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-Nos vemos mamá.

-Vayan con cuidado cariño.

La madre de los hermanos se despidió con una sonrisa desde el marco de la puerta esperando que sus hijos tuvieran un gran día, poco a poco vio como desaparecían al caminar y dar vuelta en la esquina de la calle, en ese momento entró a su casa y cerró la puerta.

-No me gustaría ir a clases hoy.

-Lo noté desde que me costó levantarte, por cierto, debes almorzar en el recreo eh, no desayunaste por levantarte tarde. En serio, Jimin, tienes que comer bien. Últimamente te veo un poco más delgado.

-¿En serio? -Dijo Jimin expectante, pero al notar que Jin lo miraba horrorizado actuó como si a él también le preocupara.

-En serio, y si es porque casi todas las mañanas no desayunas porque se te hace tarde, no es sano, el desayuno es-

-"Lo más importante del día" ya lo sé, hyung.

-Bueno, pero en serio come en el receso, por favor.

-Lo haré, siempre lo hago.

-Bien, ya llegamos. -Ambos hermanos bajaron del bus.

-Ah, llegamos justo a tiempo, pero no quisiera entrar. -Dijo Jimin mirando la puerta de su escuela con una sonrisa melancólica y calmada, pero Jin no notó el sentimiento de Jimin ante esa escuela.

-Jaja, ¿Acaso quieres que te lleve a la universidad? Ya entra.

Jimin volteó a verlo con la misma sonrisa, como si con ella quisiera darse ánimos a él mismo para entrar de nuevo.

-Gracias por traerme, hyung.

-No es nada. Ya entra que se te hace tarde y a mí también. Nos vemos en la salida.

Le dió una última sonrisa y entró. Si había algo bueno es que era martes, y eso significaba que en la tarde iría a sus clases de pintura.

Entró rápidamente al salón de clases, afortunadamente el profesor aún no había llegado.

-Dios, ¿a quién se le escapó su cerdo que llegó hasta acá?

Medio salón estalló en risas ante la pesada broma de Hyunjin. Jimin intentó ignorarlo, aunque le dolió, obviamente.

Ojalá se hubiera enfermado y no hubiera asistido, pensó en sus adentros.

Tomó asiento en su usual banca hasta atrás de todos, porque a pesar de que era buen estudiante era un chico muy inseguro y ahí sentía que nadie lo veía para juzgarlo. La parte de atrás era su lugar seguro en ese frío salón de clases.

-Chicos, buenos días. Tomen asiento por favor.

Jimin recargó su mejilla en su mesa mientras veía por la ventana hasta que el profesor comenzara a dar sus clases. Tenía la ventaja de que en ese lugar apenas alcanzaba a verlo a menos que levantara la mano para participar por un punto extra.

-Hoy tenemos un alumno nuevo, denle la bienvenida por favor.

Jimin siguió sin darle importancia, pues seguro sería adoptado por el grupito de amigos de Hyunjin y por lo tanto sería un verdugo más.

-Pasa, muchacho.

Se escucharon sus pasos entrar.

-Presentate, por favor.

El niño nuevo carraspeó.

-Emm, buenos días, como sabrán soy nuevo, tengo catorce años... uhm... Vengo de Busan...

Porque odio a los príncipes. [JJK + PJM] Jikookmin✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora