No puedo perderte (EdwardxJacob)

El desconsuelo de un padre

Al principio las cosas habían ido bien, Billy había escuchado mi versión aburrida de la historia/intento de batalla cuando se la conté, se rio en algunas partes como cuando los Voulturis salieron corriendo con la cola entre las patas o cuando Alice llego con refuerzos y una sonrisa depredadora para hacerse cargo de la situación que nadie más podía controlar. Luego llegamos a la parte de la que yo quería hablar y de la que quería huir.

—Encontré a mi imprimación—Fueron mis palabras de inicio. Él pareció no comprender del todo en ese momento, pareció muy confundido e incluso un poco asustado, pero antes de que él pudiera decir algo yo continúe—La encontré hace más de un año—Era técnicamente cierto, lo encontré a él ese día que nos enfrentamos en la casa de Bella cuando lo trajo de la muerte. Jamás había estado tan dividido emocionalmente como ese día, atrapado entre la felicidad de saber que había alguien destinado a mí y aterrorizado de que él preferiría morir a estar un día sin mi mejor amiga.

—¿Un año? ¿La manada sabe? —Pregunto con grandes ojos asombrados.

—Ellos saben una parte y me gustaría que se quedaran con esa parte sino te molesta—Papá sabia solo pequeñas cosas, lo había llamado desde la casa Cullen para informarle de la separación de la manada y no lo escuche cuando me ordeno volver a pesar de que tenía en su corazón las mejores intenciones. —Mi imprimación es un vampiro—Deje que la declaración llegar a su mente, deje que él tomara este pequeño pedazo de mí y lo destrozara a su antojo.

Obviamente lo primero en suceder fue la negación.

—¡Los lobos no impriman en vampiros! La imprimación se trata de reproducción, imprimas en la persona que está destinada a dar los más fuertes cachorros a la manada ¡No puedes estar imprimado de un vampiro! —él lanzo sus manos al aire, como si no lo aceptara y estuviera tomándome como un loco, yo no podía estar más en desacuerdo con la perspectiva de papá sobre la imprimación, pero no podíamos ahondar en eso en ese momento, además de que entendía que era la negación del momento lo que hablaba—¡Estas equivocado!, quizas solo confundiste el sentimiento o estas teniendo un mal día o...—Tuve que detenerlo allí, estaba siendo ridículo ahora.

—Es imposible confundir un enamoramiento con la imprimación papá—Rodee los ojos, era como comparar manzanas con rocas—No es una confusión, estoy muy seguro de que es mi alma gemela—Papá tenía el rostro sonrojado ligeramente, ojos húmedos y dientes apretados como un niño al que le han dicho que no puede tener un juguete de la tienda.

Lo siguiente que él tuvo fue la ira.

—¿Y por eso es por lo que dejaste la manada?, ¿Por eso abandonaste a Sam y a los demás?, ¿Para cuidar de un chupasangre? —No estaba hablando con el corazón y lo sabía, pero aun gruñí ligeramente ofendido a nombre de Edward y los demás Cullen. Ya habíamos superado el punto de enemigos mortales, era ridículo seguir peleando el mismo caso viejo—¡Eres un hombre lobo Jacke, no un vampiro! ¿Crees que un vampiro querría a un hombre lobo? —Habíamos pasado rápidamente a la manipulación emocional.

—No—fue mi sincera respuesta haciéndolo detenerse. —No lo querría, de hecho, ni siquiera lo consideraría—Tome asiento frente a sus ojos indecisos, el suelo olía a cerveza derramada y fuera de la casa había comenzado a nevar una vez más. Yo me sentía como entumido en ese sofá, como si estuviera hablando alguien por mí.

—¿No estas unido a tu imprimación? —Pregunto papá haciendo rodar la silla de ruedas hacia mí y escuchando por fin, había un ligero tono de miedo en él.

—Ni siquiera sabe que es mi imprimación—Dije con una media sonrisa de bordes rotos. Papá trago saliva, oficialmente asustado.

—¿Es Bella? —Pregunto imaginando lo que todos pensaban—¿Ella es la mujer de tu vida? —El estómago tenía un nudo como cuerdas que se retorcían y me lastimaban, me ponía incomodo considerar a Bella como una pareja sentimental, me parecía una traición a mi imprimación por más de una razón.