Dos Almas

•17•

La boda había dado inicio me encontraba sentada entre Rose y Emmett, Bella caminaba tomada del brazo de su padre para poder llegar hasta el altar, para sorpresa mía Edward se veía bien, Estaba prestando atención dije estaba porque mi cuerpo estaba ahí pero mi mente no.

En mi mente solo podía cantar Todos somos Agripinos, Todos somos Agripinos.

La canción hubiera seguido pero al momento del primer aplauso me levanté para aplaudir junto a todos, sonreí en dirección a Bella, se veía tan feliz y tan radiante que solo esperaba que mi partida no afectará tanto, deje ese pensamiento en lo más profundo de mi mente y me dedique a disfrutar la fiesta.

La pista de baile no tardó en ser ocupada por todos, Alice y Jasper daban un espectáculo, Rosalie bailaba con Emmett y a mi costado estaba el pequeño Seth al cuál tome de la mano y lo lleve a bailar , ambos disfrutábamos de el momento hasta que  el paro y con una sonrisa me dijo que no tardaba en lo que el se fue Ángela llegó a mi lado y seguimos bailando juntas.

Una canción lenta empezó y tome su cadera con ambas manos y ella tenía sus manos sobre mis hombros.

–Todo esta hermoso– hablo la castaña

–Alice lo organizo– dije mientras miraba todo.

–Cuando me case le pediré que organice mi boda.

–Ella estará encantada.

Pocos minutos después Alice dio el llamado para poder sentarnos a comer, la comida era exquisita a decir verdad todo tenía un sabor increíble, el pastel termino por ser uno de chocolate con fresas, era un deleite.

El sonido de una copa al ser golpeada por una cuchara y la voz de Emmett sonando por los parlantes pidiendo atención me hizo girar mi cabeza en su dirección y mirarlo con algo de pánico.

-¿Esta encendido?¿Me escuchan?– golpeó ligeramente con el dedo el micrófono– Hola ¡Quiero proponer un brindis por mis nuevas hermanas!¡Bella espero que hayas dormido bien estos dieciocho años porque no lo harás por un buen tiempo!– casi me atragantó con el pastel.

Tras el paso René la cuál canto una canción de cuna y mi cara de incredulidad se hizo presente, después paso Alice la cuál sermoneo a Bella para que ella dejara su desagrado por la moda y  a decir verdad no pude contener mi risa.

La siguiente persona en pasar fue Charlie.

–Se que Edward será buen marido– miro al susodicho– Lo se porque soy policía y se cosas, como perseguir a alguien por la eternidad y también se usar un arma.

Mi risa era incontrolable ante su cara de pánico, tiempo después paso Esme, ella se ve hermosa como esas actrices del cine mudo, extremadamente hermosa con su perfecto cabello color chocolate y esa sonrisa maternal.

–Quiero darles las gracias a René y a Charlie por traer a alguien tan importante a nuestras vidas.

Cuando ella bajo y tomo asiento junto a Carlisle fue mi turno se subir, al estar de pie frente a todos un pequeño malestar de pánico se apoderó de mí y cerré los ojos y con una pequeña risa por fin hablé.

–Solo quiero decirles que me los estoy imaginando a todos con una botarga en forma de plátano y es porque tengo pánico escénico– una carcajada por parte de Emmett me incentivo a seguir– Muy bien, Bella te conozco hace relativamente poco tiempo pero te conozco lo suficiente para decir que eres Co mi hermana, te conocí en uno de tus peores momentos pero se que eres fuerte, te quiero mucho y le agradezco a la vida que te cruzaras en mi camino, porque gracias a eso formamos una linda amistad, Me hubiera gustado ser tu mamá pero Charlie no quiso y te go dos novios que me están viendo feo por el comentario que acabo de hacer– sonreí en dirección a Rose y Emmett, pero la risa de Bella se escuchaba bastante alto– Es broma lo que dije, gracias a ti conocí a los que ahora forman parte de mi vida, eres de las mejores personas que conozco y te adoro mucho, se que tienen un futuro brillante y que tú y yo seremos inseparables... Te amo mucho Bella.

Cuando por fin regresé a mi lugar la fiesta siguió su curso y después la despedida para la pareja, la cuál partió a su luna de miel, por fin pude conocer a los Delani y son personas maravillosas Eleazar me miro un poco preocupado pero con un resto de cabeza le hice saber que no dijera nada, según lo que me había platicado Jasper el puede saber que clase de dones tiene la gente con solo verlos y me aterra que les diga algo sobre mi, con una sonrisa me aleje de ahí y camine en dirección a la mesa de dulces, tome unas gomitas y también unos chocolates, me encontraba comiendo cuando mi hermano apareció en mi campo de visión.

Se acercó con calma y se colocó a mi lado y con suavidad tomo mi mano y me dedico una mirada llena de comprensión, supongo que Magnus ya le contó lo que yo ya sabía.

–¿Ya lo sabes?

–Asi es, estaré contigo en todo y se que no les quieres decir digo es por la conexión de hermanos que tenemos lo se y también porque soy el mayor.

–Solo eres mayor por unos minutos– reí por su comentario– Tengo demasiada hambre a pesar de que comí.

–Siempre has comido demasiado– me pico las costillas– Iré con Magnus y deberías ir a la casa ya ni parece que vives con nosotros.

–Jurame que no han profanado mi cama y regreso– mi hermano giro sobre sus talones y básicamente corrió lejos de mi.

Cuando la fiesta se dio por terminado los chicos se pusieron a limpiar todo, yo camine en dirección a la habitación de Rosalie, los demás iban a ir a cazar, Rosalie y Emmett ya lo habían hecho yo mientras tanto me dedique a quitar el maquillaje de mi rostro y también me deshice del peinado, el sonido de la puerta al ser abierta me llamo la atención era Rosalie.

–Hola– dijo con una sonrisa.

–Hola– no se porque hoy la veía aún más hermosa de lo que ya es, con una seguridad impresionante tome su rostro con mis manos y dejé un beso en sus labios.

Por alguna extraña razón este beso se sentía diferente, más necesitado, con mis manos deje su cabello  libre del peinado, y con sus finas manos bajo el cierre de mi vestido para dejarlo caer, mi respiración era agitada, y también la de ella apesar de que no necesitará respirar, estábamos tan inmersas en este momento que ni siquiera notamos la presencia de Emmett en la puerta, cuando por fin cerró la puerta y puso el seguro todo se descontroló.

Las caricias iban y venían y la ropa empezó a estorbar, nos fundimos entre caricias, besos y suspiros, por una noche fuimos solo uno.

Y así la cuenta regresiva comenzó....

Creo que es buen momento para desaparecer por unos días jajaja.

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