Prometo Cuidarte

~12~

GENEVITTE

Me encontraba en mi casillero buscando algunos libros para mis primeras clases de la mañana.

Sentí el celular prepago vibrar en mi bolsillo del uniforme.

Lo saque para contestar la llamada, ya tenia claro quien era, solo una persona tenía este número.

-¿Que quieres?.- pregunté al contestar.

-No me hables así culi cagada.- dijo Eduard

Rodee los ojos.

-Te llevaré el dinero cuando salga de la escuela.- dije ya sabiendo que me iba a pedir.

-¿A qué hora sales.?- pregunto él.

-A las tres.-

-¿No puedes traérmelo antes?.-

-No, no puedo.-

-Sal antes.-

-Que no puedo hacer eso Eduard, si quieres tu dinero antes ven tu por el.- dije harta.

-Esta bien, iré por el ahora, cuando llegue te enviaré un mensaje.-

-ok.- dije y colgué la llamada.

Vi la mochila que tenía el dinero de la entrega de ayer. No pensaba traerla aquí pero lo hice.

Tome la mochila y cerré mi casillero.

Jake me trajo hoy a la escuela, mi abuelo tenía una sita con el médico y dijo que Jake era el único que vivía cerca de nosotros y que confiaba en él.

Ay abuelo, si supieras que me ha amenazado con decirte que me expulses no dirías eso.

Recibí el mensaje de Eduard diciendo que ya había llegado.

Salí del colegio y caminé hasta el estacionamiento.

Caminé hasta su auto. Cuando estuve parada al lado de su puerta el bajo la ventana.

Le tendí la mochila, el la tomó y vió su contenido.

Metí las manos dentro de los bolsillos del uniforme.

Él comenzó a contar el dinero.

-¿No puedes hacer eso en otra parte?.- pregunté

-Quiero hacerlo aquí ¿Algún problema?.-

-No ninguno, si te vuelven a robar es problema tuyo.- dije y comencé a caminar de regreso al colegio.

Lo escuché tocar bocina y gritar mi nombre.

Rodee los ojos y volví al lado de su auto.

-¿Que?- dije.

-Tienes que hacer otra entrega.- dijo sin más.

Suspiré.

-¿Cuando?.- pregunté.

-el sábado, es en una fiesta clandestina, te enviaré la ubicación luego.-

Asentí con la cabeza.

-Esta bien ¿algo más?.-

-No eso es todo por ahora.- dijo, subió la ventana y salió del estacionamiento del colegio.

Yo por otro lado, camine hasta entrar.

-¿Quien era él?.- pregunto una voz a mis espaldas.

Al voltearme vi Jake.

-No se te escapa una.- dije.

-Siempre estoy vigilándote.-

-No necesito que lo hagas.-