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OJO POR OJO

-2 MESES DESPUÉS-

El relámpago amarillo y Ego se encontraban en un callejón cerca de un gran almacén, Keitaro intento ir solo pero su padre lo encontró y fue junto a el a acabar aquello que comenzaron.

Los 2 se encontraban esperando, Minato mantenía una ropa vieja que encontró en su casa, pues no quería usar su traje de héroe para este momento.
Por su lado Keitaro usaba su traje de Ego, a la vez que en su espalda mantenía una katana corta

Minato vio entrar a unos pocos criminales a este almacén e informo a Keitaro -Reconozco esos atuendos, son de la legión, aunque para ser mas concreto son de una rama de la Yakuza que se les unio-

-¿A que te refieres padre??- pregunto Keitaro

-Claro, no sabes de esto... La legión fue lo que me causo mi descontrol sobre mi red de chakra por lo que se mucho de ellos, la legion no es una simple organización de Japón, esta es conocida mundialmente por héroes y criminales, se caracteriza por reclutar otras organizaciones pequeñas o mas grandes, y al parecer esta Yakuza trafica con órganos-

-Ya veo, sabes mucho ¿Pero "Órganos"?- Keitaro estaba sorprendido por la información

-Hay un sistema de honor entre ellos, el color rojo en sus uniformes significa que son escoria del mas bajo mundo, pues el rojo es para camuflar la sangre que llevan en ellos... Además acabo de ver a un hombre con capsulas para órganos-

Keitaro y su padre se dirigieron cuidadosamente al almacén, no había lugar por donde entrar, todas las ventanas tenían barrotes y las puertas estaban bloqueadas... Esto hasta que alguien salió a fumar un cigarro -Cuf cuf, que mierda de lugar, espero me asciendan pronto

Minato lo tomo de imprevisto y le tapo la boca, seguidamente lo asfixio hasta dejarlo inconsciente -Vamos

Al entrar vieron un gran almacén de 3 pisos, aunque para los 2 superiores se usaba un piso de metal, el cual dejaba algunos huecos para pasar por ahí la maquinaria y cargamentos, hablando de maquinaria, se podían apreciar algunas grúas y elevadores, los cuales de vez en cuando se movían con algo de cargamento, tal vez no solo traficaban órganos...

Keitaro miro al hombre, el cual seguía vivo e hizo una cara de asco -No lo mataste, es escoria

-Ya hemos hablado de esto, no todos los criminales deben morir

-P-pero simplemente estamos haciendo que la escoria siga existiendo!

-Hay "escoria" que no es del todo mala, algunas personas pueden llegar a redimirse- Minato apunto su dedo hacia 3 miembros -Luego hablamos

Keitaro asintió a regañadientes y cerro sus ojos para activar su habilidad sensorial «Veamos...» Pensó Keitaro -Son 32... no, 30, no 28- Keitaro abrió sus ojos confundido, pues su habilidad sensorial no estaba funcionando bien

-Vamos Keitaro, ya te e enseñado, canalizas chakra en tu cerebro para aumentar tus sentidos y poder sentir a los demás- Minato puso su dedo índice derecho en el suelo para sentirlo «Son 28... ¿29? ¿Pero que? Mi habilidad sensorial tampoco funciona bien» Pensó Minato

-Ya vez?

Minato cerro los ojos agobiado y los volvió a abrir -Como sea, vamos por esos primero- Los hombres que había avistado Minato estaban a 3 metros de distancia, aunque no eran capaces de ver al dúo padre e hijo por un de metal que sostenía al 2do piso

Minato contó a 3 y en cuanto la cuenta termino este lanzo un kunai especial, seguidamente se tele-transporto hacia uno, mientras que Keitaro uso un shunshin que lo llevo al hombre en un instante.
Minato ataco al primero matándolo con el kunai que lo había tele-transportado, mientras que al segundo le dio una patada en la cara que lo noqueo, por su lado Keitaro utilizo su espada para penetrar al hombre