Ajetreo amoroso

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El mes de recuperación había por fin finalizado, Wei Ying podría salir del pabellón medico, pero todavía no podía viajar así que permanecería un tiempo mas en Qishan. Tal y como la médico dijo. Lan Wangji vino a tocar Claridad para poder lidiar con la desviación de Qi, debía de admitir que en un inicio sentía temor por someterse al tratamiento, pero al pensar en su hijo dejo su temor de lado. Escuchar la música de Lan Zhan la hizo sentir mejor, no sólo escucho Claridad, cuando se quedaban a solas el chico le toco la misma canción que ella se sabía en su dizi, además de enseñarle una melodía que compuso para ella.

-¿Cómo se llama la canción?-pregunto por curiosidad-Lan Zhan, ¿Me puedes decir?-volvio a preguntar

-Mn-asintió un poco tímido-Se llama Wuji-

-Wu...ji-murmuro-suena bien, me gusta-sonrió

-Es para Wei Ying y para que se la toque a su hijo-confesó. La sonrisa de Wei Ying se hizo aún más grande

-A mi hijo le encantará-su hijo adoraba que su madre le cantará-siempre le canto canciones de mi lugar de origen, le fascinan-

Cómo extrañaba a su dulcesito, tenía tantas ganas de verlo, en cuanto lo viera le daría un gran abrazo y le diría lo mucho que lo amaba. Estaba terminando de arreglar sus cosas para salir de ahí, tenía bastantes regalos que guardar. Vaya que esto del cortejo le complicaba mucho su movilización.

-Si vendiera todo esto me haría rica-murmuró para si misma

-Al menos hay cosas que sin duda A-Yang querrá y podrá usar-Tras guardar todo en bolsas Qiankun salió del lugar

Quería darse un buen baño y comer mucha comida picante junto a una buena botella de licor. Fuera de ahí se encontraba un chico de pelo castaño con ojos verdes esperando por ella.

-Jo...Joven maestra Wei, soy Wen Ning he...hermano de Q...Qing-jie-no podía evitar tartamudear de los nervios que sentía

-Un gusto, soy Wei Wuxian-hizo una reverencia. Ese chico era como un adorable conejito asustado, daban ganas de protegerlo.

-Y...Yo la llevare a sus habitaciones, s...sígame po...por favor-le dio una reverencia rápida

-Te sigo-vaya que el chico debía de aumentar su autoestima, sino lo iban a molestar

El pequeño Ning era bastante tímido, todo esto debido a los abusos por parte de Wen Chao, pero ahora podía estar tranquilo, su odioso primo ya no estaba más y todo gracias a la chica. La chica lo siguió a través del lugar, como quería salir y estirarse un poco, tanto tiempo acostada fue una auténtica tortura para ella. Desde que Wen Chao y su mujerzuela habían sido ejecutados todos los discípulos y sirvientes se sentían más libres y felices, ya no iban a ser acosados o intimidados, le debían mucho a Wei Wuxian. El ambiente era más animado y libre sin la presencia de aquel par tan desagradable, hasta Wen Ruohan y Wen Xu se calmaron más.

Y hablando del rey de roma, ahí se encontraban pasando el par de padre e hijo. Ambos observaron como la chica iba acompañada de su pariente, Wen Níng era demasiado tímido para su bien, por algo Wen Qing era la líder de su familia. El mayor de los Wen hablo

-Señorita Wei me alegro que se encuentre mejor, estábamos preocupados por su salud-le dio una reverencia

-Gracias por la preocupación, pero estoy acostumbrada a herirme todo el tiempo, aunque esto lo superó todo-dijo en tono más bajo lo último-Wen Qing es una gran médico, la mejor de todo el mundo diría yo-

-Jiejie es la mejor sin duda- dijo Wen Ning sin timidez

-Lo es, solo ella podría amenazar a cuatro personas al mismo tiempo, debo aprender como la hace, me será tan útil para entrenar a los discípulos de mi secta-Enserio quería saber cómo lo hacía, parecía ser tan fácil

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