Súper Detective Hanako

Capítulo 33: Pasando el rato en un callejón oscuro

13 de Agosto, 9:08 AM. Intersección de Sins Valley.

—Nunca creí que me llegaría a dar tanta felicidad la mera existencia de la deshidratación en los seres vivos, dejándolos incapaces de llorar eternamente.

Diciendo eso mientras se toca la garganta ligeramente, Kazuya suspira aliviado por nuestra supervivencia al asalto de lágrimas realizado por nuestra cliente.

—De verdad, con todo lo que llora esa mujer... Bien podría alimentar a todos los negros de África.

Luego de que Homura me compartiera su número de teléfono, así como invitarnos a los dos a cenar algún día, nos despedimos de ella y salimos de la oficina. Estamos recorriendo las calles de la ciudad, aún estando mojados por la hidrobomba de esa mujer.

Elevo la vista para observar el claro y hermoso cielo azul. Hoy es un día tranquilo y soleado, a pesar de que es el segundo aniversario de un terrorífico incidente que sacudió a todo el país.

—Habías dicho que lo primero que harás en tu extensa investigación será...

—...Inspeccionar el lugar en el que Naoki fue raptado: El callejón.

No hay un mejor punto de partida para esta re-investigación del secuestro del crimen de hace dos años.

De camino a aquí, me propuse examinar tres ubicaciones claves:

El sospechoso callejón oscuro, en donde un testigo presenció como el hijo de Homura era raptado ahí.

La academia en la que estudiaba Naoki, ya que tengo la intención de hablar con sus amigos al igual que con el alumno que contempló el crimen con sus ojos. En el caso de que dicha persona ya no estudie ahí, seguro que si pregunto por él podré localizarlo.

Y evidentemente, el último sitio se trata de la fábrica abandonada. El misterioso edificio en el que los secuestradores y Naoki desaparecieron inexplicablemente.

—Créeme que quiero ver esto de forma positiva, pero... Ni siquiera el inmenso cuerpo policial ha progresado con el caso en estos dos años. Siento que es i-imposible que podamos hallar la Verdad de e-este incidente...

En respuesta al pesimista juicio de mi hijo adoptivo, cierro un ojo y hago una mueca falsa de tristeza.

—Me duele que no creas en mí, querido Kazuya.

—N-No quise decir eso. Eres la persona en la que más confío, Hanako. Si alguien puede hacer un cambio significativo, sin duda eres t-t-t-t-t-t...

Tras percatarse de que me estaba dedicando unas bonitas y sinceras palabras sin pretenderlo, el pálido rostro de mi camarada adopta un fuerte rubor escarlata y su cabeza se inclina hacia abajo a una inhumana velocidad.

Enseñando una sonrisa repleta de alegría, le doy una palmadita en el hombro

—No necesitas decir más. Ya me has transmitido lo que sientes por mí.

—Eh... ¡M-M-M-Mira! ¡El callejón! Y-Ya hemos llegado...

Por su intento de borrar nuestra cariñosa interacción, mis ojos color cielo se posan sobre el espacio que funciona como separación para dos edificios.

Un camino totalmente vacío, estrecho y oscuro, aún con la iluminación del sol. Esta es la escena del crimen del secuestro de Naoki Ishikawa.

Iniciar Investigación - Calle sin Nombre, Callejón.