24.- Miedo

371 41 2
                                    

-Sakura.- escucho a Sasuke decir, como si con su voz pudiera volver al mundo real.

Ah, me había quedado pegada viendo sus irresistibles labios. ¡Shannaro! Malditas hormonas.

-¿Eh? Ah, lo siento Sasuke, me quedé pensando un poco.- le dije, manoteando al aire para así restarle importancia a la situación, además de que ayudaba a bajar el sonrojo de mis mejillas.

-Sí, ya lo noté.- dice Sasuke.- Bueno, vamos antes de que se nos haga más tarde de lo que ya es, ya que te veo tan desesperada por llegar...

No le contesto, simplemente lo sigo mientras el azabache comienza a subir las escaleras.

¿Yo? ¿Desesperada? Él no parece ni siquiera interesado en llegar a estas horas a la casa de Ino, en mi compañía y sin haber avisado si quiera que llegaríamos tan tarde. A veces no entiendo qué es lo que piensa Sasuke, siempre lo veo tan seguro de sus acciones, y tan sumido en su propio mundo que me provoca curiosidad.

Y en esta situación, no lo veo para nada preocupado.

El camino hacia el departamento fue callado, ninguno de los dos dijo algo y yo no pensaba decir alguna palabra; estaba demasiado concentrada en qué le íbamos a decir a Ino.

"Le diremos la verdad, ¿no? Que salimos a la feria y que pasé a saludar a Suigetsu"

Las palabras de Sasuke llegaron como relámpago a mi cabeza. Es cierto, sólo eso hicimos...no es nada para sospechar...

Sasuke parecía relajado, sin embargo yo seguía sintiéndome culpable. Subimos por las escaleras hasta el tercer piso y llegamos por fin al departamento.

Abrí la puerta con el corazón palpitante de desazón y visualicé por un momento cómo debía ser el mundo.

Sai se encontraba con Ino y ambos miraron al instante hacia donde Sasuke y yo, la expresión de cada uno era distinta, la de Ino era un rostro inquieto, preocupado, sin duda; la de Sai estaba tranquila, serena. Me pregunté cuál era la mía.

-¡Oh, allí están!- exclamó la rubia y corrió a abrazarnos a Sasuke y a mí.

Me quedé quieta, confundida.

-Frente, ¿por qué no te llevaste tu celular?- me dijo.- Sasuke, ¿por qué no respondías el tuyo?- inquirió al interpelado.

Más que una amiga que se sintiera engañada o especulando alguna artimaña parecía madre preocupada como cuando sus hijos no llegan a casa y pasa de la media noche.

Me sentí más culpable que antes.

-Lo siento, Ino.- dijo Sasuke.- Llevé a Sakura a la feria. ¿recuerdas que me contaste que jamás había ido a una? Quise llevarla para que al menos conociera una.- me miró y me desordenó el cabello con su mano; un gesto que te dan los amigos.- Y además, pasé a saludar al cara de pez, hoy es su cumpleaños. Te mandó saludos, por cierto.- se acercó a Ino y besó su frente.

Capté la escena desde muy cerca y mi corazón se encogió.

Ino se tranquilizó.

-Pero debiste al menos avisarme, amor.- musitó y se alzó en puntillas para besar a Sasuke en los labios.

Ya no pude mirar más, bajé la cabeza y me retiré con rapidez hasta llegar a donde Sai estaba quien se encontraba también con la mirada gacha. Esa escena le lastimaba tanto como a mí.

-Pero, ¿te divertiste, Sakura?- me preguntó Ino y, con una sonrisa sincera cuando se hubo desocupado de los labios de su novio.

-Seguro, aunque casi muero arriba de una montaña.- dije aparentando que todo estaba bien.

SasuSaku |Manual de lo prohibido|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora