Amor en el campo(#1)✔️

Bailamos?

Patricia llamó a don Francisco para decirle que el camión con su pedido ya iba en camino a su hacienda
—Lo preparé como siempre lo hacen

—si es así tendría que pagar lo mismo que pago cada mes

—si así es señor!!

—pensé que me iban a cobrar algo más

—no Don Francisco, no hay porqué hacer eso
Entonces dígame cómo lo hacemos.
¿Voy a su hacienda por el cheque o usted me deposita?

—yo le deposito así no tiene que venir hasta acá.

—perfecto
Cuando llegue el camión y chequen que todo está bien, me hablas  por favor

—claro que si hija...

—pues entonces hablamos Don Francisco, fue un placer hacer negocios con usted
Pase buena tarde

Al terminar de hablar con Francisco llega don José

—hola hija!!

Patricia colocando el teléfono—ahh papá justo iba a buscarte
Ya serré el trato con Don Francisco, hará el depósito del dinero cuando se cerciore de que todo está bien...

—no te preocupes confío en ti.

Patricia se sorprendió y sólo le salió decir—cuando el dinero se refleje en la cuenta te digo.
Me voy, tengo algo que hacer...

Salió de la casa con dirección al campo

Patricia entra a la oficina y Marcos la sorprende— hola mi amor!— sacando una rosa de su espalda y poniéndosela en frente

Patricia le presiona los buche — ¡como eres!

Marcos la abraza — que rico hueles, patricia sonríe— ven Siéntate... gracias

—¿ya hablaste con Don Francisco?

—Si!! Ya, Quedo de depositarme cuando revise el envío.

—ahh está bien.

—¿ qué tal estás? Está hermosa mi rosa!!

—bien mi amor, busque la rosa que mas sé parecía a ti

— tan bello !!

—solo bello...

—sii!
Bueno un chin —...por encima del escritorio lo agarra por el poloche lo besa para luego dar la vuelta y sentársele en las piernas, el la besa y le acaricia el pelo —todavía no me creo que tú estés conmigo.

—¿por qué ?

Marcos sube el tono—¿qué por qué? Y todavía preguntas
No eras nada fácil
Cada que se te antojaba me tratabas de la patada, así por nada

— te voy a confesar algo!
Eso era que ya me gustabas y no encontraba cómo decírtelo... qué vergüenza.

—¿a lo mejor crees que yo no me daba cuenta?

—no lo sé

—¿por qué crees que te insistí hasta el cansancio?

—si eso es cierto...
¡que rogón! Pero Gracias a eso hoy estamos juntos.

—y te volvería a rogar mil veces

—ven y dame un beso
Luego te vas o no me dejarás trabajar. Y tengo que terminar temprano, porque tengo una cita hoy con el amor de mi vida a las 7