15; impulsos.

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Tras la jornada de clases, el dúo de amigos terminó separándose por las clases de regularización que tenía la chica como cada día de la semana, aunque en fechas de exámenes era completamente opcional faltar a las clases, Jisoo sólo asistiría para darse un tiempo para ella, sólo se sentaría en una banca y con la mirada en la ventana y la cabeza en las nubes se daría aquel tiempo que necesitaba para sí misma.

De acuerdo a su plan, al llegar al aula y ser educada saludando a las personas dentro del cuarto se sentó en la última banca de la esquina del salón junto a la ventana y miró esta mientras comenzaba a recordar todo lo que había pasado en este tan largo y tortuoso día. Inevitablemente entre su mar de pensamientos el nombre Namjoon terminó inundando su cabeza.

¿Por qué pensaba tanto en la persona que le había hecho daño? Quería que el nombre del mayor desapareciera de su cabeza pero mientras más lo intentaba más recordaba todo lo que pasó con él antes de confesarle su deseo de ser un hombre. Dios... se estaba arrepintiendo tanto de habérselo contado, ¿por qué tenía que ser tan impulsiva? Había escrito cientos de guiones de cómo salir del clóset pero terminó haciendo lo que jamás quiso: dejarse llevar por sus impulsos. ¿Por qué debía ser tan sensible? ¿Por qué dejarse llevar por lo que le dice el corazón y no la cabeza? Había más preguntas que respuestas y sólo terminaba echándose la culpa porque era lo único que podía llegar a hacer bien.

El profesor carraspeó llamando la atención de toda la clase, los ojos de todos los pocos alumnos que estaban ahí presentes le miraron expectantes porque sabían que cuando aclaraba su garganta era porque algo sucedería.

– Señorita Jisoo– los ojos de todos pasaron a la chica de cabello corto, misma que miró confundida al mayor.– el joven Jungkook la necesita.

Sonrisas pícaras y murmullos maldiciendo escuchó mientras salía de aquellas filas de bancas con estudiantes sentados en estas. Con una leve reverencia se despidió del profesor, salió del aula con todo y mochila y una vez sus pies tocaron el pasillo la puerta se cerró tras de ella, la cercanía de un cuerpo hizo que girara su cabeza encontrándose con el mismo chico el cual el profesor había mencionado.

Jungkook estaba recargado en los casilleros con uno de sus pies sobre estos, cruzado de brazos y con la cabeza en dirección al techo con los ojos cerrados, abrió los ojos justo cuando escuchó la puerta cerrarse y giró su cabeza encontrándose con la menor, misma a la cual le sonrió cálidamente siendo correspondido de la misma manera.

– Hola, Chu.– saludó con aquel tono tan relajante y suave que solía tomar cuando tenía un humor  animado.

– Hola... tanto tiempo.– balbuceó mirándole con cierta curiosidad y extrañeza, y es que había olvidado la última vez que había hablado con el mayor.

Jungkook bufó reprimiendo una sonrisa y con un ademán le dijo a la chica de cabellos cortos que la siguiera, Jisoo ni rechistó y caminó a la par del otro caminando por los pasillos que con el paso del tiempo se iban oscureciendo por el atardecer de aquel día.

– ¿Por qué de repente me llamas? ¿Pasó algo entre tú y Yoongi?– bingo, había acertado a la primera de qué quería hablar el chico con ella.

El mayor asintió parando su andar y recargando sus brazos en la ancha ventana en medio del pasillo mientras miraba fuera de la escuela las calles comenzando a llenarse de autos y personas caminando, seguramente directo a sus casas para descansar.

I want you - JimSuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora