Mi piel se erizo y mi cuerpo automaticamente reacciono esparciendo la sensacion de calor por todo mi sistema. 

- Tu ganas, lo hare yo.,

Ambos reimos, y nos fundimos en un beso que significaba muchas cosas; crecimiento personal, como pareja, nuevas metas, un nuevo futuro. Un ''si'' pendiente, un amor interminable, un amor apasionado, un amor que jamas se podra apagar.

Porque yo, amo a mi Jungkook.

***

Capitulo sin editar.

Lamento si hay fallas, palabras en minusculas o me comi tildes, es que estoy desde una tablet donde no se donde se ponen sjdskjd.

El capitulo sera editado proximamente, muchas gracias por leer.

Portense bien, hagan su tarea, tomen mucha agua y atropellen pedofilos;3