Después de que Rafiki se despidiera Nala al subir a la roca pudo ver a Simba recostado con Sarabi y los pequeños, al acercarse rozó su cabeza con la de el y la otra leona presente recostandose al lado del león pelirrojo quedando a la altura de los cachorros.
*Nala: Simba, no deberías de estar aquí afuera, tienes que descansar.
*Simba: tranquila Nala estoy bien, no tienes porque preocuparte.
Simba recostó su cabeza con la de Nala hasta que la voz de uno de los pequeños los interrumpió.
*Kopa: mamá ¿Ellos regresarán? los nómadas
*Nala: no lo sé kopa, pero no te preocupes sabemos cuidarnos bien
*Adira: ¿Por qué nos atacaron mamá?
*Simba: quieren lo que tenemos.— Simba miró a la cachorra albina quien se habia subido sobre su melena—
*Nala: Adira no hagas eso puedes lastimar a tu padre
*Simba: Nala no te preocupes, no es nada.
*Adira: mamá pero tú dijiste que aquí estábamos a salvo
*Nala: oh... Vamos chicos miren alrededor— la leona hizo una pequeña pausa para observar dentro de la cueva— somos una manada, somos bueno no lo sé.
Nala desvío la vista para mirar a las estrellas mientras los pequeños la imitaban, mientras Fleck salía de la cueva para reunirse con ellos.
*Nala: somos como las estrellas
*Kopa: ¿Que salimos de noche?
*Nala: jaja no
*Adira: ¿somos lindos pero no hacemos nada?
*Nala: no
*Fleck: no sean tontos es porque todo el mundo nos señala.
*Nala: no Fleck, es porque solos brillamos pero juntos es que realmente resplandecemos, somos una constelación perfecta mucho mejores por estar juntos.
*Adira: mamá pero siempre estaremos juntos ¿Verdad?
Los adultos hicieron silencio ante la pregunta de la pequeña cachorra albina.
*Simba: Adira te diré algo que me dijo mi padre y su padre le dijo a el, cuando se sientan solos miren las estrellas.
Los tres cachorros nuevamente levantaron la vista hasta el hermoso cielo estrellado.
*Simba: los grandes reyes del pasado nos miran desde las estrellas.*Kopa: ¿En serio?
*Simba: si y cuando algún día yo no esté los estaré cuidando desde arriba
Sarabi al escuchar las palabras de Simba se le cristalizaron los ojos al recordar a Mufasa y cuando pasaban las noches admirando las estrellas.
*Kopa: ¿Abuela estás bien?