Situaciones Inesperadas

Capítulo 6

Zhuo Cheng estaba saliendo del lugar en dirección a su oficina, estaba preocupado por su pequeño hermano ya que sabía que no era tan bueno manejando situaciones estresantes.

Sabía que debió despertar hace rato, pero decidió dejarlo en compañía de sus amigos y esperaría a que él mismo se acerqué y brindara como siempre su apoyo incondicional.

Ahora debía atender otro asunto que era aquella chica castaña, de ojos saltones que había incurrido de un momento a otro y ocasionó un ligero sentimiento que no había experimentado desde hace unos años.

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Zhuo Cheng tenía una hermosa relación con su prometida de apellido Liu, era mayor que él, respetuosa, cariñosa y sobre todo comprensiva; llevaban 8 años como novios hasta que decidieron dar el siguiente paso y formar una hermosa familia.

Pero unos días antes de la boda Zhuo Cheng recibe unas fotos de un hombre hermoso que tenía las mismas facciones de su prometida.

Al principio pensó que podría ser su hermano, pero recordó que era hija única; no entendía nada, pero entre las fotos encontró una USB en donde la conectó a su laptop y encontró un video, al reproducirla entendía ahora algunas reacciones inusuales que tenía Liu.

Su mundo se quebró de un momento a otro, todo aquello que vivieron juntos le parecía un maldito chiste, quería gritar, llorar pero no podía...

Sólo se quedó en silencio y con una sensación de vacío en su corazón.

-Disculpe por hacerla esperar.

-mirándolo seriamente-. No se preocupe, entiendo que era una situación que requería de su atención.

-asintiendo-. Dígame, ¿En qué puedo ayudarla?

-Escuché que el puesto de psicóloga está vacante y me interesaría trabajar aquí.

-Es directa, me gusta eso de las personas. ¿Cómo se llama?

-Meng Ziyi.

-sonriendo-. Bueno, señorita Meng no veo ningún problema, si gusta puede empezar desde mañana.

-Perfecto. -levantándose de su asiento-. Me retiro, tengo cosas que hacer. -haciendo una reverencia-. Fue un gusto señor Zhuo. Nos vemos mañana.

-El gusto fue mío.

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-Zhan Zhan tú hermano ya se fue... ¿Puedes abrir los malditos ojos de una vez?. -habló Hao Xuan-.

-suspirando-. No quiero ver a nadie, déjenme sólo. -girándose y dándoles la espalda-. Estoy bien, Wen Qing me cuidará.

-¿Estás seguro?... -mirando en dirección al castaño-. Wang Yibo también está aquí. -dijo Ji Yang-.

-No se preocupen chicos, no hará nada... este lugar está resguardado más que la cárcel.

-Está bien, nos vemos mañana. Descansa.

Song Ji Yang y Hao Xuan se retiraron del lugar...

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Media hora después...

El pelinegro no podía dormir, estaba dando vueltas y vueltas pero no conciliaba el sueño...