Capítulo 35: El periodista prodigioso

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Cerrando su boca, la capitana del club procede en agachar su alzada cabeza como señal de que su anécdota terminó.

Luego de un par de segundos, sus ojos lavanda recaen en mi cara teñida de admiración. Parpadeo varias veces antes de darle mi opinión general.

—W-Wow, no sé que me sorprende más: La extraordinaria labia y madurez de las que hacía gala ese chaval a tan corta edad... O el hecho de que acabas de citar a la perfección todo lo que te dijo.

Poca gente es capaz de formular las frases reflexivas que Naoki enunció en ese momento tan delicado y tenso, con una fluidez excelente. Tal parece que Homura y Fusajiro no exageraron al hablar bien de él... Se ha ganado todo mi respeto.

En respuesta a mi apreciación, Mitsuha se da unas palmadas en el pecho al compás de su carcajada pobremente contenida.

—Huhu... ¡Te hace falta recordar que quien está parada ante ti no es ni más ni menos que una futura estrella del cine! Si no fuera capaz de imitar las palabras que aún resuenan en mi mente por su inmenso valor... Tampoco podría interpretar hasta al personaje más plano del mundo.

—Ni siquiera podrías interpretar a los protagonistas del 95% de isekais... Lo entiendo. Con tu dotes actorales y la importancia sentimental de ese recuerdo, es coherente que hayas podido relatarlo como si fueras la narradora de un Interludio de la historia principal.

Sintiendo que acabo de romper un concepto similar a una pared imaginaria que está al frente del escenario de este club, me percato de la mirada cargada de orgullo que me está dedicando un sonriente Kazuya.

—Hanako, perdón por la comparación... Pero en cuanto a subirle el ánimo a las personas... Pienso que Naoki estaba al mismo nivel que tú.

Ni siquiera yo, con mi ego sobrevolando la estratosfera, puedo negar eso. Es más, incluso estoy dudando de si él era mejor que yo en ese aspecto.

La joven del vestido extravagante se asiente a sí misma, para a continuación separar sus rojizos labios.

—Después de eso, él me tendió la mano y se ofreció para ayudarme en mi transición. Empezamos a interactuar de vez en cuando por eso, pero todo escaló hasta que comenzamos a pasar el rato juntos diariamente solo almorzando o haciendo tonterías simples como pasear en el patio trasero de la academia. Antes de que me diera cuenta, ya nos habíamos convertido en amigos muy cercanos. Y junto a eso, poco a poco descubrí varias cosas...

Los delgados dedos de la chica se deslizan por su cabello y acarician sus coletas coloridas.

—...Como mi estilo de peinado favorito...

Nos muestra sus uñas pintadas y resalta el rímel de sus pestañas.

—...El maquillaje que me gusta...

Su vestido ondea galantemente por su inesperado giro de 360 grados.

—...Y la ropa que me encanta.

Así que, antes de conocer a Naoki, ella no tenía el cabello recogido en coletas, ni usaba maquillaje o prendas llamativas. Me es un poco difícil imaginarme a su versión del pasado... Y seguramente algo similar les pasó a los otros miembros del club, cuando presenciaron a la nueva Mitsuha. Si se hiciera una comparación literal, muchos creerían que son personas distintas.

—Gracias a sus constantes motivaciones, me esforcé como loca en arreglar la mayoría de mis defectos. Me puse alarmas para acordarme y me obligaba a bañarme cada día, al igual que...

Se mete un dedo en cada costado de su boca y los estira a un lado para que se vea mejor su dentadura.

—...Cepillar mis dientes a diario, para cambiar su tonalidad amarilla a un blanco tan puro como la nieve...

Súper Detective HanakoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora