v e i n t i s i e t e

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"Lillie, no quiero que te vayas"

Ver llorar a Tae, solo me hizo sentir peor por mentirle. Dormía a mi lado, abrazándome como si no quisiera que me separara de él.

Después de que me entregó la pulsera, me dijo que no quería que me fuera, que sabía que era lo mejor y debía hacerlo, pero le dolía saber que nos separaríamos por un tiempo. Nunca pensó en dejar River, pero ahora todo había cambiado y solo arreglaría lo necesario para reunirse conmigo en Minnesota, lo más pronto posible. 

Hablar del futuro fue extraño. 

Habíamos estado tan inmersos en lo demás que realmente no nos tomamos el tiempo de pensar que haríamos. La conversación quedó a medias porque Tae me dijo que yo debía dormir. Cosa que no pude hacer de nuevo.

El plan de Shane y Jacob se puso en marcha al día siguiente. Se supone que yo debía salir temprano hacia la estación de autobuses, pero la camioneta estaría lista más tarde, así que me iría por la tarde. Desayunamos de forma habitual y Tae salió al cibercafé, volvería después del medio día. Yo me ocuparía de mis cosas y comenzaría a hacer mi maleta. Mi madre se ofreció a ayudarme, pero me negué, diciéndole que acompañara a Jacob a recoger la camioneta.

Shane y yo nos quedamos solos. Ya casi era medio día, me parecía que Tae podía aparecer en cualquier momento.

— Wendy no tarda en llegar ¿Williams? — el impostor miraba por la puerta hacia la calle.

— Lo lamento, no puedo ir.

Shane me tomó por los hombros y me llevo a uno de los sillones para que me sentara.

— Lillie, mírame, esto no va a ser como las otras ocasiones, no van a separarnos, no voy a dejarte. Volveremos rápido y ni Tae, ni tu madre, no se darán cuenta. 

— No quiero estar sola con Peter.

— No va a suceder. 

Unos minutos después, Wendy llegó por nosotros, los dos subimos a la camioneta, sonriendo tranquilamente. Durante el trayecto, ella se la paso hablando de lo triste que le parecía que yo me fuera y que "Jamie" era bastante considerado, por acompañara a mi madre algunos días más para ayudarla a terminar las reparaciones.

Cuando llegamos a la Colonia y a la casa de Wendy, solo estábamos los tres solos. Eso ayudo a que me relajara, antes de que Paul y los demás llegaran a reunirse con nosotros. Habían pasado varias horas, se suponía que nos iríamos temprano, pero no fue posible, el grupo de Paul llegó después de las cinco de la tarde, además dependíamos de Wendy o de alguno de ellos para regresar a casa de mi abuelo.

Al reunirse con los demás, Shane volvió a comportarse como la noche en que se llevaron a Tae.
En esta ocasión su manera de ser conmigo era distinta, como si hubiera marcado su presa, como si le perteneciera y estaba mostrándoselo a los demás en la cara. Se que todo era parte de una actuación, pero no dejaba de incomodarte su forma brusca.

— ¿Ustedes están bien? Después de lo... ya sabes. — por supuesto que esperaba que Wendy me hiciera sus preguntas incómodas.

— ¡Que grosera, Wendy! — mi grito hizo que todo el grupo mirara en dirección nuestra, que nos encontrábamos sentadas en un par de sillas de jardín al fondo del patio. 

— Perdón, no quise ser grosera, es solo que escuché que Paul y... — lucía avergonzada, pero aún así no dejaba de intentar hablar del tema.

— Si eres grosera, muy grosera. — mi interrupción cortó la conversación y solo vi como movió sus labios para decir "Perdón" y levantarse de su lugar para ir a quien sabe dónde. Al menos logre mi cometido, que era avergonzarla.

River [kth]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora