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SERKAN

Encontrarme a Eda abrazada a Engin no era una imagen linda de ver desde mi lugar, aunque sabia que eran amigos algo dentro de mi se sentía inquieto por verla en los brazos de otro, pero la indiferencia monumental que tuvo conmigo fue mas dolorosa. 

Le pregunte a Engin que es lo que había pasado apenas Eda salió de la oficina, pero este se negó a hablar sabiendo que era muy malo para las mentiras, trate de insistir y recibí la misma respuesta así que volví a la sala de juntas donde Eda ya se encontraba mirando fijamente su computadora. 

Ella no me hablo y ni siquiera me miro las veces que le preguntaba algo, era como si me estuviera evitando a toda costa. Cuando Selin entro en la oficina a media mañana Eda trato de irse pero Selin empezó a hacer preguntas, según ella por su trabajo como encargada de relaciones publicas. 

—Me hubiera gustado que me avisaras que ibas a dar semejante noticia ayer en el evento— comenzó ella diciendo haciendo que la risa de Eda resuene por la sala. 

—No tengo nada que avisarte Selin, te encargas de las relaciones publicas de Art Life no de mi vida privada— le contesto ella haciendo a Selin enojar mientras yo observaba callado la interacción de ambas. 

—Tu eres una de las socias mayoritarias de la oficina, tu vida privada importa— rebatió Selin. 

—Lo se, y por eso mismo no quise seguir tu ejemplo, preferí no darle falsas esperanzas a otro hombre cuando aun tengo asuntos que resolver con el otro— contesto Eda con una sonrisa burlona en los labios mientras Selin cada vez estaba mas roja. 

—Como te atreves a hablar de Ferit y de mi sabiendo que el me dejo en pleno casamiento— reclamo ella enojada haciendo otra vez que Eda soltara una carcajada. 

—¿Enserio eres así de hipócrita? ¿Que esperabas Selin que se case contigo sabiendo que te arrastrabas por Serkan?— pregunto con una ceja elevada dejándome sorprendido mientras Selin hervía de furia, Eda se levanto elegantemente y agarrando sus cosas se acerco hacia donde se encontraba Selin. 

—¿Recuerdas aquella vez, cuando te dije que no me buscaras porque te iria peor? Estoy cansada Selin, así que no vuelvas a meterte en mi vida privada— le dije antes de irse sin siquiera echarme un vistazo. 

Después de esa pelea Selin seguía muy enfadada, y yo lo único que hacia era pensar en Eda. Selin me reclamo que hubiera dejado que hable así de ella y se fue enojada dejándome solo, intente llamar a Eda pero el contestador era mi única respuesta. 

Engin apareció por la sala unas horas después, su cara estaba rara sabia que me ocultaba algo y cuando le conté de la pelea que hubo entre Eda y Selin el simplemente hizo una mueca, no comento nada, ni dijo nada en absoluto. 

—¿Que es lo que sabes Engin?— le pregunte irritado. 

—Ya te dije que no puedo decírtelo— me contesto sin mirarme. 

—Engin eres mi amigo, si esta pasando algo con Eda— le dije y el resoplo. 

—Si pasa y tu lo sabes, ambos están perdiendo el tiempo. Ella se dio cuenta y termino su compromiso con Deniz pero tu Serkan... ¿que haces aun con Selin?— me pregunto irritado algo que no se veía nunca en el. 

—Bueno yo... ya te dije en mi memoria yo sigo con Selin, y ella me acompaño todo este tiempo— le conteste sin ni una pizca de convicción. 

—Bien entonces tienes que saber que también soy amigo de Eda, y esta vez ella me necesita mas— me respondió enojado. 

—¿De que hablas?— le pregunte serio pero empezando a preocuparme. 

—Ella me firmo un poder Serkan— me dijo haciéndome fruncir mi ceño. 

—¿Para que te firmo un poder?— le pregunte y el froto su rostro con sus manos. 

—Serkan, se va. Se va de Art Life y me deja a mi a cargo de sus acciones— me dijo dejándome de piedra. 

—¿Como que se va?— le pregunte exaltado. 

—Esta cansada, y la entiendo así que mejor déjala ir. Cásate con Selin y vuelve a ser el hombre sin sentimientos que eras antes de ella— me dijo levantándose de su silla. Hace años que no lo veía así de enojado, el se caracterizaba por sus chistes malos y su risa no por enojarse. 

—¿Engin porque te pones así? No es como si no me hubieras conocido antes de Eda— le dije confundido. 

—Si te conocía, conocía una versión de ti. El que guarda todos sus sentimientos, el leal, el que es buen amigo aunque no lo quiere demostrar. Pero con Eda lo demostrabas, te preocupabas, querías demostrar todo el amor que tenias para dar y en especial el que tenias para darle a ella. Un día me dijiste que Eda era esa mitad que te faltaba, me dijiste que era un ángel y que no sabias que habías hecho para merecerla. Llorabas Serkan, llorabas por ella y ahora la dejas irse así como así. Y si me enojo porque se muy bien al igual que tu y al igual que ella, que todavía la amas, que te enamoraste otra vez de ella y aun así sigues aquí— me dijo molesto dejándome sin palabras. No sabia que responder ante esa acusación, y tampoco podía pensar en una respuesta cuando lo único que rondaba en mi cabeza era la idea de Eda yéndose de mi vida, apartándome completamente de ella. 

Mi amigo, mi amigo de años estaba enojado conmigo y una parte de mi también lo estaba. No sabia que hacer, no sabia como actuar. Ella se iba, me dejaba, dejaba todo atrás, hasta a nuestros amigos con tal de alejarse de mi. 

Decidí ir a verla, cuando estacione mi auto fuera de su casa la llame pero no contesto así que le envié un mensaje avisando que estaba afuera y unos minutos después la vi salir con Sirius. Se veía hermosa, casual, cotidiana era otra faceta diferente pero igual de preciosa que la empresaria y arquitecta. 

—Que bueno que viniste— me dijo apenas llego a mi lado mientras yo me agachaba para saludar a Sirius. 

—Te fuiste y no volviste— le dije enderezándome, mirándola a los ojos. 

—Entenderás que tu novia entrando cada dos segundos en la oficina no es algo agradable para mi— me dijo seria. 

—Podría tomar una de las oficinas para que no te moleste— le dije queriendo sacarle información. 

—No hará falta, que bueno que viniste iba a pedirte que te quedes con Sirius de ahora en adelante— me dijo tendiéndome la correa. 

—El es feliz contigo, ahora quiere pasar mas tiempo con su mamá que conmigo— le dije en un intento de verla sonreír pero no lo logre. 

—Me voy Serkan, por eso necesito que lo cuides— me dijo como si nada dejándome helado. 

—¿Como que te vas? ¿A donde? ¿Cuanto tiempo?- le pregunte enojado. 

—Eso no te interesa, lo importante es que Sirius estará contigo cuidado y yo ya le di un poder a Engin para que sea mi representante en la oficina— me dijo totalmente seria como si estuviéramos en una especie de reunion. Mientras mi interior era un caos, me derrumbaba mas de lo que yo creía la idea de que se vaya. 

—No, no te puedes ir. No puedes dejar las cosas así como así, si es por Selin yo puedo hablar con ella, puedo...— dije intentando ver la solución pero ella rio sin gracia. 

—No lo hiciste antes, no hace falta que lo hagas ahora. Y en todo caso Selin es un daño colateral, mi mayor herida eres tu. Y necesito irme para sanarla— me dijo dejándome callado, otra vez estaba siendo demasiado directa conmigo y yo no sabia como actuar. —Te vas a ir con tu papá unos días eh, te portas bien— le dijo a Sirius agachándose para dejar un beso en su cabeza. Para después dirigirme una ultima mirada antes de intentar volver a la casa pero mi mano fue mas rápida, y la tome de su muñeca deteniéndola. 

—No te vayas— le susurre pero ella se soltó de mi agarre. 

—Ya no quiero quedarme Serkan— me dijo para después si, dejarme solo con nuestro hijo en la calle rogando en silencio que no se vaya. 







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