Capítulo 20. EMUNÁ

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Cerré la puerta y me senté en el escalón que dividía el salón. Apoyé la cabeza sobre mis manos y los codos sobre las rodillas. ¿Cómo era posible que en tan poco tiempo todo hubiera cambiado tantísimo?

No se me quitaba de la cabeza la imagen de Luisita. Seria, poco habladora, nunca la había visto así. Me sentía muy culpable de que aquello estuviera sucediendo y pensé en lo que llevó a su fin mi relación con Laura: la no comunicación.

Quería explicarle a Luisi todo lo que me pasaba, pero tampoco sabía muy bien cómo hacerlo. Quizá si le contaba todo lo que me rondaba por la cabeza, estaba dando por hecho una historia que puede que no fuera la que en realidad teníamos. Al fin y al cabo, nunca habíamos hablado sobre nuestra relación. Y por lo que sé de ella, nunca ha sido de tener relaciones. Pero ¿y si estábamos empezando a tener algo y yo ya me lo estaba cargando por no ser sincera desde el principio?

Desbloqueé el móvil y me metí en su conversación. Me sorprendió ver el "escribiendo" debajo de su foto de perfil. Decidí esperar a que ella terminara, pero parecía no hacerlo nunca. Si bien se llevaba un tiempo escribiendo después su estado pasaba a "en línea" y más tarde desaparecía la conexión. Después de unos minutos esperando a que ella terminara y sin obtener respuesta, opté por escribir lo que quería decirle en las notas del móvil, para que ella no viera que yo también le estaba haciendo y lo pudiera hacer con total libertad.

Cuando vi que más o menos mis palabras transmitían lo que intentaba expresar me volví a meter en la conversación. Ya no aparecía conectada y había pasado un buen rato desde que la vi escribir. Quizá se hubiera arrepentido, y si me lo pensaba mucho más quizá yo también lo hiciera, así que me armé de valor y lo envié.

Amelia [22:01]

No sé ni cómo empezar, pero sé que lo primero que tengo que hacer es pedirte perdón. Perdón por estos dos días en los que he estado tan rara. No sé qué has podido imaginar que me pasa, pero lo cierto es que lo único que ocurre es que estoy hecha un lío. Y como no quiero que este enredo que tengo en mi mente te afecte he pensado que la mejor opción era mantenerte al margen, pero evidentemente no ha sido una buena idea. No sé cómo actuar, no sé qué pensar, ni sé qué hacer. Tampoco sé si debería estar escribiéndote esto porque probablemente me digas que le estoy dando demasiadas vueltas y que la cosa no va contigo. Pero si quieres algún tipo de explicación podemos hablarlo cuando quieras. Si hay otros problemas no quiero que la comunicación sea otro añadido.

Luisita [22:03]

Amelia...

Yo es que no sé cómo actuar en una situación así. No sé qué esperas de mí ni qué necesitas. Porque por un lado pienso que tengo que estar contigo para demostrarte que puedes contar conmigo, pero por otro siento que me alejas y que te agobio.

Quiero saber si he hecho algo para que estés así conmigo. Y no quiero ningún perdón, quiero saber qué te pasa.

Amelia [22:03]

No has hecho nada, de verdad que no

No me agobias Luisi. Es solo que no estoy bien y no quiero que mi actitud te haga daño.

No tengo ningún problema en contártelo todo, pero creo que es mejor que lo hablemos en persona, para que pueda explicarte bien...

Luisita [22:04]

¿Te apetece que vaya al piso y hablemos o prefieres otro momento?

Amelia [22:04]

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