Cursed / Draco Malfoy (Traducción)

Capítulo 13

Miré una vez más oscuramente mi propio reflejo en el espejo, luchando por ocultar la palabra sucia que Adrian había grabado en mi piel, hoy se enrojeció aún más que ayer, la sensación punzante de mi piel tratando de sanar dolía debajo de la tela de mi  camisa, y cada vez que la miraba, todo lo que mi mente me recordaba eran las palabras exactas que Adrian pensaba de mí, "Maldita puta", pero incluso si sus crueles palabras de abuso se mecían por dentro, desde la noche, en el  biblioteca con el chico rubio. 

Todo se sintió más fácil de alguna manera, El aire se sintió más liviano, más fácil de respirar, despertarme por las mañanas y quedarme dormida por la noche ya no parecía un desafío, simplemente como si lo que Draco hacía, el hechizo en el que me atrapó quitara un gran peso de mi pecho  , adormecido cada sentido doloroso que tenía dentro. 

Adrian no estaba a la vista, probablemente todavía ayudaba a los mortífagos en su misión de servir al señor oscuro, e incluso si no se molestaba en enviarme una carta o incluso visitarme una vez, lo cierto era que ahora no me importaba.

Disfruté mi tiempo a solas con Draco y Theodore, los dos chicos todo lo posible para no apartarse de que hicieron mi lado, casi como si se turnaran para protegerme del vil chico con el que Adrian me había dejado.

Blaise se aseguró de que durmiera en la habitación de Adrian todas las noches e incluso si nunca lo admitió.  Sabía que lo hizo para mantenerme cerca, para no perder la pista de mi ser, pero eso no me molestó tanto como debería, porque en mis pensamientos solo me acercó a los dos Slytherins que apreciaba tener cerca.

La puerta de la habitación de Adrian se abrió de golpe cuando mi mejor amigo entró felizmente, dejándose caer en la cama sin decir una palabra, sonriendo descaradamente. 

—Buenos días—se burló Theodore, alzando una ceja ante mi figura sorprendida—Admirándote en el espejo otra vez, ¿verdad, amor ?

Mis ojos se pusieron en blanco ante sus palabras mientras me volví hacia el espejo, enderezando mi camisa una vez más para asegurarme de que el desagradable hematoma no tuviera posibilidad de mostrarse.

—Por otro lado, ¿por qué harías eso?  Ya te conoces, Eres el ser humano más hermoso que hay—se calló detrás de mí, haciendo que mi cuello se rompiera para mirarlo de nuevo. 

—No quieres decir eso—solté, mordiéndome el labio inferior mientras caminaba hacia él—Tienes que decir eso, porque somos mejores amigos
—me burlé de él, inclinándome sobre él para recoger mi bata del borde de la cama. 

Pero en lugar de devolverme el mordisco, me agarró del brazo y me empujó hacia abajo en el colchón.

La sonrisa descarada claramente sus hoyuelos de la manera más encantadora, sintiendo su cálido aroma a miel rodeando mis sentidos. 

—No digo eso solo porque soy tu amigo,  Lo digo porque es verdad—Los mechones desordenados de su cabello me hicieron cosquillas en la frente
—Nunca pienses lo contrario
—Theodore se bajó de mí, de pie junto a la cama mientras extendía la mano para tomarla, sonriendo diabólicamente. 

—Bien—gemí, tomando su mano caliente en la mía—¿Qué haces hoy?  Vi que no tenías ninguna clase

—Nada—Él se apresuró a cortarme, rascándose la nuca mientras paseábamos por las mazmorras
—¿Cómo te fue con Malfoy la otra noche?  Me olvidé de preguntar al respecto—empujó la enorme puerta de madera que daba a los pasillos abiertos, haciéndome un gesto para que caminara adelante, respiré con dificultad mientras pensaba en ello, mientras pensaba en él, el chico rubio. 

—Fue .. bueno, supongo
—sonreí, tratando de ocultarlo abrazando mis libros más cerca de mi pecho— dijo que estaba bien por ser la primera vez—miré al chico alto que caminaba a mi lado, el músculo de la mandíbula ligeramente apretado.