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-Mañana pasaré a buscarte para hacer las entregas.- le avise a Jake.

Ya habíamos salido de clases el se dirigía a su auto pero por suerte pude avisarle antes de que se fuera.

-¿Entregas?.- preguntó mi amiga Lucy a mi lado.

Mierda.

-Ehh si, mi abuela está vendiendo unos productos con la madre de Jake y nos pidieron que hiciéramos las entregas de esos productos mañana.- odiaba mentirle pero no quería meterla en esto también.

-¿Ah si? ¿qué clase de productos?.- preguntó ella.

Mire a Jake para que me ayudara.

-Creo que para la cara y el cabello, algo así, no estoy pendiente de eso.- dijo él normal.

Yo asentí mirándola.

Ella asintió no muy convencida pero no dijo nada.

-Creí que iríamos en mi auto.- dijo el chico frente a mi.

-Cambio de planes, luego te diré todo, pasaré por ti a las cinco de la tarde, no me hagas esperar.- el asintió y yo seguí mi camino con mi amiga.

-¿Vendrás a casa?.- pregunté en la salida.

-No, mamá ya viene por mi, si quieres puedo ir el martes ¿Estarás ocupada?.-

-No, no estaré ocupada, puedes ir.- dije.

Ella asintió.

-Oye, usa protección ¿si? todavía te faltan algunos años de estudio y se te hará difícil si tienes un bebé.- dijo ella susurrando.

La mire confundida

-¿De que hablas?.-

-De Jake y tú, se que no se verán para hacer entregas.-

-Eres una pervertida, claro que si iremos a hacer entregas, te lo juro.- dije riendo.

-Voy a fingir que te creo.- en ese momento su madre llego.- Te veo luego y recuerda la protección, si es pastilla mejor o si quieren usar el condon y la pastilla pues mejor.-dijo ella riendo y subiendo al auto de su madre.

Yo reí por sus cosas. Eso no pasará con Jake.

Espero...

¿Por que ahora tengo ganas de besarlo? ¿Por que muerda estoy pensando en besar a Jake?.

Saque todo pensamiento impuro de mi mente y me concentré en lo que estoy haciendo.

Mi abuelo saldrá tarde hoy así que tendré que ir caminado, pude haberle dicho a Jake que me llevara a casa.

Puta mierda, odio caminar.

Salí de la escuela y emprendí camino a casa.

El día estaba tranquilo y las calles un poco vacías, algo raro en esta parte de la ciudad.

Para llegar más rápido tome un atajo pasando por medio de una calle que parecía abandonada.

Caminé unos pasos más hasta que dos chicos un poco mayores que yo me interrumpieron.

Uno era rubio de ojos negros y el otro tenía el cabello negro con ojos verdes.

-Miren a quien tenemos aquí.- dijo uno de ellos.

-Si es la famosa Genevitte.- dijo el otro.

-¿Quienes son? ¿que quieren?.- pregunté.

Trataba de mantener la calma.

Esto huele a problemas así que me mantuve alerta.

-Te queremos a ti.- dijo uno de ellos acercándose a mi.

Prometo Cuidarte Donde viven las historias. Descúbrelo ahora