“Asustados de nuestros instintos, escondemos nuestro yo más puro.
el humano es el laberinto lleno de veneno y caminos oscuros”•
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ya han pasado varios meses desde que mauro me encontró en el puente y esa fue la última vez que falte al colegio. Todos los días al principio se encargaba de ir por mi a mi casa. Después tuvo algo formal con Nadia y dejo de hacerlo y aunque me dolió un poquito entendí que era su novia y estaba en todo su derecho.
comencé a tomar los Anti depresivos porque la psicóloga dijo que si no lo hacía hablaría con mis papás ya que era una situación grave según ella y no quiero tenerlos diciéndome que aparte de que soy una inútil ahora me dedico a llorar.
Y bueno, los Anti depresivos son una droga porque me siento fuera de realidad y un poco mejor.
—Sibel — se acercó Alejandro
— hola — murmuré incómoda, me volví tan antisocial que me molesta que alguien me hable.
— posiblemente rechaces pero quería saber si te gustaría salir hoy por la tarde — dijo llevando sus manos a los bolsillos.
— no puedo — respondí — tengo cosas que hacer
— dale, solo será ir a caminar por un helado — insistió
— está bien — suspiré resignada
— te veo en la tarde en el parque — dijo y se alejo con sus amigos.
— me voy arrepentir por haber aceptado — suspiré pesadamente .
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•— ¿a dónde vas?— dijo su madre mientras miraba como bajaba las escaleras de mal humor
— tengo un trabajo que hacer, vuelvo en un rato — no espero respuestas y salió de su casa.
camino pesadamente hasta el lugar en el que había quedado con el chico.
Había pasado una hora desesperada cambiando su ropa porque no encontraba sentirse cómoda con lo que llevaba, siempre que se probaba algo nuevo y estaba apunto de salir regresaba, se miraba al espejo, se maldecia por ser tan horrible y se cambiaba a su típico buzo.ya nisiquiera lloraba, las ganas de llorar se habían esfumado. Hasta eso le causaba cansancio.
— Sib, creí que no vendrías
— Alejandro — llamo su atención y el chico la miro
—¿que pasa?
— ¿tu que opinas de la muerte?— murmuró — me refiero a si crees que reencarnamos o nuestra alma está por ahí flotando mirando como los demás continúan con su vida
— no me gusta creer que solo flotamos — respondió — me gusta creer que podemos reencarnar.
— a mi no me gustaría volver a vivir — murmuró
—¿porque? — el la miro un tanto anonadado
— por qué sería lo mismo de siempre, estudiar, trabajar pasar momentos malos y unos cuantos buenos y después hacer lo mismo — suspiró — aunque sería divertido reencarnar en diferentes personas, artistas o que se yo.
— bueno, espero para eso falte mucho tiempo, yo aún quiero vivir muchos años ¿tú?— la miró
— sí, yo también — murmuró intentando conversese a si misma.
pero sinceramente no sé imaginaba a largo plazo, no podía imaginarse en un futuro.
No podía llegar a pensar que sería exitosa o que tendría una bella familia. Por qué ella en un futuro solo imaginaba su funeral.
Es que es fácil ver a una persona que está sola y querer acercarte, pero no todos pueden ver a una persona sola, cuando tiene gente a su alrededor.
— me tengo que ir — se paró del lugar donde estaban sentados
— te acompaño a tu casa — dijo el chico amable, le gustaba Sibel desde hace un tiempo pero siempre creyó que tenía algo con Mauro.
— no, no, voy yo sola igual. Queda cerca de aquí la casa de mauro y tengo que pasar por unas cosas — dijo metiendo las manos a sus bolsillos, no le gustaba la compañía constantemente.
— está bien — respondió un tanto desanimado, le dolía el imaginar que solo lo estaba boludeando.
— te veo después — dijo Sibel y camino unas cuantas calles sola, no pensaba nada. Solo miraba al suelo incapaz de alzar la mirada y ver fijamente a las personas. Siempre sentía vergüenza de si misma para hacer eso.
unas casas lejos podía ver la casa de mauro, decidió cruzar la calle para ir a visitarlo. Tenía tiempo sin saber de el.
Pero antes de cruzar vio que estaba con Nadia y decidió no interrumpir, sería muy incómodo llegar y preguntarle porque no hablaban cuando estaban en su momento.
No presto atención al cruzar venía sumida en sus pensamientos.
—¡SIBEL!— escucho gritar pero no pudo girarse a ver quién gritaba, su vista se había tornado oscura.
Nota de la autora:
muchas personas no se dan cuenta de lo difícil, cansado y valiente que es salir de un estado mental oscuro, depresivo y angustiante, ya sea por uno mismo o con ayuda.
Así que si algún día lo lograste, o estás en proceso, quiero decirte que estoy muy orgullosa de ti.<3no me maten por el capítulo de hoy sjsjsjajsj
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Depressive; Lit Killah || terminada ||
Fanfic𝐃 || nos creemos eternos, pero algún día seremos tan solo un recuerdo.