d o c e

851 97 5
                                    

Mi madre y yo bajamos al comedor y nos encontramos con que Taehyung estaba desayunando con Jacob y Shane. Cuando me vio, se puso de pie y se acercó de prisa hasta mí. Comenzó a señalar mis ojos, mi nariz... quería saber por qué estaba así, me dolió su cara de preocupación.

— Estoy bien. Termina de desayunar.

Negó con la cabeza.

— ¿Quieres ir a comer a la cabaña?

Me miró un momento y asintió.

Tomé el plato con la comida a medio terminar de Taehyung y le serví un poco más, mientras mi madre y los otros dos me miraban en silencio. Yo ya no sentía hambre, así que solo abrí la puerta trasera y tomé de la mano a Tae para dirigirnos a la cabaña.

Una vez ahí, recalenté lo que había llevado y nos sentamos en su pequeño comedor.

Taehyung no comía, podía sentir sus ojos clavados en mi cara, pero me estaba costando mucho pensar bien por todo lo que acababa de pasar, así que solo miraba hacia afuera por la ventana.

— Lillie. — me tomo de la mano.

— Come, va a enfriarse de nuevo. — dije forzando una sonrisa.

Negó con la cabeza. Saco mi celular de la bolsa del pantalón y comenzó a escribir.

"Dime qué fue lo que pasó con tu madre."

Cerré con fuerza los ojos para aclarar un poco mis ideas y entonces le conté. Cuando terminé de hablar, lo vi ponerse de pie y dirigirse a la puerta.

— ¿A dónde vas? — pregunté, aunque no me mirara. — No... espera. — Imaginé que quería ir a hablar con mi madre.

Lo detuve cuando abría la puerta y me interpuse en su camino cerrando de nuevo.

— No, no vayas.

Su frustración era evidente, su enojo... Comenzó a hacer señas, que, aunque yo no entendiera era obvio que se refería a lo estúpido y absurdo que era todo.

— Tae, por favor. — aún no le había dicho que teníamos que estar alejados, pero necesitaba que se calmara. Le tome las manos y lo lleve a que se sentara en el sillón. — Voy a ayudar a mi madre.

Giró la cara, estaba molesto y tuve que tomar su barbilla para que me mirara.

— Yo sé que es un plan absurdo...

Lo vi escribir en el celular de prisa.

"Es peligroso y no quiero que participes. No van a lograr nada y pueden lastimarte."

— No quiero participar, pero le di mi palabra a mi madre y... — suspiré y mis lágrimas comenzaron a caer. — Se lo debo, Tae... porque no volví, ya nunca volví y él se fue. Se fue sin que yo pudiera abrazarlo una vez más, ni agradecerle por todos esos veranos juntos... ni pedirle perdón por alejarme durante tanto tiempo.

Taehyung me abrazo y con cuidado me movió de donde yo me encontraba sentada para ponerme en su regazo. Lo sentí besar mi frente y se limpio la cara, él también estaba llorando. Lo miré.

— ¿Me entiendes?

Asintió con tristeza.

— Tenemos que dejar de vernos.

Cuando dije eso, apoyo su cabeza en el respaldo, cerro los ojos y sus brazos me soltaron poniéndolos a sus costados. Quería explicarle y toque su rostro, pero se negó a mirarme.

— Por favor, chico raro, no te cierres... no hagas esto. — dije mientras acariciaba su barbilla. — Mírame, Taehyung.

Toque su mejilla, pero seguía sin querer abrir los ojos. Iba a ponerme de pie, pero me abrazó de nuevo y me acercó a su pecho.

River [kth]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora