Capítulo 10. Infancia.

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—Mira, todo lo que ocurrió ayer, fue sólo un impulso mío, nada más. Así que olvídate de todo lo que pasó, ¿entendido? —escuchaba Natsuki cada minuto en su cabeza, mientras iba al lugar en donde se hospedaría.

—¡Tōshirō idiota! —pensó, junto a un sollozo—. ¿Cómo fui tan tonta?

Seguía yendo de techo en techo por la ciudad de Karakura hacia su destino, un lugar llamado «Tienda De Urahara».

Luego de un corto tiempo, llegó al pequeño patio que estaba en frente de la tienda. Ahí vio a una pequeña niña, de cabello un tanto morado agarrado en dos coletas, que estaba barriendo la entrada

Natsuki se limpió las lágrimas que quedaban en su cara, pero, sabiendo que tenía la nariz roja, al igual que los ojos, se dio vuelta por un momento, esperando que se le pasase. Por lo menos el color rojo desapareció un poco.

—Esto... —comenzó a hablar la pequeña—. ¿Qué se le ofrece, señorita? —preguntó, con una sonrisa amable en su rostro.

La muchacha se puso frente a la pequeña, caminando lentamente hacia ella. Ésta, al darse cuenta de la situación en la que se encontraba la mayor, se preocupó; no era común ver a una persona en aquel estado.

—¿Está bien? —cuestionó esta vez preocupada, dejando la escoba en el suelo, para después dirigirse a la contraria.

—Sí... creo... —dijo, insegura.

—Soy Ururu, ¿usted es? —preguntó, observándola de pies a cabeza.

—Iwakura Natsuki, capitana del catorceavo escuadrón —se presentó en un susurro casi inaudible.

—¡Oh! Usted es la que se quedara aquí por una prueba de la sociedad de almas, ¿cierto? —inquirió, manteniendo su sonrisa.

La capitana sólo movió su cabeza, asintiendo.

—Venga, por favor —dijo, realizando un corto ademán con su mano, pidiéndole que la siguiera hacia adentro de la tienda. Natsuki captó aquello, por lo que la siguió.

🔥❄️

—Así que tendrás a otro huésped, ¿eh, Kisuke? —dijo Yoruichi en su forma humana.

—Exacto, Yoruichi-san —respondió el nombrado.

—¿Y quién es?

—La capitana Natsuki Iwakura... Te suena, ¿no?

Mientra decía aquella información, movió lentamente su abanico, el cuál se encontra frente a su rostro, cubriendo éste, junto a una sonrisa invisible frente a la visual de la morena.

—¿¡La enana de Natsuki!?

En aquellas cuatro palabras el entusiasmo de Yoruichi era muy notorio; tenía los ojos bien abiertos y una sonrisa de oreja a oreja.

—Si te refieres a Natsuki Iwakura, perteneciente a una de las casas nobles, pues sí, estás en lo correcto.

La ex shinigami soltó una gran carcajada después de eso.

—Vaya —dijo luego de calmarse—. Hace mucho que no la veo, me pregunto ¿cómo estará...? ¿Cómo habrá conseguido un puesto en el SeiReiTei...? —Sonrió burlona, pero después de unos cortos segundos su expresión cambió por completo; aquella sonrisa se desvaneció al instante, mostrándose así completamente seria—. También tengo la duda de cómo se encontrará luego de todos estos años en los cuáles estuvo internada por culpa de Genryuusai.

Al decir esto, recuerdos del día en que Natsuki fue encerrada llegaron a su mente, cosa que la hizo fruncir el ceño, molesta.

Kisuke, al escuchar esto, se limitó a suspirar, con algo de molestia también.

La nueva capitana (Toshiro Hitsugaya)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora