EDSER

8

SERKAN

Selin y yo llegamos al complejo que mi madre me habia recomendado, y no habíamos dado muchos pasos cuando vi la verdadera razón de porque mi mama quería que vaya hasta allí. Eda Yildiz sentada enfrente de su prometido junto con su amiga y Ferit. Selin se molesto al verla ahí y yo no sabia que decir pero despues de una pequeña discusión decidimos quedarnos al fin y al cabo asi que saludando a los cuatro nos sentamos junto a ellos para desayunar.

No podia negar que desde el momento en que me senté mis ojos se pegaron a Eda, estaba hermosa esa mañana y se esforzaba mucho por esquivarme la mirada lo que hacia que yo responda automáticamente cada vez que ella hablaba.

Pero toda mi picardía desapareció en el momento en el que la vi tan concentrada sacando los bordes del pan, un fuerte dolor de cabeza me invadió y en ese momento me vi haciendo exactamente lo mismo a mi, dejándolos despues en el plato que tenia al lado. No se porque pero supe que estaba sacando los bordes para ella, un recuerdo eso era o creía que lo era. Pero tuve que disimular ya que Selin constantemente me miraba, eso y la irritante voz de Deniz que contaba lo mucho que viajo.

Después de eso Eda se fue seguida de Deniz y a ellos le siguieron los otros dos dejándonos a Selin y a mi solos, ella sugirió que fuéramos a su cabaña pero yo no quería asi que con el pretexto de un importante proyecto salí a caminar. Un rato despues me encontraba solo, Leyla me había llamado avisándome que uno de nuestros clientes quería hablar conmigo as que decidi llamarlo en ese momento.

Cuando ya estaba terminando la escuche a ella, venia burlándose de que era un adicto al trabajo y no se que mas, pero después se doblo el tobillo cuando quiso irse y me preocupe, ella se hacia la fuerte pero veía como le dolía asi que resoplando me acerque a cargarla.

Al dejarla, volví para encontrarme con Selin y nos fuimos a cenar, justo en nuestra mesa había un jarrón con flores y otra vez volvi a ver a esa mujer de espaldas, sabia que me gustaba, yo me acercaba y cerraba su hermoso vestido amarillo. No se si tenia razón pero sospechaba que era Eda. En eso Selin se dio cuenta de lo distraído que estaba y me pregunto si ya tenia planeado pedirle matrimonio y no podía mentirle en la cara asi que le dije que no, aunque no entre mas en detalle y la noche quedo un poco incomoda.

Un rato despues tuvimos un encuentro con Eda y sus amigos pero luego cada uno tomo su camino. Yo por mi parte volvi al salón no se muy bien porque pero habia vuelto y allí me encontré a Eda, habia ido a buscar un libro y no se porque le termine preguntando sobre nosotros. Ella se negaba a contarme pero cuando la convencí me termino contando una historia mitológica que sonaba mucho en mi cabeza asi que supuse que si formaba parte de un recuerdo nuestro.

Era la primera vez que hablábamos tan bien, sin discutir, yo la escuchaba y ella me contaba y había tanta paz en ese momento, estaba tranquilo, cómodo ahí con ella. Pero cuando llego el momento de despedirnos no pude, ella era tan preciosa que hasta parecía irreal, sus ojos me expresaban tanto como si me traspasaran todo el cuerpo, toda el alma.

Se corto la luz y ella intento irse en ese momento pero mi cuerpo mas rápido incluso que mi mente hizo que me levantara y sujetara fuerte su mano, fue tan instintivo para mi y sentí la necesidad de tenerla aun mas cerca. Asi que muy lento me acerque hasta quedar prácticamente pegado a ella, mi mano parecia tener vida propia, se movio pasando delicadamente por su brazo para llegar a su cabello, y mi cabeza dio mil vueltas, otra vez ese vestido amarillo aparecía frente a mi y yo hacia lo mismo que estaba haciendo en este preciso momento, inconscientemente lleve a su cabello hacia atrás y me acerque hasta su cuello para oler su aroma sintiendo como Eda se estremecía, y yo junto a ella. En ese momento ella se giro y otra vez mi mano se movía sola, como si conociera de memoria cada uno de los caminos que había que recorrer en el cuerpo de Eda, la tome de la cintura y contuve la respiración cuando sentí que ella apoyaba su mano sobre mi brazo. Era todo tan abrumador, tan intimo pero a la vez tan familiar que no podia dejarla escapar pero cuando con los ojos lagrimosos si recordaba entendí lo mucho que le dolía y como mi pecho se oprimió al ver ese dolor, asi que cuando no pude contestarle fue ella quien rompió nuestro momento y dejándome atrás se fue.

Me quede allí solo pensando en lo que había pasado, era innegable como mi cuerpo respondía ante Eda, como ella respondía ante mi. Era obvio que había por lo menos una muy fuerte atracción física entre nosotros.

Todos mis pensamientos fueron cortados en el momento en el que vi a Selin llegar con una maleta diciendo que se iba porque ella no podia pasar por esto una segunda vez. Por supuesto que no la dejaría irse sola, de noche y enojada conmigo asi que le dije que se quedara y al otro dia partimos juntos a la ciudad.

Llegue a la oficina esa misma mañana, habia tantas cosas por hacer y no se de donde saque que podia tomar agua con limón para calmarme y dejar atrás el estrés asi que llame a Leyla y le pedi que lo preparara por mi, en eso llego Eda y me pregunto si me sentía bien, cuando vio el agua y yo le explique para que funcionaba y creí ver una pequeña sonrisa cuando le contaba.

—¿Y quien te enseño sobre ello?— me pregunto.

—No lo se, seguro es de esas informaciones innecesarias que guarda el cerebro— le conteste notando como su rostro cambio de expresión.

Al poco tiempo se fue diciendo que tenia otras cosas que hacer y cuando quise saber a donde iba saco a relucir que ella era una socia y no tenia porque darme explicaciones, y he de admitir que me molesto la forma en la que me lo dijo pero no podia decirle nada.

En la tarde llame a Selin y le dije que pasara por mi departamento y ella empezó a hablar de la boda y no se cuantas cosas mas pero le dije que no tenia pensado que nos casáramos pronto, pero levantándome del sillón me acerque a mi saco a donde guardaba el anillo que había comprado para ella asi que cuando me volvi a sentar con su mirada ya fija en la caja, le extendi la mano con ella y le pedi que se lo pusiera.

Ella toda emocionada se lo puso pero yo sentía que algo estaba mal, algo no estaba bien en la situacion asi que con la excusa de que esta noche teníamos un evento importante en la empresa mostrando el nuevo proyecto de Eda, le pedi que volviera a su departamento para que se arreglase y yo luego la pasaría a buscar. Se puso contenta y se fue con la vista todo el rato en el anillo y yo cuando la vi salir lleve mi mano hasta el bolsillo de mi pantalón, donde habia dejado el anillo que en algún momento le di a Eda.

Lo tomo en mis manos y me senté un rato mas, observándolo. Era realmente hermoso y muy significativo si a Eda le gustaban tanto las flores. No podia creer que yo hubiera hecho algo asi por alguien. Pero tenerlo ahí conmigo de alguna forma me hacia sentir mejor.