Diego.
Había comprado un auto nuevo cuando Natalia salió a comprar ropa. Me llevé a Katheryn un poco lejos de la playa.
-¿A dónde iremos? -me preguntó.
-Ya casi llegamos, no comas ansias.
-Te comeré a tí si no llegamos en dos minútos -sonrió.
-Entonces tendré que manejar más lento.
Puso su mano en mi nuca para acariciar mi cabello, me ponía más nervioso pero me gustaba su caricia.
-Hemos llegado -le dije.
Me bajé del auto y le abrí la puerta.
-Por favor, bella dama -le extendí mi mano.
-Será un honor, caballero -me dió su mano sonriendo.
La llevé caminando por un pequeño puente de madera, al terminar estaba esperándonos un Yate de lujo.
-¿De quién es? -preguntó sorprendida.
-Tuyo y mío -la abracé por detrás.
-Está hermoso... me encanta.
-Buenas noches, señor Mussi -me dijo Morgan, el capitán.
-Buenas noches -respondí.
-Está todo listo para que suban.
Nos subimos al yate lléndonos a la punta de él. Empezó a avanzar y Katheryn no dejaba de mirarme.
-¿Tú planeaste esto? -me preguntó.
-Con ayuda de tus hermanos y de tu papá -respondí.
-Qué lindos, siempre he querido subirme a un yate pero éste es tan elegante y fabuloso.
-Me pone feliz verte así.
La volví a abrazar por atrás, los dos veíamos hacia el mar.
-Mi papá me dice que siempre tomo buenas desiciones -me dijo-. Pero la mejor ha sido enamorarme de tí.
-Amar a una persona es algo hermoso, pero ser correspondido es mágico -besé su cabeza.
-Cariño...
-Dime.
-Te dije que quería tener ocho hijos contigo, pero...
-Si no quieres ser mamá no pasa nada, no voy a obligarte -le dije.
-Déjame terminar. Como decía, ya no quiero ocho hijos. Quiero diez.
-¿¡Diez!? -me impresioné.
-Sí, una pequeña multitud de hijos parecidos a tí.
-¿No crees que son muchos? -soné nervioso.
-Sí, puedo quedar gorda y ya no vas a quererme.
-¿Qué dices? -me reí- Yo te amo por lo que eres, no por tu cuerpo.
-¿Soy sexi?
-Uff -acaricié su vientre- eres bastante sexi.
-Tú también lo eres -hizo su trasero hacia atrás.
-Me estás tentando -susurré en su oído.
-¿Aún crees que tener diez hijos son muchos?
-Puedo hacerte sólo uno y después me opero.
-¿Por qué tú?
-¿Por qué no?
-Normalmente las mujeres son quienes se operan porque los hombres no quieren.
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Tu Recuerdo (Completa✔) #1
Teen FictionPrimer libro de la saga "Perfecto Dilema" Natalia (una chica de baja estatura pero atractiva) fué abandonada por su primer amor, Matías ya que él la quería sólo por sexo y prefirió irse a Perú en busca de otras chicas. Pasaron cuatro años y ella sól...