CAPITULO 21

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Roger ladeó una sonrisa, al ver la figura de Devany tras las gafas obscuras que traía puestas en ese momento, mientras todos los flashes impactan en el rostro de los cuatro integrantes.

Queen había vuelto a Londres tras una pausa a la gira por motivos de la fiesta del cumpleaños Mercury y las fiestas de Navidad y Año Nuevo.

El rubio se acercó a pasos rápidos a la chica plantandole un abrazo dejándola pasmada ante su acción.

-Hola Devy.
-Hola Meddows, ¿Que tal?.
El rubio sonrió de buen humor mientras se despegaba de ella para observar su rostro atentamente.
Ella se sonrojo al notar que el rubio no despegaba sus ojos de ella.
-Bien gracias. ¿Y tú?
-¡Genial!-apreto los labios-Bueno es genial, porque estás aquí... los cuatro están aqui-Corrigio rápidamente.
Roger tomo su mano con delicadeza y ambos se dirigieron a la limosina que los esperaba, mientras los flashes de las cámaras apuntaban a ellos sin cesar.

La misma los dirigió hasta el estudio de grabación. Dónde Jim Beach les dió la bienvenida y después se retiró, los cuatro integrantes se quedaron en el estudio hablando mientras Devany los observaba desde la cabina de grabación.

Luego Mercury se dirigió a ella con los brazos abiertos, mientras los demás entraban a la cabina de grabación.

-¿Querida si vendrás a mi fiesta?-los ojos negros del azabache brillaron expectantes.
-Si. -añadio ella con una pequeña sonrisa-Bueno, si Roger quiere, claro.
-Te dije que si bonita. -replico el rubio lanzándole una sonrisa.
Los ojos del vocalista se abrieron como platos al escuchar como la había llamado. Sin decir una palabra más le dio un abrazo a la chica y salió junto con John, sin quitarle la vista al rubio quién en ese momento estaba concentrado en encender un cigarro.
Cuando todos salieron, Roger y Devany salieron hacia el auto, entre empujones de los reporteros.
-Vaya. No sabía que era una odisea caminar hasta tu auto.
-¿Está mal?-pregunto el rubio mientras el cigarro le bailaba en los labios.
-Incomodo, pero soportable.-replico ella lanzándole una sonrisa.
-¡Roger!, ¡Roger! ¡¿Que nos puedes decir de tu nuevo romance?!-se escuchaba a través de los vídrios del Alfa Romeo que conducía el rubio.
Roger los regreso a mirar y luego se empezó a reír.
-A veces son tan graciosos.
-¿No te incomoda?, ¿Que digan que somos novios cuando en realidad no lo somos?-Devany sintió una punzada de nervios en ese momento.
-Deja que la prensa diga mierda y media, mientras tú y yo sepamos lo que tenemos con eso basta. -agrego el rubio encendiendo el motor. -¿Quieres venir a comer a mi casa?
-Gracias Meddows. Y si acepto ir a comer a tu casa.
El rubio sonrió mientras ponía el auto en marcha, se veía cómodo estando en compañía de la castaña.

Su sonrisa no desapareció de su rostro mientras entraba a su mansión.
Ella cortésmente saludaba a todos los sirvientes que pasaban junto a ellos, la llevo de la mano hasta la enorme cocina en dónde estaban reunidas las mujeres que había conocido hace tiempo que respondían al nombre de Susane, Kathia, quienes eran las mucamas principales de Roger, Fiore la cocinera y Helena asistente del baterísta. La reconocieron y de inmediato la saludaron amablemente.
—¡Joven Taylor que bueno que la trajo! –replico Fiore mientras se dirigía hacia la alacena dónde guardaban las especias.
Roger esbozo una sonrisa traviesa y apretó la mano de su acompañante.
Devany regreso a observarlo anonada y le dedicó una sonrisa tímida a la que el rubio respondió y luego la ayudo a qué se sentará en una de las sillas.
Se sentaron en la mesa Roger se volteo de manera en que el hombro de Devany rozaba su pecho casi tan cerca que podía sentir el calor de su cuerpo.
Paso su mano izquierda sobre su cadera enterrando sus uñas en su camisa rosa de algodón mientras más cerca la tenía se sentía más vivo.
Depósito un pequeño beso en su hombro y le dió una calada al cigarrillo que sostenía con la otra mano. La chica permanecía con la cabeza recostada en el hombro del baterista y sonrió contenta sin decir nada.
Se dedicaron a comer en silencio disfrutando de la cercanía de sus cuerpos.

Se dedicaron a comer en silencio, Devany no pasaba por alto las sonrisas de parte de las mucamas y el demás personal de Roger. Aunque trataba de no seguir haciéndose ilusiones. Pues pensaba que en cualquier momento el rubio le daría la patada como a todas, pero se concentraría en disfrutarlo lo más que pudiera. El tiempo que durará. Y pensándolo bien se sentía muy bien estar entre sus brazos, podía incluso oler su perfume filtrarse en sus fosas nasales.
Los ojos del baterista conectaron con los de ella mandando descargas eléctricas por todo su cuerpo y lanzo un suspiro conteniendo las ganas de besar sus labios, aunque solo fuera por una vez. ¡Cuánto lo deseaba!
¡Cuánto deseaba que el lo hiciera!
—Rog, ¿Puedo hacerte una pregunta?.–pregunto ella para llenar el espacio vacío.
El rubio la observó con interés esperando sus palabras.
Ella lo observó con la lengua saliéndose por sus  labios.
—¿Enserio te caía mal?–replico dudosa
—En realidad no–estiro la espalda y movió los platos para luego fijar su vista en ella. Abrió un poco sus labios y luego los cerro.
—Bueno a veces me incomodaba un poco el que no tratas de unirte a las conversaciones. –sonrío de lado.—De ahí en fuera, te me hacías muy tranquila, eres una persona con la que puedes pasar el tiempo sin que esté encima tuyo. Eso me fascina–agrego el rubio rascándose la mejilla.
—¿Te fascina?–pregunto ella abriendo un poco los labios.
El sonrió con indulgencia.
—Barbara se la pasaba gritando, me aturdía.
—Tu también eres muy escandaloso. –observo ella
—Mi voz no ayuda mucho.
—Pero es genial, escucharte, podría reconocer tu voz muy fácilmente. ¡Me encanta, es única!. Y cuando cantas es magistral.
Roger alzó las cejas impresionado y le sonrió.
—Perdón por adularte tanto...es que enserio...te amo a ti y a tu música. –abrío los ojos como platos y enrojeció como cual tomate.
—Lo siento, me pase.
Roger negó con la cabeza y puso su mano sobre la de ella, tratando de calmarla.
—No tranquila. Está bien–agrego el suavemente con una sonrisa de oreja a oreja.
Devany lo observó esperando a que se burlara o algo por el estilo pero solo permaneció ahí, sonriendo con orgullo.
—Roger enserio, jamás me cansaré de decir cuan increíble eres.
—¿A pesar de todo lo que te hice?–sus ojos azules se entristecieron un poco.
Devany coloco la palma de su mano en su mejilla y lo obligó a mirarlo a los ojos.
—A pesar de todo, para mí eres lo mejor del mundo entero.
La boca de Roger se entreabrio un poco y depósito un suave beso en su frente.
—Gracias por eso. Me hace sentir un poco mejor.
Ella sonrió y acaricio su cabello, disfrutando de su compañía.

Hola a todas aquí está el siguiente capítulo.
Lo tuve que quitar al publicarlo antes ya que estaba incompleto.

¡Espero que les guste!
Gracias por sus comentarios agradezco que les esté gustando la historia.

-Fernanda Cuecuecha

𝑴𝑰 𝑰𝑴𝑷𝑶𝑺𝑰𝑩𝑳𝑬//𝑹𝑶𝑮𝑬𝑹 𝑻𝑨𝒀𝑳𝑶𝑹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora