Violeta Jackson | 5SOS

Capítulo 12

V i o l e t a
📍 Sydney, Australia.

Esculpí con papel y limpiacristales por última vez mi ventana haciendo que esta chirriara de una manera ensordecedora. Sonreí al ver como esta se encontraba reluciente, orgullosa de mi misma.

Salí de mi habitación y volví a entrar a esta para ver como verían otras personas lo bien recogida y limpia que estaba.

Hoy me encontraba muy realizada.

Me senté en mi cama y tomé mi ordenador portátil para revisar tranquilamente mis redes sociales. Victoria no se encontraba en casa, había salido a comprar algo de ropa abrigada junto a Ashton y Kaykay ya que ella se quedaría más tiempo de lo acordado con nosotros.

Decidí revisar primeramente twitter y me convencí a mi misma de que era un buen día para seguir a varias fans y contestarles sus tweets. Era una manera de hacerles feliz y me encantaba.

Segundos después de aquello, la puerta de mi habitación sonó haciéndome resaltar un poco, me recompuse y le dejé paso. Era Luke de nuevo.

Era la cuarta o quinta vez que intentó a hablar conmigo hoy tratándome de convencer de que lo perdonase por lo que hizo la noche anterior:—¿Otra vez estás aquí?

—Quiero que me dejes explicarme...Violeta por favor.

—El alcohol no es una excusa Luke, destrozaste a Victoria. A mi hermana joder ¡tiene diecinueve años!

—¿Me darás de nuevo otro sermón? solo quiero que me perdones.

—Si te quisiera dar otro sermón no sería cantante, sería una anciana molesta y jubilada...—hice una breve pausa y negué viendo como Luke hacia un pucherito con su labio inferior—Ven aquí—dicho esto, inocentemente el rubio se descalzó y se subió a mi cama para luego abalanzarse sobre mi y abrazarme con fuerza.

—Debo hablar con ella pero antes necesito aclarar mis sentimientos—sentenció Luke sobre mi y mordió su labio inferior.

—¿Cuánto tiempo lleváis ocultándolo?

—Desde que llegó, ella y yo hablábamos sobre vuestro reencuentro en París y simplemente pasó—me explicó y rápidamente entendí.

—¿Por eso dejaste a Sierra irse? Por eso-... dios Luke, ¿qué hiciste con Victoria?

—Ella me gusta pero...

—Sí, pero—hablé para cortarle—No digas que la edad es un impedimento, sino también te hubiese importado antes.

—No, escúchame—me dijo y luego giró su cara para hablarme con sinceridad:—Me encapriché a decir verdad, le tengo mucho cariño, es muy buena en todo pero esto acabará en poco tiempo y nadie quiere que para el siguiente disco solo escriba canciones de desamor o temas tristes, ¿verdad?

—Primero deberías aclararte tú mismo y luego hablar con ella. Está muy dolida pero te perdonará, los dos tenéis un buen fondo—le comenté y él sonrió por mis palabras.

—Gracias, gracias por aconsejarme—dijo para luego abalanzarse de nuevo sobre mi y dejar varios cortos besos en toda mi cara haciéndome molestarme.

—¡No me gustan que me babeen la cara!

—Pues anoche se la babeaste toda a Cal-Pal—soltó directamente el rubio de pelo rizado haciéndome sonrojar por la vergüenza que me dio recordar lo que hice y sobre todo por los celos que me dio ver la situación del morocho ayer con la amiga de Sierra—Él está satisfecho, no debes avergonzarte de eso. Todos sabemos que ambos os gustáis.