Capítulo 28

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Natalia.

-Estoy llena -les dije.

-Gracias por el desayuno, Mauro -le dijo Jessy.

-Desayunamos mejor aquí que en casa de la bruja -dijo Ingrid.

Nos reímos, al parecer a Mauro no le molestó el comentario.

-Necesitamos salirnos de ahí -nos dijo-. Buscaré una casa, les compraré ropa, calzado, muebles y viviremos juntos.

-¿No quisieras vivir sólo con Celeste? -le pregunté.

-Será en un futuro -respondió ella-. Tenemos que estar unidos.

-Pues yo le tomo la palabra a Mauro -dijo Jessy-. No quiero pasar otra noche ahí.

-Pues ya está, nos vamos a vivir a otro lugar.

Lo abrazamos fuerte antes de que pagara la cuenta. Regresamos a la mansión, en todo el camino Ingrid y Jessy iban describiendo cómo querían su habitación, Mauro les dijo que las complacería en todo.
Cuando llegamos nos llevamos una enorme sorpresa. Alonso estaba ahí.

-¡Alonso! -corrimos Ingrid, Celeste y yo a abrazarlo.

Lo tiramos al suelo, se veía muy feliz de estar con nosotras. Segundos después nos levantamos.

-¿Cómo llegaste? -le preguntó Ingrid.

-El único número que tengo es de Matías, le llamé para decirle que estaba por llegar al aeropuerto y fué por mí -respondió.

-¿Fué sólo? -pregunté.

-Sí, después pasamos por tu mamá a una tienda de ropa.

-¿Tienda de ropa? -preguntó Celeste.

-Sí, les compró eso y trajes de baño.

-¿Dónde están Matías y mi mamá? -pregunté.

-Matías se está bañando y tu mamá creo que en su habitación.

-Voy a buscarla.

-Nosotros nos quedamos con Alonso -dijo Ingrid.

Entré rápido y subí a mi habitación, la puerta estaba entreabierta, ví a Héctor sin camisa acostado en mi cama boca abajo. Abrí más los ojos y me quedé ahí.

-¿Te duele mucho? -le preguntó mi mamá a Héctor.

-No, pero cuando untes la crema espero que no arda -respondió.

-Tranquilo, aquí voy.

Puso un poco de crema en sus manos y la frotó en la espalda de Héctor, le hacía suaves masajes, lo trató con delicadeza.

-Tienes unas manos increíbles -le dijo a mi mamá.

-Tú tienes una espalda bien definida -sonrió.

-Arde un poco -se quejó.

-¿Por cuántos días debes usar la crema?

-Por cinco días, en la mañana y en la noche.

-Ayer no te la pusiste.

-Olvidé pedírtelo.

-Entonces en la noche te la pondrá María -su rostro cambió.

-No, quiero que me la pongas tú. Iremos a un hotel o donde sea, no quiero que María me toque.

-¿Sigues enojado con ella?

-Enojado es poco -se sentó.

-No había terminado -sonrió.

Tu Recuerdo (Completa✔) #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora