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CAPITULO 10

"Las risas producto de Roger y Barbara inundaban la habitación.

El rubio se llevó la cerveza a los labios y tomo un trago de la misma para luego observar a la morena con el ceño fruncido.

–¿Y tú amiga?–pregunto.
–Ah Devany–replico rodando los ojos. –No le gusta este ambiente. Es una aburrida.

Roger sonrió divertido.

–¿Acaso es de las que se quedan en casa?

–Si Roger.–replico rodando los ojos. –Solo sale si tú vas conmigo.

El chico la regreso a observar sorprendido.

–¿Que?–replico mientras fruncía el ceño extrañado.
–Le gustas.–replico ella riéndose. –No debí decirtelo, pero ya lo sabes ¡UPS!– replicó riendo. –Claro, ni que te fueras a fijar en ella. No es tu tipo.
–No. Pero se ve buena chica.–agrego el mientras se acercaba a la mesa para tomar un cigarro.
–¿Buena de cuerpo?–replico ella enarcando las cejas.
Roger se rió.
–Aparte.–replico el rodando los ojos. –Pero no lo sé. Hay algo en su mirada. Es demasiado pura e inocente.

Barbara soltó la carcajada.
–¿Enserio Roger Taylor?,¿Tu hablando de pureza e inocencia?.–se río de el.
–Oye aunque sea un vil mujeriego sin sentimientos se reconocer cuando una chica tiene un lindo corazón.
–Awww–replico ella rodando los ojos.
Roger la observó en silencio mientras se llevaba el cigarrillo a la boca.
–Oye y que tal si...–regreso a observarlo.–Que tal si tú fueras su primera vez.
Roger frunció el ceño.
–¿Es virgen?
–Obviamente Taylor. Es una aburrida ya te lo dije.
El rasco su cabeza incómodo.
–No lo sé. Eso es demasiado. Sabes que yo solo agarro chicas con experiencia.
Barbara suspiro cansada.
–¿Quieres gastarle una broma a tu amiga?–pregunto el rubio.
–Siempre lo hago.
–¿No se molesta?
–No ella nunca dice nada–replico encogiéndose de hombros.
–Esta bien. Lo haré porque eres mi mejor amiga.
Ambos chocaron los puños.
Iniciando así una tregua sin fin"

Roger Taylor hecho su cabeza hacia atrás recargandola en el asiento. Cerro los ojos mientras su corazón se encogía al escuchar los sollozos de la chica que tenía al lado.

–No pensé que todo fuese a llegar tan lejos.–replico en un susurro.
El tiempo había pasado, pero la mirada triste de la chica no había cambiado. Desde que se había aliado con Barbara, recordaba cada broma que le habían echó. Había llegado hasta el punto de gritarle. Sabía que ella jamás le diría nada, y termino por sentirse culpable. Los sollozos por parte de ella hacían que Roger se estremeciera, y que en el se albergara un sentimiento de tristeza y culpabilidad.

Los segundos pasaron, Devany se mantuvo en silencio solo pidió que la llevarán a casa y Roger lo hizo. Al bajar del auto no dijo nada. Roger se percató que llevaba uno de los vestidos, que uso durante una fiesta en la playa donde la había empujado al mar provocando que se empapará toda y pescara un resfriado al día siguiente. Barbara jamás paro de reírse de ella mientras John la abrazaba para que entrara en calor alrededor de la fogata.

Roger condujo de vuelta al estudio mientras las lágrimas caían de sus ojos. Había sentido su dolor, se dió cuenta que había sufrido cada broma, ¿Cuántas noches se había quedado así llorando?, ¿Cuántas noches la había dejado ahi por culpa de su inmadurez?. ¿Cuántas noches había llorado por el?. Sus lágrimas lo decían todo, ni siquiera la había tocado.

Llegando al estudio cerró la puerta y se quedó en el suelo mientras escondía la cabeza entre las rodillas.

–¿La dejaste en casa Roger?.
–Si.–replico con un sollozo.
Sintió como alguien lo tomo del hombro.
Y alzó la cabeza, para encontrarse con la mirada de John.
–Soy una mierda de persona.
Cerro los ojos. Sus pensamientos solo volaban hacia los recuerdos que lo torturaban cada vez más y más. Se detenía en cada imagen donde le había echo daño, en las palabras que había usado. En la última vez que la vio bañada en lágrimas por su culpa.
–Soy un idiota. Jamás debí hacerle daño. ¿Porque nunca me di cuenta?. ¿Porque no puedo pedirle perdón?.
–¿Que sucede?–replico una nueva voz. –Roger ¿Estás llorando chico?–pregunto.
–Trato de la mierda a una chica, y ahora se siente culpable.–agrego Brian.