❝No sé quién seas o por qué demonios estás leyendo esto, pero como soy una buena persona, te daré un consejo: si algún día te encuentras con una moneda extraña en cualquier lado, déjala ahí, solo va a traerte problemas; te meterá dentro de un traje...
❝Ellos nos disparan, pero nosotros somos a pruebade balas, y sabes que conmigo siempre serás tú mismo. En la oscuridad tus ojosson tan verdes, y sé que contigo siempre seré yo misma.❞
𓂅Taylor Swift
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Sonrió una vez más como una tonta. Llevaban unas semanas saliendo y todo parecía ir bien. Contra todo pronóstico, SuJung había quedado encantada e incluso les shippeaba con creces, ayudándole cada vez que metía la pata, como la vez que quiso molestar a HoSeok y se apareció en la universidad con una de sus sudaderas oscuras, cosas que hizo que ChangKyun le preguntase por qué llevaba una sudadera de hombre y SuJung había mentido diciendo que era suya y se la había prestado a su mejor amiga. YeRim no podía agradecerle lo suficiente.
—Hacía mucho que no te veía así de feliz. —le dijo su amiga, cosa que hizo a YeRim ruborizarse y observar de reojo a su novio trabajar concentrado en la cocina, otro talento suyo que había descubierto y que le había sorprendido en demasía, quizás porque ella no podía cocinar ni para salvar su propia vida—No sabes lo mucho que me alegra que él haya llegado a tu vida. —SuJung hizo una pausa, y comenzó a hablar más bajito—¿Has hablado con él?
Negó. Aun no le decía que sabía, no estaba lista para tener esa conversación, tenía miedo de que las cosas cambiasen o que todo terminara en ese momento. Se encogió ante la mirada juzgante que le dio SuJung y mantuvo su cabeza centrada en su tarea para la clase del día siguiente. Escuchó a su amiga irse a su habitación a buscar algo, y cuando menos se lo esperó fue tomada por la cintura y alzada en el aire, haciendo que gritara y pataleara. Escuchó las carcajadas armoniosas de HoSeok en su oído mientras la depositaba en el suelo y le abrazaba por la espalda, encerrándole en sus fuertes brazos. YeRim se dejó hacer, su corazón latiendo a mil.
—He terminado la cena. —le dijo él, dándole un beso en la mejilla—Todo bien sano y nutritivo para mí y SuJung, y pizza para la chica más bonita del mundo.
—Supongo que el destino me dio un novio italiano para complacer mis caprichos. —respondió.
—Sono felice di poterti servire, amore. —le dijo afianzando el abrazo—Se posso renderti felice, allora ne vale la pena. (1)
Entonces se escucharon los gritos desde la habitación de su mejor amiga, quien salió tacones en mano, vistiendo su mejor vestido estampado y una sonrisa neurótica en el rostro. —Chicos, los amo, pero voy a salir, ¡MinHyuk me consiguió una cena con mi novio! —saltó en el sitio—¡Voy a poder renovar mis muestras de cabello y polaroids cute para mi altar! —aplaudió en el sitio—¡Tengo que llamar a mi suegra, no se lo va a creer!
No habían pasado ni cinco minutos y SuJung se había marchado como un huracán, dejándoles solos. HoSeok tomó esa oportunidad para hacer una cena amena, donde conversaron sobre proyectos de clases y los libros que habían estado leyendo. De alguna forma terminaron en el apartamento de él, uno pequeño alejado de la universidad y de todo lo relacionado con sus amigos, un sitio tranquilo que le enfundaba de paz.
