DESTINO ; 윤민 [YM]

19: Cuadro

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Los chicos entraron al bus emocionados. La pareja se sentó juntos mientras que el mayor se ubico detrás de ellos, al lado de una señora que iba cabeceando.

— Agg... hace un calor que te matas. — se quejó el castaño abanicando, con su mano, su rostro.

— Justo hoy tenía que ser así, anoche parecía que iba a llover. — también se quejó el alfa.

— Pero mírenle el lado bueno, chicos. — Jimin colocó ambas manos en cada hombro de los chicos. — Hay un buen clima y el paseo no se cancelará. 

Los menores asintieron de acuerdo con lo escuchado. — Aún así hace mucho calor aquí. — se volvió a quejar Jungkook. — Si tan solo tuviéramos nuestro auto propio ahí nos ahorraríamos pasaje y tuviéramos aire acondicionado. — miró de reojo a su alfa.

— ¡Sí! ¿Taehyung, cuando te compraras un carro? — preguntó Jimin.

— ¿Qué? — preguntó el alfa, mirando extrañado a los omegas. — ¿Por qué tengo que ser yo el que se compre un auto? Jimin, tu tienes ahorros, sácate la licencia y cómprate un carro.

— Pero yo no quiero manejar. Tú que eres el alfa tienes que consentirnos. — se defendió.

— Y yo no tengo dinero suficiente.

— ¡Yo quiero un Mercedes Benz! — exclamó el castaño con los ojos brillantes.

Los mayores lo miraron asombrados ante la revelación. Taehyung empezó a negar nervioso; esa cosa costaba más que sus dos riñones juntos, no tenía el dinero suficiente. Jimin solo reía por la cara de preocupación y la difícil situación en la que su omega lo había puesto. Después de unos minutos llegaron a su destino, bajaron del buz y, como si se tratase de niños pequeños, corrieron hasta la entrada del parque. Se quedaron asombrados por lo hermoso que era, había un gran arco de color amarillo en la entrada, por encima de este caía una hilera de rosas haciendo la vista muy agradable. 

Después de hacer una corta cola, entraron al lugar. Había un montón de familias. Niños jugando, señoras hablando entre si, pareja demostrando su amor en uno que otro banco del lugar. Era muy lindo. Los tres jóvenes caminaron con sus cosas en mano, se detuvieron al ver a un señor retratar a una hermosa mujer; era tan hábil que dejaba maravillado a cualquiera que pasaba; así que luego de un rato observando decidieron ir y encontrar un lugar para sentarse. Siguieron dando vueltas hasta que llegaron a una zona donde el pasto era más alto que el resto, les llegaba aproximadamente por las rodillas. Los omegas corrieron y se tiraron al piso, ocultándose entre las plantas.

— ¡Oh no! ¿Dónde se metieron esos omegas revoltosos? — preguntó "preocupado" Taehyung, mirando de una lado a otro, fingiendo buscar a los omegas. — Me acuerdo haberlos visto por aquí... — dejó las cosas en el suelo y con cautela caminó, yendo en puntillitas, como si estuviera en una caza.

Iba de decir algo pero una traviesa mano pellizco su nalga derecha, asustándolo. Luego otra mano lo empujo por las parte trasera de la rodilla, haciendo que este cayera. Dos cuerpos saltaron sobre él, aplastándolo y abrazándolo con mucha fuerza. Rieron en alto, no tomándole mucha importancia si los escuchaban.
Una que otra persona que pasaba cerca miraban enternecidas a los chicos que jugaban en  el pasto, aprovechando su altura para ocultarse entre este. Algunas abuelitas miraban mal ya que no les parecía que arruinen el ambiente con su bullicio.

Luego de jugar entre ellos pusieron las mantas sobre el pasto un poco más bajo, de ahí decidieron ir a los juegos que estaban a su costado. Se subieron a los columpios, se deslizaron por el tobogán, se subieron a los jueguitos, correteándose entre ellos. También se subieron a las maquinas para hacer ejercicio que se encontraban al lado; Taehyung y Jungkook empezaron a hacer flexiones en la barra compitiendo quien lo hacia más veces. Luego de la intrigante competencia, ya que ambos iban parejos, y que unos niños se habían acercado a ver junto a Jimin, animado, Taehyung cayó primero al suelo, rendido. Todos gritaron eufóricos alabando a Jungkook por ser muy fuerte. De ahí los niños les invitaron a jugar con ellos y no se desistieron, así que todos empezaron a jugar futbol con la pelota de uno de los pequeños, pasando una divertía y amena tarde.