EDSER

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EDA

Habia pasado dos meses, dos meses desde que el no esta, dos meses que para mi son una eternidad. Solo pienso en el, sueño con el, trabajo aun por el, lo busco.

Hace dos meses que no tengo nada, aunque Deniz me estuvo ayudando no encontré nada es como si la tierra se lo hubiera tragado sin importarle en lo mas minimo mi dolor.

Aydan me dice que el va a volver y yo también lo creo, el me lo prometio.

Ahora estoy llegando a la oficina con el premio por el proyecto del año que gane en nombre de Serkan, era su proyecto y no esta aquí para verlo, le hubiera encatando.

Apenas pase las puertas hacia las oficinas, me llenan de aplausos sacándome una pequeña sonrisa antes de sentir como las lagrimas empezaban a formarse en mis ojos.

—¡Muchas felicidades dada! Era obvio que ibas a ganar— me dijo Melo entusiasmada.

—¡Felicidades Eda!— dijo Piril con una tierna sonrisa.

—Es obvio que el año siguiente ganas como la mejor empresaria— me aseguro Ceren sacándome una corta risa.

Todas me felicitaban mientras yo trataba de mantener la sonrisa, hasta que mis ojos se posan en Engin que al igual que yo tenia los ojos llenos de lagrimas pero también una pequeña sonrisa.

—El estaria muy orgulloso Eda, le hubiera gustado mucho que lo ganaras— me dijo el antes de envolvernos e un abrazo.

Sus palabras me rompieron por completo, yo sabia lo mucho que le dolia haber perdido a su mejor amigo, a su hermano. A ambos nos dolia, Engin y yo ya desde antes nos llevábamos bien pero después del accidente el fue el primero que me ayudo cuando volvi a la empresa y no sabia que hacer con mi nueva posición como socia. Todos estábamos aun mas unidos después de lo que paso.

Después de las felicitaciones de todos fui hacia la sala de reuniones, la usaba como mi oficina ya que el la usaba de oficina, usaba su mismo asiento como si eso me hiciera sentirlo. Mire la foto que yo misma puse desde que vine a ocupar su lugar, no se porque pero justo hoy tengo mas ganas de llorar que llo normal aunque puede ser por el premio presiento que es por algo mas.

Media hora después llegaron los chicos para comenzar con la reunión. Estábamos hablando del nuevo proyecto que se avecinaba.

—Estoy segura de que a el le gustara— dije yo con una pequeña sonrisa.

—¿A quien te refieres cariño?— me pregunto Ceren.

—A Serkan— le dije como si fuera obvio, viendo como todos empezaban a mirarse y sabia porque lo hacían. —Yo se que el va a volver chicos, yo lo siento, además el me lo prometio y va a cumplir su promesa— les digo firme para que me crean pero se que no lo hacen. Para cuando termina la reunión todos se van hechandome una ultima mirada como temiendo de que me vuelva loca en cualquier momento.

Después de eso, pase a ver a Deniz para saber si tenia novedades pero solo me dijo que llamo a todos sus amigos y que ninguno de ellos encontró algo, en ningún hospital o comisaria, nadie sabia sobre Serkan Bolat. Pero no me iba a dar por vencida, no podia, no podia dejarme llevar por la idea de que el ya no este, esa no es una opción para mi.

Volvi a la oficina después de eso y segui trabajando hasta que sentí un horrible pinchazo en mi pecho y no se porque pero lo relacione enseguida con Serkan, trate de calmarme pero unos segundos después escuche el bullicio de gente afuera y cuando me asome... lo vi. Ahí estaba perfectamente peinado y vestido como siempre, como si nunca se hubiera ido. No podia sacarle la vista de encima y no se ni en que momento empece a caminar pero el era como un iman para mi, desvie un segundo la mirada cuando vi que el lo hizo para ver a Selin que asentia con la cabeza.

—Serkan...— inevitablemente mis ojos se llenaron de lagrimas, no podia con la emoción y tenia miedo de que se fuera asi que muy lentamente llegue hasta estar justo enfrente de el y levante mi mano con un poco de miedo hasta que toque su mejilla, su barba y solte un suspiro. Era real. De verdad estaba aquí conmigo, de verdad lo estaba tocando. Estaba tan concentrada en el pero de un momento a otro todo se puso negro.

Cuando me desperté solo estábamos el y yo en la oficina, lo abrace tan fuerte, y meti mi nariz en su cuello como antes solo para sentir su olor, amaba hacer eso y lo necesitaba cerca, necesitaba saer que era real... pero algo pasaba el no me respondia como yo pensaba que lo haría y fue hasta que lo mire, frente a frente que me di cuenta de que algo no iba bien.

—Señora Eda emm yo no se muy bien como explicar esto pero yo, no... no la recuerdo— me dijo el haciendo que quede en shock por unos segundos antes de que mi ceño se frunza.

—¿Cómo... como que no me recuerdas Serkan? ¿De que hablas?— le pregunte sin siquiera entender por completo lo que salía de su boca.

Me empezó a explicar que el no recordaba el ultimo año de su vida, que todo ese año, NUESTRO año se habia ido y no se si fue eso, el hecho de que me dijera señora o no se pero algo en mi se apago y... me cegué.

—¿SEÑORA? ¿SEÑORA? AMOR SERKAN, YO SOY TU AMOR. ¿DE QUE ME ESTAS HABLANDO? ¿RECUERDAS TODO MENOS A MI? ¿SOLO A MI SERKAN, ESO ES LO QUE ESTAS DICIENDO?— le grite tan fuerte, la rabia, desesperación, angustia, tristeza todo se me estaba juntando y no podia creer lo que escuchaba, estaba desesperada, tanto que mi corazón parecia despedazarse y aun asi latia como si se me iba a salir de mi pecho. Le dije que no se preocupara, le pedi que viéramos otros médicos, le dije que le recordaría cada uno de nuestros momentos, que comenzaríamos de nuevo pero lo peor que pude escuchar, lo que jamas esperaría de el, vino después cuando me dijo que estaba con Selin. Eso y su cara de indiferencia al decírmelo fue lo que termino por perderme y para cuando me di cuenta ya lo habia abofeteado como nunca antes lo habia hecho mientras las lagrimas no dejaban de correr por mi rostro.

No podia, el no podia volver a ponerme en esta posicion, no podia elegirla a ella, NO PODIA EL Y YO TAMPOCO. No podia creer que mientras yo lo buscaba el estaba con ella y que además yo habia sido borrada de su cabeza. Todo, todo lo que vivimos fue borrado como si fuera lo mas insignificante de su vida.

No aguante mucho mas la situacion y me largue dejándolo solo en la oficina.