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La película estuvo malísima, aunque no creo que Jimmy lo notara ya que estuvo abrazandome y mirandome las 2 horas que pasamos allí.

- Que estúpido final! - dije mientras salía con Jimmy aferrado a mi cintura.

- Lo sé, nadie corre por más de 20 minutos por una chica que te trata como un trozo de mierda.

- Reí - Que falta de romanticismo Sullivan.

- No es eso - dijo entre risas - es que creo que si yo fuera ese chico me hubiese desmayado al correr el primer metro.

- Es sorprendente que te canses tan rapido de correr pero no te cansas de estar pegado a mí como sanguijuela.

- Lo siento Mae. Es que me encanta tu cintura - dijo apretandome aún mas- tan delgada y hermosa.

- No Jimmy! - dije liberandome por fin de sus brazos - no me dejaste ir al baño y si me sigues apretando así pues creo que tendrás que secar un charco muy grande!

Jimmy sólo rió por mi comentario, pero yo hablaba en serio. Era algo vergonzoso decir algo así pero no me importa, Jimmy tendrá que darse cuenta de como soy.

- No te dejaré ir - dijo James tomandome de nuevo - no me importa lo que pase en tu linda vejiga.

- En serio Sullivan? - dije mirándolo con decepción - "linda vejiga"? Eso es desagradable - hice cara de asco.

- Bueno ya! No soy un experto enamorando mujeres!

- Pues se te nota y por cierto - quité sus asfixiantes brazos de mí - a mí si me importa "mi linda vejiga" asi que iré al baño.

- No te esperare Mae!

- No me importa!

Hice mis necesidades y cuando me estaba lavando las manos pensé en lo que me había dicho James.

- Si te dejó aqui sola pues es un idiota - le dije a mi reflejo. En eso una chica me quedo viendo raro y yo solo le dirigí una mirada de "que me ves imbécil, mira a otro lado y deja a mi cara en paz".

Salí del baño algo triste porque James seguramente se habría ido. Entonces lo vi y no pude evitar sonreír como idiota.

- Jimmy! - corrí hacia el y lo abracé - pensé que te irías.

- No te dejaría sola, aunque admito que sería divertido - le dirigí una mirada asesina - vamos Mae, no te pongas así, te compré algo.

- Mas te vale que sea bueno o puedes considerarte muerto - me crucé de brazos mientras el sacaba algo de una bolsa.

Extendió su mano hacia mí y tenía la chocolatina mas grande que he visto. Fué hermoso!

- Ya siento que te amo! - dije recibiendo su delicioso regalo.

- Vaya Mae que linda eres - lo miré confundida - gracias, yo tambien ya siento que...

- Espera James - lo interrumpí rapidamente - se lo decía a la chocolatina.

- Al menos dejame soñar mujer! - dijo haciendo caritas. Santa mierda me encanta ver cuando hace sus caras extrañas. Y pensandolo bien las hace cada 5 minutos.

- Lo siento Sullivan, pero esta chocolatina tiene un lugar mas importante en mi corazón que tú.

- Pero yo te la regalé! Eso no me hace subir ni un poquito?

- Solo si me regalas mas - dije sonriente

- Y si te regalo mas besos? - estiró sus labios hacia mí y los movía de manera extraña mientras se me acercaba.

- Que asco James! - Grité y lo detuve poniendo mi mano en su boca. Y pronto me arrepentí de hacerlo - James Owen Sullivan! Eres un marica! - aparté mi mano rapidamente y James empezó a reir a carcajadas - Por qué lamiste mi mano! Pinche imbécil!

Jimmy entre tantas risas a penas pudo articular algunas palabras.

- Oye Mae tranquila!

- No! No me tranquilizo ni un culo! Tengo la mano empapada! - sacudí mi mano rapidamente - Y me da asco la saliva! - juro que estaba a punto de llorar.

- En la boca tambien te da asco? - puso cara coqueta mientras se acercaba a mi rostro. Soy un amor, asi que me alejé tan rapido como pude- Vamos Mae, imagina que soy el de la pelicula. - puso su cara de "galán" - eres la unica mujer que he amado en mi vida. - hablaba con un acento fingido, extraño y ridiculo - besame ahora!

- Que ganas tienes de decir pendejadas, verdad Sullivan? Dejame comer mi chocolate en paz.

De camino a casa solo reímos, jugamos y tuve que golpear a Jimmy cuando me quitó las ultimas partes del enorme chocolate que estaba devorando sola. Lo se, parezco un cerdito cuando como.

- Gracias por acompañarme de regreso James - planté un beso rápido en sus labios y entré a mi casa corriendo.

- Oye Mae! - me sentí mal por dejarlo afuera con tanto frio y gritandole a la puerta - Podriamos salir de nuevo mañana?

Abrí la puerta y vi como sus ojos se iluminaban - No. Debo trabajar mañana. - estaba por cerrar de nuevo pero el poste de luz detuvo la puerta con su brazo.

- Entonces, te veré mañana en el trabajo. Como el dia en que nos conocimos.

- Deberias trabajar Sullivan.

- Yo trabajo! - fingió estar indignado - pero tambien debo desayunar.

- Bien, hasta mañana imbécil.

- Hasta mañana linda, te quiero. Tu me quieres?

- El chocolate estaba delicioso. - dije sin expresion alguna y entré a mi casa.

En cuanto cerré la puerta escuché un grito que me hizo temblar.

- Te voy a enamorar Mae Sanders!

Y yo le creí cada palabra.

- Me vas a enamorar James Sullivan - dije casi susurrando.

Matt apareció de la nada - Que dijiste?

- Nada! Que te pasa! - salí corriendo hasta mi habitación

- Me vas a enamorar James Sullivan! - dijo Matt con voz de niñita burlándose de mí

- Callate! - grité desde mi cuarto y sentía mi rostro enrojecerse lentamente.

Dios. Que vergüenza.

Second HeartbeatDonde viven las historias. Descúbrelo ahora