ÍNCUBO [KØOKTÆ]

8

Sus ojos expulsaban pura rabia, sus dedos golpeaban constantemente su mesa y su mente solo procesaba una única palabra; venganza.

-No sabemos cuando ocurrió...- Hablaba Asmodeo sentando frente a Satán- Lo siento-

-Escúchame muy bien- Miró fijamente sus ojos y cegado por la ira continuó-
Vas a encontrarlos, a los tres. Me da exactamente igual como, pero lo harás.-

Asmodeo asintió-¿Que vas a hacerles?-

Satán sonrió y encendió un cigarrillo, expulsando el humo antes de continuar- Que no voy a hacerles, esa es la verdadera pregunta-

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-¿Que haces?- Preguntó Taehyung, observando como Jimin levantaba una alcantarilla.

-Es un búnker- Dijo Jungkook, ayudando a Jimin.

-¿Esto nos salvará de ellos?- El rubio bajó su mirada preocupado.

-Nada nos salvará de ellos, Taehyung pero no vamos a rendirnos después de todo lo que hemos logrado- Dijo Jimin, abriendo totalmente la alcantarilla. Fue el primero en meterse dentro, bajando unas escaleras.

-Entra- Le indicó Jungkook.

Taehyung asintió y bajó las escaleras también.

Jungkook miró a su alrededor una vez más, asegurándose de que no hubiera nadie y bajó, colocando la tapa antes.

El lugar era pésimo, los suelos estaban llenos de mugre y agua marrón, habían ratas y diferentes insectos.

Caminaron en línea recta unos cuantos minutos hasta toparse con la puerta del búnker. Era gris y estaba bastante oxidada.

-¿Cuál era la contraseña?- Preguntó Jimin.

-Déjame a mi- Jungkook avanzó hasta la puerta e introdujo los seis dígitos.
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Abrió la puerta y sonrió- Bienvenidos a casa- Dijo con burla.

Jimin rio y entró también, seguido de Taehyung.

Taehyung observó el lugar, no era tan nefasto como esperaba, de hecho era bastante agradable; solo entrar se encontraba una especie de comedor junto a una pequeña cocina con los utensilios necesarios para sobrevivir.
Al final había una puerta algo desgastada, que llevaba a una habitación y dentro de ella; había otra puerta que llevaba al baño.

Era un espacio algo pequeño para tres personas pero tampoco estaban en opción de pedir un chalet.

-Prepararé algo de comer, mi recipiente está gritando de hambre- Dijo Jimin acercándose a la nevera.

-Vamos, te enseñaré la habitación- Habló Jungkook y Taehyung lo siguió.

Dejó que Taehyung entrara primero y cerró la puerta detrás de él, poniendo el seguro.

-¿Vamos a dormir los tres a...- Fue interrumpido, dando la vuelta en sí y pegando su frente a la puerta en un fuerte empujón.

¿Déjà vu?

Jungkook se colocó detrás de él, dejando a Taehyung entre la puerta y su cuerpo. Se pegó a él completamente y se acercó a su cuello.

-¿Como lo hiciste?- Susurró, dejando un húmedo beso en su sensible piel, el cuerpo de Taehyung reaccionó al instante; erizandose.

-¿E-el que?- Dejó caer su rostro y apoyó su cabeza en la puerta, bajando la mirada y suspirando ante los besos de Jungkook.

-¿Te follaste a Asmodeo?- Preguntó nuevamente, colocando sus manos al rededor de su cintura y pegándose más a él.

-¿D-de que hablas?- Su corazón comenzó a latir con fuerza- No... no lo hice- Susurró débilmente.

-Entonces...- Subió una de sus manos por debajo de su camisa, acariciando su pecho. La piel de Taehyung comenzó a arder.- Fue con Satán ¿cierto?-

Gimió cuando sus dedos hicieron una breve presión en uno de sus pezones.
-¿Cierto?-

Tragó saliva y sintió su respiración acelerarse con cada pregunta, con cada caricia. Mordió su labio inferior y débilmente, respondió con la verdad.
-Sí...- Suspiró de nuevo- Pero fue para salvarte, lo juro-

Jungkook se acercó a su oreja y sonrió, haciendo que Taehyung se removiera al sentir el cosquilleo de su cálido aliento.

-¿Donde te besó?- Subió más su mano, alcanzando su cuello y apretándolo levemente. -Dime exactamente dónde te besó-

Taehyung elevó su cabeza hacia atrás, apoyandose en su pecho, dejando más espacio para el agarre de su cuello.
Respiró profundo al sentir la erección que comenzaba a crearse en sus pantalones, chocar contra la puerta.

Jungkook mordió la suave piel de su cuello para luego lamer completamente el lugar, provocando el gemido inevitable de Taehyung.

-Él...- Comenzó a hablar Taehyung, recordando con desagrado las manos de Satán sobre su cuerpo- Besó mi espalda y mis labios- Una lágrima cayó por su mejilla.

Jungkook estiró un poco su brazo, llegando al interruptor y apagando la luz. Quedando en una oscuridad absoluta.

-Hoy no quiero que me veas- Susurró esparciendo besos húmedos y lentos por su espalda- Hoy quiero que me sientas.- Bajó un poco más y continuó besando su espalda, mordiendo y lamiendo.- Voy a borrar con mis besos cada roce de su piel con la tuya.- Se reincorporó y agarró firmemente la mandíbula de Taehyung, girando su rostro levemente hasta que sus respiraciones rozaran- Vas a sentirme, voy a profanar tu cuerpo hasta únicamente recuerdes mis caricias, hasta que tú mente te obligue a recordar que tu; eres mío... y yo; soy tuyo- Y lo besó, lo besó con tanta hambre, con tanta necesidad de eliminar cualquier rastro de ese hijo de puta, con tantas ganas de arrancar cada maldita lágrima que caía por su mejilla. Tantas ganas de protegerlo, de hacerlo suyo, únicamente suyo.