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Jibeom había llegado tarde a clase como prácticamente nunca ocurre.

Jaehyun lo observó al entrar, igual que todos en el salón.

Unas cuantas risas se escucharon pero Bong no les prestó atención.

- Nada difícil, ¿cierto?- Dijo el profesor borrando el pizarrón. - Hoy terminamos temprano, nos vemos chicos.

Se despidieron del maestro y en cuanto salió todos se movieron de sus lugares.

Bong se estiró intentando relajarse. Iba a tomar agua pero alguien movió su escritorio al pasar.

No se disculpó, ni siquiera lo miró.

Lo dejó pasar, sin ganas de pelear.

- ¿Viste sus zapatos?- murmuraba un grupito de chicas.

- ¡Hey Kim! - llamó Sangjung, el mismo que golpeó la mesa de Bong.

Jibeom lo ignoró mientras guardaba sus materiales.

- ¿La beca que te da mi familia no te da para el taxi?

Todos estaban mirando con burla.

- ¿O para un paraguas?

Jibeom seguía ignorandolo, estaba escuchando todo pero sin mostrar ningún tipo de expresión.
Ese tipo lo ha molestado toda su estancia en la escuela así que ya sabe como manejarlo, además no estaba de humor para prestarle atención.

Sangjun se estaba poniendo furioso por la actitud de Jibeom.

- ¡Kim, te estoy hablando imbecil! - Intentó tocarle el rostro pero una mano no detuvo.

- Sangjunah, deja de hacer esto.

El mencionado se soltó brusco y miró a Jaehyun.

- No te metas en esto Bong, ese idiota es miserable, se lo merece.

Jibeom se levantó para afrontar a Jun y no meter en problemas a Jaehyun.

Bong tenía su botella de agua en la mano que se mantenía apretando de vez en cuando, intentando ocultar lo molesto que estaba.

- El idiota miserable es otro, dejalo en paz.

Sangjun le dio un vistazo a Kim en amenaza antes de salir del salón.
Nadie puede hacerle algo a Jaehyun. Su familia es el mayor inversionista de la institución así que nadie se atreve a molestarlo.

Cuando se fue, Jaehyun regresó a su lugar como si nada hubiera pasado. Abrió su libro y comenzó a subrayar.

Jibeom lo observó confundido. Jaehyun lo había defendido, el chico que más lo odia en la vida lo defendió.

.-.

A la hora del almuerzo, Kim salió directo hacia la cafetería y compró un pan relleno de chocolate.

Se sentó en la misma banca donde Daeyeol lo espera siempre para comer.
En realidad podrían comer dentro del comedor pero Jibeom no tiene la tarjeta "Almuerzo VIP" de adentro así que comen en el jardín, donde puedes llevar tu propio almuerzo.

- Parece que tu mañana fue buena. - comentó Daeyeol sonriente.

El menor asintió un poco sonrojado.

- Espera, ¿le compraste un regalo? Tu odias esas cosas. - Señaló al pan.

Jibeom se alzó de hombros.

- Recuerdas a uno de esos idiotas... Sang algo. - comenzó emocionado.

- Sang imbecil.

- El, iba a hacer lo de voltearmea cara y aventar dinero pero Jaehyunie lo detuvo.

Daeyeol se sorprendió haciendo una cara exagerada.

- ¿Jaehyun? ¿Bong Jaehyun, el amor platónico de toda tu vida?

Kim asintió mirando el pan envuelto en plástico entre sus manos.

Había sido mágico.

- Ten. - Le extendió una manzana.- Hoy no trajiste nada.

Jibeom la tomó un poco apenado.

Después de ayudarle a su hermana con la mudanza todo el fin de semana olvidó hacer la compras.
Había llevado dinero pero las cosas que le gustan a Jaehyun son asquerosamente costosas, así que ya no tenía nada para el.

- ¿Y Bomin?

- Dijo que no puede venir, está terminando unas tareas.

Jibeom siguió comiendo manzana mientras pensaba en alternativas para darle las gracias o simplemente darle el pan sin explicarle como es que sabía que es su favorito evitando parecer acosador.

Bomin era su primera opción pero no lo vería en el resto del día.

Regresó a sus clases sin poder concentrarse, sólo miraba a Jaehyun y después a la envoltura saliendo de su mochila.

Daeyeol le mandó un mensaje durante su última sesión.

-¿Le dijiste gracias? O ¿Muchas gracias?

- No le di nada...

- idiota.

Estaba caminando rumbo a la biblioteca como de costumbre, con Jaehyun caminando algunos pasos delante de él escuchando música.

Lo observó. Los rayos de sol interrumpidos por los árboles iluminaban su lindo rostro y al caminar sus cabellos se movían dando pequeños saltitos.

Se armó de valor y lo emparejó.

-Bong.

El mayor se quitó los audífonos ante el saludo repentino.

- Jibeom.

- ¿Cómo va tu proyecto? - preguntó incómodo.

- Bien, ya casi lo termino.

Entraron a la calle de la biblioteca y Kim sentía que el tiempo se le acababa.

- ¿Necesitas algo?

- No, en realidad quería darte las gracias por lo de hoy temprano. - Dijo mucho más tranquilo de lo que pensó.- No era necesario, ese tipo es así pero igual gracias.

- Sigues siendo una persona.

Jibeom lo miró un poco confundido.

- ¿A qué te refieres?

- No me agradas, pero Sangjun es in idiota.- Respondió con una sonrisa pequeña.
Parecida a la que le dio a SangJun antes de alejarlo pero mucho más orgullosa.


Se habían detenido para que Jibeom apoyará su mochila en una jardinera.

- Ten, supuse que te gustaban.

Jaehyun sostuvo el pan con los ojos llenos de brillo y una sonrisa torpe.

Jibeom no pudo evitar sonreír. Realmente le gustaba Bong.

- Gracias Jibeom.

El menor se sonrojó ante esa frase. Y giró su rostro ¿Por qué Jaehyun era tan lindo?

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