Capítulo 17

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Después de unos segundos se separaron aturdidos por aquel beso, sus sentidos aún no se encontraban coordinados pero el silbido de Meng Ziyi los hizo regresar a la realidad.

Wuxian sonreía tontamente al castaño envolviendo sus brazos en su cuello, mientras Yibo tomaba su cintura sin poder creer lo que había hecho su amigo.

-¿Qué fue eso A Xian?. -susurrando-.

-No te preocupes, no debes agradecerme. -besando su mejilla-.

Wuxian decide corroborar sus sospechas, buscando la mirada de Xiao Zhan, entre la multitud encontró muchas caras conocidas que no debieron presenciar ese beso, pero no habría problema en explicar el asunto a sus padre y al señor Wang; aunque su sonrisa se esfumó rápidamente al ver la visita inesperada que los acompañaba.

Varios ojos estaban puestos en la pareja, entre ellos estaban los alumnos, profesores, su padre, su futuro suegro, su futuro tío y Lan WangJi...

-¡¿Qué hace Lan Zhan aquí?!. ¡¿Qué hice?!

Un par de ojos fríos y sin pizca de emoción miraban en su dirección, aquellos ojos ámbar los reconocería por cualquier lugar. Pero sobre todo su asombro fue ver que estaba tomando la mano de Xiao Zhan, algo que nunca se le fue permitido.

-¿De dónde se conocen ellos?... Acaso será esa la persona de la que hablaba Lan Zhan.

Un nudo en la garganta se le formó a Wuxian al tratar de imaginar que Xiao Zhan era la persona de la cual se enamoró, la cual sería dueño de su corazón cuando acabara el año, pues recordó una conversación de las tantas en la empresa que el heredero Lan estaría comprometiéndose con un hermoso chico pelinegro.

-No puede ser cierto, no, no, no...

-¿A Xian estas bien? Estás temblando y ¿Por qué estás llorando?.

-mirando al castaño-. Está aquí Bo Bo. -mirando a WangJi- Él está aquí con su prometido.

Wang Yibo dirigió su mirada a WangJi, pero lo que más descolocó al castaño fue ver a la persona que estaba a su lado. Nada más y nada menos que Xiao Zhan.

Las pláticas que siempre tenía con Wuxian empezaban a mermar en su cabeza intempestivamente, y empezaba a entender la desesperación en su amigo.

Mirando nuevamente a Wuxian, sabía que era capaz de colapsar en ese momento, atrajo su cuerpo posesivamente para que nadie vea sus lágrimas y su desosiego.

Todo aquello fue demasiado de asimilar, y pensar que hace unos días se sentía la peor mierda del mundo y ahora solo había sido víctima otra vez de las circunstancias. Jodida suerte la que se cargaba, pero ya no atacaría a Xiao Zhan ya que ahora su prioridad era Wuxian.

Todos sus pensamientos frenaron de golpe al escuchar la voz de WangJi, lo cual hizo que se diera cuenta del melodrama que estaba formándose ese hombre al creer lo peor de Wuxian.

Pero no permitiría que lastimaran más a su amigo, nunca más.

-Vamonos Zhan. -arrastrando al pelinegro por el pasadizo-.

Xiao Zhan solo dio una mirada rápida a Wuxian, que estaba cargada de puro desconcierto, pero no quería estar más en ese lugar y tampoco quería ver a Wang Yibo y al parecer el sentimiento era mutuo, ya que sus ojos destellaban en odio y celos.

Si fuera en otras circunstancias tal vez se hubiera asustado, pero a estás alturas del partido le valía lo que pensar de él; además sus sospechas fueron confirmadas y no habría motivo para estar ahí.

Mirando al serio Lan, sabía que WangJi necesitaba de su apoyo en estos momentos, aunque literalmente sería de su silencio. Pero mientras eso ayudará al joven Lan, estaría acompañándolo.

Zhuo Cheng estaba echando chispas, pero al ver que nadie se movía para saber qué pasaba con la nueva pareja que estaba abrazada, optó por usar su voz de mando conocida por todos. El director está molesto por siempre presenciar dichos eventos nada académicos.

-Bueno, bueno, el show acabó y cada quien regrese a su lugar. -mirando a los profesores- ¡Muevan esos traseros que para eso se les paga!. -dirigiéndose a los estudiantes-. ¡Mi abuela se mueve más rápido que ustedes mocosos!...

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El camino fue silencioso y a la vez tranquilo, lo cual no era nada raro para WangJi pero para Zhan sí. De un momento a otro WangJi soltó la mano la Xiao Zhan y como si supiera las intenciones del Lan, optó por llevarlo a un lugar tranquilo, llegando a la azotea donde casi nadie frecuentaba el lugar debido a que no tenía ningún lugar para sentarse. WangJi no protestó y solo siguió a Xiao Zhan.

Eran cerca de las 5:30 pm y la puesta del sol se hacía presente, un bonito espectáculo para presenciar en pareja pensó ridículamente Xiao Zhan.

-¡Es hermoso!. -exclamo el pelinegro-. ¿No lo crees Lan Zhan?. -apoyándose en la pared-.

-¿Mmmm?. -mirándolo curioso-.

-El atardecer... -suspirando-.

-Mmmm.

-¿Sabes?... Existe una creencia sobre la puesta de sol.

-¡¿Mmm?!.

-¿La conoces?

-negando-. De qué se trata.

-riendo-. Se dice que mientras el sol se oculta, puedes pedir 3 deseos. Pero deben salir de tu corazón.

-¿Crees en eso?

-pensando-. No, la verdad es que creo que son cuentos inventados... pero no perderíamos nada si no lo intentamos. ¿No lo crees?. -sonriendo-. Esta vez probaré suerte aprovechando el bonito paisaje. -cerrando sus ojos-.

-¿Por qué piensas que te haré caso?

-¿Yo nunca dije que hicieras nada Lan Zhan? -sonriendo y abriendo discretamente los ojos.

WangJi no reflejó nada en sus facciones, pero Xiao Zhan pudo darse cuenta que al menos se relajo un poco al ver como miraba anhelante la puesta del sol.

Aquello era como una manera de darle ánimos y que no se desanime en luchar por lo que ama. Xiao Zhan no era ciego y pudo darse cuenta que Wuxian tenía sentimientos por WangJi, pero lo que aún no podía entender era porque beso a Yibo.

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Como si fuera cliché, Meng Ziyi apreciaba todo desde la esquina del pasillo sin creer que un maldito drama se había formado realmente.

Ya no era comedia sino una tragedia esta historia, y lo peor de todo es que el tiempo no jugaba a su favor. Pero lo que más le aterraba era que estaba empezando una relación con Zhuo Cheng y si no solucionaba el asunto de su hermano, no podría estar en una relación al saber que su pequeño Didi era infeliz como la mierda.

Haciendo una llamada rápida a su pareja decidieron acordar todo para el fin de semana y esperar que los astros y toda la constelación estén de su lado.

-Espero estar haciendo lo correcto...

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Situaciones InesperadasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora