Minutos antes del juego...
Era su cuarto vaso de cerveza y aún no podía relajarse, en cambio el efecto fue todo lo contrario, Xiao Zhan estaba a punto de largar a todos de su departamento como sea y muy poco le importaba si salía nuevamente en el boletín informativo del Instituto.
Al diablo con todo, quería su jodido espacio silencioso sin bullicio y sin esa risa estúpida y risueña del pelinegro que acompañaba a Yibo. No entendía porque diablos estaba colgado como mono de su brazo y no decía nada para alejarlo.
-mirando a su hermano-. Llévame a la casa por favor.
-negando-. Tú permitiste esto, no puedes huir Zhan. Tienes que hacerte responsable. -riendo-.
Aquello era cierto y se arrepentía, pero no pudo controlarse cuando recibió una visita inesperada hace unos días.
.
.
.
Zhan y Yibo habían acordado engañar a Meng Ziyi y el plan debía ser muy verídico. Al principio pensó que sería difícil exponer su punto, pero fue todo lo contrario. Incluso parecía como si fuera otro Yibo quien hablara con él y no el típico chico serio que conocía.
No podía creer que tanto podía cambiar las personas en cuestión de horas pero no dijo nada. Parecían dos personas tratando de llegar a una solución a su problema, no hubo insinuaciones o toques lascivos por parte de nadie. Aquello inconscientemente incomodó un poco pero al parecer era lo mejor para todos.
Habían dejado en claro todo y decidieron que por la paz mental de todo el Instituto, sólo se reunirán en las sesiones de psicología. Incluso el incidente pasado se había olvidado por completo y agradecía mucho aquel gesto por parte del castaño.
Pero lo que más intrigó a Xiao Zhan ese día, fue el hecho de que el mismo joven que estaba en su departamento era el mismo que lo recogió al terminar su charla. Obviamente no preguntaría directamente quién era, pero la curiosidad podía más y al descubrir de quién se trataba la tregua de paz se fue a la basura unos minutos después.
Se había enterado que aquel jovencito era algo más que simples amigos, al principio trató de excusarse pensando que Wang Yibo no sabía nada, pero la realidad era otra.
En ese momento todo su ser hirvió en ira y rabia. Ya no le importaba si su hermano hablaba con la Universidad y le negaban la entrada, ya que como segunda opción tenía pensado vivir con WangJi en uno de sus departamentos y sería difícil que Zhuo Cheng intervenga a sabiendas de la relación que tenía con la familia Lan.
Los Zhuo eran conocidos de los Lan desde hace algunos años, pero no existía otra relación que no sea de negocios y aquello se lo debían a Xiao Zhan quien era muy querido por los padres de WangJi, ya que se lo debían por haber salvado la vida de su hijo cuando tenía unos 10 años.
Los señores Lan eran conscientes de que nunca alcanzaría esta vida para pagar aquel favor, ya que anteriormente habían perdido a un hijo y WangJi fue casi un milagro poder concebirlo debido a la edad de sus padres.
.
.
.
Otra opción que siempre tuvo en mente en caso no pudiera estudiar fotografía debido a sus padres era diseño gráfico, y ya había tomado algunos cursos en sus vacaciones sin que su hermano sospechara algo, ya que para todos, Xiao Zhan nada más andaba jugando dota y no salía de su habitación por horas hasta que encontró un trabajo de medio tiempo en una cafetería y decidió independizarse.
Obviamente el señor Zhuo siempre deposita dinero en su cuenta y aquel dinero nunca fue utilizado, pero decidió guardarlo en caso llegará a necesitarlo más adelante.
El pelinegro al ser excelente en sus estudios, accedió a una beca completa en la Universidad de Utsala y era más fácil ocupar un puesto en la empresa Lan, ya que se podía realizar sus prácticas sin ningún problema.
Tranquilamente podría vivir sin problemas en Suecia por el resto de su vida.
.
.
.
Mirando por el lado de la mesa de la cocina, divisó a Yibo riendo alegremente con Wuxian, un hermoso joven de mirada risueña. Aquello era raro de ver ya que conociendo a Yibo, era inusual pensar que permitiera que alguien irrumpiera su espacio personal.
Pero si se trataba de su prometido no habría ningún problema en ello, ya que una vez casados, compartirían más que abrazos y besos...
-Mentiroso, si te afecta el hecho de que jugó contigo haciéndote creer que eras algo más. -fue lo primero que su subconsciente grito por su mente-.
Sabía que no debería afectar nada de lo que haga o deje de hacer, pero no entendía porque se sentía tan mal. Peor que un amante que esperaba algo más en la relación clandestina que tenían.
Una risa divertida lo sacó de su estado pensativo, aquel ruido estruendoso se escuchaba por el otro extremo del lugar. Mirando detenidamente aquella escena era algo que extrañaba en su relación con Jasper. Aquella en donde solo estaban ellos y el mundo no importaba.
Definitivamente Kris era más amigo íntimo de Jasper que él. Pero meditando todo el contexto detenidamente, pudo entender que él había cambiado hace mucho tiempo y sería realmente difícil retomar algo de su relación.
Ya no era el chico dulce y divertido que siempre pensó ser, en cambio era alguien que trataba de encajar y la gente solo lo buscaba para ver si sacaban algo de provecho, ya que al ser el hermano del director pensaron que tenía alguna ventaja ser cercanos; y si la gente se aburría de él, simplemente lo dejaba como pasó con Yibo.
.
.
.
Al final siempre tuvo razón el castaño al referirse hacia su persona como alguien tan superficial, porque estaba seguro de algo y era que por más que estuviera enojado una persona, siempre en las palabras que decimos existe un poco de verdad.
Verdad amarga y dolorosa que debía aprender a superar si quería avanzar en el camino de la vida que nunca fue fácil; pero sabía que se levantaría de este inconveniente como todos estos años.
Otra vez su mirada se enfocó en el castaño y el pelinegro, pero esta vez pensando objetivamente debía ser sincero consigo mismo, y era que nunca existió ninguna relación con el castaño, pero sintió todo lo contrario.
-¿Qué me pasa?... diablos estoy mal. Siento que soy el amante en la relación. -cerrando los ojos de golpe-. Bien Zhan, sabes lo que debes hacer y no des más vueltas al asunto...
ESTÁS LEYENDO
Situaciones Inesperadas
General FictionEl amor llegará en una situación inesperada a su corazón, y tendrá que decidir arriesgarse o seguirá en su cascarón en donde se siente cómodo y seguro. Decirlo, es más fácil que hacerlo. ✓DISPONIBLE SOLO EN WATTPAD GRATUITAMENTE. ✓SI ENCUENTRAS EN...