—Amo, le traigo grandes noticias —decía alegre brincando hasta su nariz.
—Yo también tengo grandes noticias Myoga —sonrió ampliamente imaginando la cara que pondrían sus amigos.
—¿Qué será eso amo Inuyasha? —curioseo la pulga siendo lanzado por su amo de nuevo al piso.
—No se lo imaginan Myoga, jajaja —rio complacido caminando a la entrada de la casa.
—Anciano Myoga ¿Qué es lo que averiguo? —preguntó Kagome llegando a prisa.
—Kagome-sama, pregunte a algunos viejos conocidos y como sospechaba la leyenda es cierta y hay cosas que desconocíamos, el clan Jikū por años ha estado buscando algo, o ¿A alguien?
—¿Qué quieres decir? —pregunto poniéndose de cuclillas.
—Kagome-sama, siempre se pensó que el que usted haya venido aquí fue el deseo de la perla de Shikon, sin embargo, al parecer, no es solo por eso.
—Podría ser cierto.
—Kagome-sama ¿Hay algo que no nos está diciendo?
—Anciano Myoga, no entiendo bien que quieren que haga, o por qué soy importante —evadió la pregunta dibujando algo en el suelo con los dedos—. Pero es indudable que vendrán por mí y será pronto.
—No se preocupe, mi amo no permitirá que le hagan daño.
—Es por eso..., que él no lo sabe —desvió la mirada a Inuyasha y Moroha que estaban sentados, riendo juntos—, por el bien de ellos... tomé una decisión.
—¿A qué decisión se refiere?
—Debo encontrarlos, necesito saber que quieren de mí y para ello tendré que ir con ellos...,por lo menos hasta que encuentre un modo de librarme.
—Kagome-sama, dijo que la llamaron "nieta"
—Así es, pero aún ahora, no estoy segura de lo que escuche.
—Si Ud. pertenece a ese clan, entonces, lo más probable es que descienda del hermano mayor, Nageru.
—¿Nageru?
—Sí, ya qué quien lidera ahora el clan es...
—¡Hey Kagome! ¿Por qué estás perdiendo el tiempo con Myoga? —interrumpió Inuyasha.
—Enseguida voy —le sonrió— recuerde lo que le dije, Inuyasha no puede saber de esto; no debe saber mi decisión. Primero averiguare que es lo que quieren.
—Kagome-sama sé lo que buscan, pero no pude averiguar ¿Por qué la necesitarían?
—Entonces averiguare eso —endureció la mirada presionando los puños.
—¡Mamá apresúrate!
—Sí, si ya voy —respondió levantándose—. Anciano Myoga confió en usted.
—Kagome-chan, buenos días.
—Buenos días Sango-chan —saludó— lamento tanto tener que molestarte.
—¡Feh! —gruño— Si fui yo quien cargo todo ayer. Por cierto, Miroku, me llevare una cantidad.
—¡Claro!, pensé que te lo llevarías ayer.
—¿Qué te pasa Inuyasha? —pregunto entrando a la casa el zorro— estas muy risueño hoy. No me digas que Kagome te soltó la correa —rio burlonamente.
—¡Cállate pequeño bastardo!
—¡No me das miedo perro! —retó corriendo tras la miko.
—Así que corriste a esconderte ¡cobarde!
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Origen y destino
RomantizmLo que debe ser será, es lo que se conoce como destino, así movamos todas las fichas, inevitablemente ocurrirá, pero ¿Cuál es el mío?, después de todo lo que pasamos, después de estar separados, regrese por él, intente y trate de demostrarlo, o demo...