Anteriormente...
A la mañana siguiente los guardias amanecieron con mala cara. Apenas habían dormido por estar tan atentos.
– ¿Hacia dónde queda Marrakech? para volver con los dromedarios. – le preguntó Trolli a Ela.
– Hacia el oeste, usen la brújula.
– Ok
Todos terminaron de comer. Trolli comprobó que Mike estuviera bien, pero el menor se había puesto más crema al despertar, así que estaba muy bien.
– ¿Necesitas ayuda? – le preguntó Raptor a Sparta.
– ¡No!, puedo solo. – se subió de un salto.
– Tan ágil como en la cama. – susurró.
– ¡Raptor!
El dromedario pareció entender la molestia del menor y le escupió en toda la cara al mencionado.
– Mierda – maldijo intentando limpiarse. – que puto asco, mechero, controla a tu camello.
– Nop, eso te pasó por sucio.
Por un milagro, eso del 24 horas sin besos se había mantenido.
– Agh... – se limpió con el agua del oasis. – como nuevo. – se acercó a Sparta. – ¿beso?
– No
– ¡Estoy limpio!
– No hasta llegar al hotel y que te limpies con jabón.
El mayor frunció el ceño y fue a subirse a su camello.
Trolli fue indicando el camino con su brújula.Iban en fila india. Mayo tenía a Víctor al frente.
– ¡Vic!
– ¿Sí?
– Cuando Flex nos de el dinero... – en ese momento el peliazul recordó como se había hecho el tonto y se asustó al ver que había sido descubierto. – ¿Qué haremos?
– Lo que quieras, por mi lado no me importa demasiado.
– Ok... – pensaría en algo lindo.
Tras unas intensas horas de calor, Marrakech se veía en la lejanía.
– ¡Ay por dios que bueno, ya me estaba asando! – celebró Rius.
– Pollito asado, pollito frito y... pollito caliente...
– Jeje... – lo miró pícaramente y luego desvió la mirada con una pequeña sonrisa.
Más tarde, llegaron donde Kamal de nuevo.
– Aquí están los dromedarios. – dijo Ela.
– Y aquí está tu asquerosa arma... – Clarissa se la devolvió, con su guadaña en mano.
– Gracias
Se bajaron de ellos y también bajaron sus cosas.
– Hola Kamal. – Sparta fue a saludarlo mientras le entregaba el dromedario.
– Hola pequeño.
– Epa, ¿pequeño? – preguntó Raptor con una voz hostil. – y quita la mano de su hombro.
– Jaja, lo siento. – amarró al animal. – ¿Cómo te fue? – siguió hablando con el menor.
– Bien
– Deshidratarse y caerse del dromedario no es pasarla bien, Spartita. – recordó el reptil.
– ¿¡Te deshidrataste?!
– Mm, sí, nada grave.
– Te recomiendo que cuando vuelvas a tu hotel te des un buen baño de agua fría. Debes refrescar tu cuerpo, ya verás que se siente genial.
– Eso pensaba hacer.
– Y también deberías probar los batidos que hacen por aquí, tu boca los amará.
– ¿De verdad? debo probarlos.
– Podrías ir al jardín Majorelle, tiene unas plantas exóticas que seguro tus ojos encontrarán interesantes. De seguro tienes una piel algo delicada, hay un spa en el centro.
– Gracias por decirme, aunque no creo que alcance el tiempo antes de que nos vayamos.
– Hay un gimnasio en el que ofrecen una técnica para que se te vaya marcando más la cintura con el tiemp-
– Ya, Kamal, creo que es suficiente. – Raptor lo calló. – debemos irnos, Spartita.
– Ok, adiós Kamal. – tomó la delantera.
Se quedaron un momento a solas.
– ¿Qué fue todo eso?
– ¿Qué cosa?
– No te hagas el tonto. Las cosas que le dijiste a mi novio, era todo sobre su físico. No te fijes en eso... no tendrías por qué.
– Uy, pobrecito, no te da tanta atención.
– ¿¡Cómo te atreves...?!
– ¿Cuántos besos te dio hoy?
– ... – ni uno solo.
– Pobre hombre.
Sparta se les acercó con impaciencia.
– Raptorcito⁓, ya nos vamos⁓ – se colgó de su brazo de manera coqueta. – no quiero dejarte, apresúrate. – fue con los demás nuevamente.
– ¿Viste eso? – preguntó Raptor. – se llama amor. Toma esa puto.
El contrario solo hizo una mueca y observó como el grupo se iba.
ESTÁS LEYENDO
Reality show ~| los CoMPaS|~
FanfictionLos compas (que no se conocen), deciden entrar a un programa de televisión donde tienen que enfrentarse a distintos escenarios juntos. Tendrán distintos retos que tendrán que cumplir ya sea en grupos o en parejas. Cualquier parecido con esta histor...