What Happened?

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- Perdón por llegar tarde. Ya ni siquiera es tu cumpleaños.

Jibeom deshizo el abrazo para mirar al mayor quien tenía una expresión de molestia, cosa que lo hizo sonreír.

-No importa Jaehyunie, pero ¿qué haces aquí? Deberías estar en Canadá.

El menor estaba algo confundido, no había razón para que Bongjae estuviera ahí horas después de su boda.

- Dijimos que estaríamos juntos en tu cumpleaños.- Dijo como si fuera lo más obvio.

- Lo sé pero...- No supo que más decir, había muchas cosas que no encajaban en su cabeza.

Sería una mentira decir que no está feliz de verlo. Su promesa era una tontería para Jibeom sabiendo que la boda estaba cerca y la cantidad de horas en el vuelo, era casi imposible que estuvieran juntos ese día. Pero frente a él estaba Jaehyun, con una sonrisa ansiosa entregándole una caja con un moño en plena madrugada.

- Hae Ram me ayudó a encontrarlo, así que es regalo de ambos.

Kim la tomó agradeciendo bajito.

- No era necesario Jaehyun.- Habló abriendo el regalo.

Era un abrigo azul marino completamente calido y de una tela suave.
Jibeom sintió ganas de llorar al verlo.

- Pruebatelo .- Dijo ansioso.

El menor dejó la caja en el suelo y jaló las mangas de su sudadera para ponerse el abrigo.

- Sabía que te quedaría perfecto, cuando lo vi solo pude pensar en ti.

El menor asintió y volvió a agradecer un poco apenado, Bong lo miraba por todos lados.

- Muchas gracias Jaehyunie.

Jibeom pensaba que en cualquier momento se desmayaria. Estaba sintiendo demasiadas cosas en ese instante.
Sin embargo, el constante brillo en el celular de Bong lo sacó un poco de sus pensamientos.

- Deberías contestar, tal vez es algo importante.

El mayor negó con un poco de incomodidad mientras acomodaba partes del abrigo.

- Jaehyunah.

- No tengo ganas de escucharlos y tampoco de regresar.

Kim soltó una risa que desconcertó a Bongjae.

- Supongo que viniste solo.

Jaehyun asintió jugando con sus mangas.

- Solo regresa, no te vas a quedar a vivir ahí. No quiero que te metas en problemas.- Intentaba animarlo, claramente Jaehyun había hecho algo para llegar con el pronto y no parecía que sus padres estuvieran de acuerdo.

- Entonces ven por mi al aeropuerto cuando llegue.

Jibeom se sorprendió un poco pero finalmente aceptó. Era una de las tantas cosas cursis (y que nadie sabía) que le gustaría hacer con su pareja.
Esa escena donde esperas a que tu ser querido salga por una puerta y lo recibas con un abrazo, lo había pensado muchas veces.

- Te acompañó al auto.

El mayor asintió comenzando a caminar. Había llegado a casa de Jibeom gracias al taxi que su nana había pedido con anticipación ya que el señor Hong está de vacaciones, pero aún así lo ayudó y le mandó la dirección de los Kim.

-Ve con cuidado y, gracias.- Dijo un poco sonrojado.

Jaehyun extendió los brazos dándole a entender que lo abrazaría, así que Jibeom terminó por acercarse.