I want you - JimSu

34; complementarios.

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A la mañana siguiente llegó tarde a clases.

-Te ves horrible. -Mencionó Seokjin al verlo de esa manera, llamando la atención de Namjoon dirigiendo su vista a Yoongi quien dejó caer su mochila en el suelo al lado de su pupitre, haciendo que el más alto asintiera con la cabeza dándole la razón al otro. Yoongi solo bufó exhalando aire mientras se sentaba en el asiento.

Su uniforme estaba sumamente desordenado, arrugado e incluso Seokjin podría decir que la mancha blanca de su saco se trataba de pasta dental, pero Yoongi estaba demasiado desanimado como para poder mencionárselo con una carismática broma, sabía que el menor se lo tomaría a mal y prefería evitar rabietas tan temprano. Namjoon pareció también decir algo al respecto de su aspecto, sobre todo de su cabello mal peinado que detrás tenía mechones sin acomodar que parecían ondulaciones debido a una larga siesta.

Pero no era así, Yoongi no había dormido ni cuatro horas seguidas porque después de ordenar su cuarto se le hizo una excelente idea darse de premio terminar uno de los tantos animes que tenía pendientes de ver desde hacía tiempo, fue a la cocina por un par de galletas y leche y cuando se dio cuenta ya eran las dos de la mañana. Intentó dormirse en cuanto pudo, pero justo sus vecinos estuvieron haciendo ruidos extraños la próxima media hora, aunque al principio de preocupó al pensar que eran gritos de agonía, rápido se le quitó esa idea cuando escuchó los rechinidos de la cama y otros sonidos que prefería borrar de su mente lo antes posible.

Las clases terminaron más rápido de lo que había deseado Yoongi y salió disparado al baño para poder quitarse las cara de sueño que tenía y poder ocultar sus ojeras para que su cara de muerto no preocupara a los profesores y no lo terminaran llevándolo con la subdirectora por su actitud negativa, solo tenía sueño y quería quedarse dormido en la clase de Lengua si pudiera.

Al salir del baño allí estaban Seokjin y Namjoon, esperándolo mientras veían pasar a los alumnos y decirse cosas al oído, sabía que estaban juzgando a manera de broma, era algo que a Seokjin le encantaba hacer. Sin embargo antes de llegar a sus amigos fue empujado por un par de chicas que no se disculparon, ni siquiera tuvieron la decencia de pedirle permiso para pasar y, cuando iba a reclamarles, al mirar a quién se dirigían quedó con la boca abierta y sus ojos parecían a punto de salirse de sus órbitas.

Jungkook.

O lo que creía que era su mejor amigo, puesto que ese chico golpeado y lleno de curitas adhesivas en la cara con alguna que otra cicatriz sanando no parecía ser el chico deportista popular que la escuela conocía. Ambos cruzaron miradas, y eso fue suficiente para que Yoongi cambiara la dirección de sus pies para dirigirse rápidamente hacia el más alto, corriendo hasta el otro extremo del pasillo apartando a cada chica que se cruzaba en su camino hasta llegar a él.

-¿Qué carajo te pasó? -La expresión de Yoongi era indescriptible, toda la preocupación y tristeza se desbordaba de su semblante que, cuando Jungkook se lanzó a abrazarlo, todas las chicas que invadían su espacio personal hicieron un círculo alrededor de ellos, ambos escucharon las voces femeninas susurrarse cosas entre ellas tras sus manos, pero a Jungkook no le importaba y Yoongi seguía en estado de shock para asimilarlo.

-Te quiero, Yoongi. Te quiero demasiado. -Escuchar su voz quebrarse en medio de sus palabras rompió el corazón del menor, lo abrazó con fuerza, sintió el corazón de Jungkook acelerado y supo entonces que quizá lo único malo no eran solo los golpes-. Voy a vengarte, juro que lo haré.

El Chico lindo quedó pasmado ante aquellas declaraciones 

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