Capitulo 15

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Solo me quedó buscar a Laila, mi otra amiga.
Corrí hacia el salón de Laila.
~Darian: Buenas tardes, puedo hablar con Laila?.
Le pregunté al profesor que estaba sentado viendo su celular mientras que los demás se aventaban papeles y todo eso.
Laila subió la mirada y me vio como si fuera su salvación, hasta que me vio semidesnuda.
Todos los hombres empezaron a chiflar y las chicas solo susurraban cosas entre ellas.
~Laila: Darian! Qué te pasó? -exclamó sorprendida mientras caminábamos por los pasillos-
~Darian: Bueno, pues esos idiotas me provocaron primero.
Reí al igual que ella.
~Laila: Me agrada que rías de nuevo -Sonrió-
~Darian: Me agrada hablar contigo de nuevo.
Nos fuimos hasta la cancha de fútbol y le expliqué todo lo que había pasado conmigo antes de nuestro reencuentro.
Mi celular vibró, lo saqué y vi el nuevo mensaje.
"Creo que deberías venir por tu sudadera antes de que te dé un resfriado. Libardo".
Sonreí y le enseñé el mensaje a Lai.
Quedamos de vernos en mi casa a las cinco para que pudiera ir a la oficina de Libardo y pedirle mi sudadera.
Me adentré en la sala de maestros.. Gracias a Dios no había nadie, así que pude meterme sin problema a la oficina del profesor.
Toqué la puerta.
~Libardo: Pasa! -Gritó-.
Entré y cerré la puerta detrás de mí.
Mientras caminaba me cubría el torso con mis manos, todavía me daba un poco de pena.
~Darían: Buenas tardes, profesor -Saludé temblorosa-
~Libardo: Oh, hola Darian. Siéntate.
~Darian: Me agradaría sentarme sabiendo que tengo una sudadera que cubra mis desnudos.
Dejó de ver los papeles en el escritorio y reaccionó.
~Libardo: Ah, discúlpame.. Tengo la mente en otro lugar.
Abrió un cajón y sacó mi sudadera. La tomé y me la puse.
Me senté en la silla frente a su escritorio, crucé las piernas y vi sus hermosos ojos cafes.
Libardo era un hombre joven, de unos 20 más o menos, cabello castaño claro, sus labios eran algo gruesos, me daban muchas ganas de besarlo.
Libardo se sentó y me miró.
Soltó un suspiro, tan profundo como el sueño de un bebé.
Tapó su boca y su barbilla con su mano y volvió a mirarme.
~Libardo: Darían me gustaría platicar contigo
~Libardo: No quiero que lo tomes a mal, al contrario, pero es que.. eres una jovencita -Se pasó las manos por el cabello, se lo jaló demostrando desesperación y enojo-
~Darian: Ya casi cumplo 22 años
~Libardo: Darían, no lo entenderías. Creería que soy un depravado
~Darían: Dime -lo alenté-
~Libardo: Me gustas demasiado. No he dejado de pensar en ti desde que empezó el semestre -Soltó un gruñido y se alborotó el cabello- Eres mi alumna y sé que éticamente no es correcto, pero, de verdad me gustas.
Le sonreí. Bajé la mirada y sonreí aún más. -
~Darian: Tú también.
Abrió sus ojos como platos y sus labios dibujaron una sonrisa preciosa.
Me levanté de la silla y caminé hacia él. Me senté en sus piernas a horcajadas y puse sus manos en mis caderas.
Siguió mis ojos y me dio un beso delicado en el cuello.
~Libardo: Si nadie se entera, podríamos ser..
~Darian: Podemos intentarlo
~Libardo: Pero Darían, jura que no le dirás a nadie de esto -pidió con voz lenta y suave-
~Darian: Te lo juro.
Besé sus labios y me levanté de sus piernas.
Caminé hacia la puerta, pero me detuvo su voz.
~Libardo: Quieres salir conmigo en la noche?
~Darian: Como..
~Libardo: Novios, claro está -alzó sus brazos y los puso detrás de su cuello para estirarlos-
~Darian: Novios? Ni siquiera hemos tenido la primera cita
~Libardo: Entonces que sea la primera cita -ofreció-
~Darian: Tengo que arreglarme?
~Libardo: Para mí hasta en pijama eres hermosa.
Sonreí de oreja a oreja, ladeé la cabeza y lo miré con dulzura.
~Darian: Pasas por mí?
~Libardo: Claro.
Se acercó a mí y me tomó de la mano.
Me encaminó a la pared. Me acorraló con sus brazos, subió sus manos hasta mi rostro, lo tomó entre ellas y me acercó más a él.
Acarició mis labios y después abrió su boca para besarme era un beso apasionado y lento.
Nos besamos por unos segundos.. unos muy largos hasta que su teléfono sonó.
~Darian: Te veo después.
Salí y sonreí como niña pequeña. Mi celular vibró. Era un mensaje. "Cuándo terminamos la clase que quedó pendiente? Solo si te sientes cómoda para seguir con las clases, señorita Rojas. Jean".
Mierda! Que harás ahora Darian?

Sex instructor || Jean y Darian|| hot Donde viven las historias. Descúbrelo ahora