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EDA

Tenerlo así de cerca, verlo reírse otra vez hizo que mi corazón saltara de alegría. Ver como inconscientemente sabia cosas que ni el podía explicarse pero que para mi significaban tanto también hacia que mi corazón se estremeciera.
Pasamos hermosas horas en la florería pero cuando llego Deniz arruinando todo otra vez no pude evitar enojarme. Me estaba empezando a molestar darme cuenta de que Deniz se estaba tomando demasiadas atribuciones sobre nuestro compromiso falso. Se lo estaba tomando demasiado enserio, y eso sumado al choque de Selin y ver a Serkan llevársela me dejo de malas.

Cuando desperté al otro día quise ponerme uno de mis trajes favoritos, me encantaba como me quedaba y note que no era la única, la forma en la que Serkan me miraba y después la escena de celos que me hizo cuando me escucho hablar con Deniz de nuestra falsa luna de miel solo me traían en una nube, y si pudiera recordarme seria perfecto.

Un poco después de media tarde me fui a casa ya que Melo me dijo para salir a comer fuera, que hace mucho que no lo hacíamos cosa que era cierta así que acepte.
Me llevo a un restaurante hermoso de esos que no acostumbrabamos cuando estábamos juntas pero no le di mucha importancia hasta que me dijo que se iba al baño y no volvió en más de media hora, estaba apunto de ir a buscarla cuando me encontré con Serkan llegando a mi mesa, me pare quedando enfrentada a él, cuando le pregunte que estaba haciendo ahí su única respuesta fue atraerme hacia él con su mano en mi cintura provocando que se me erige la piel, pero cuando sentí sus labios contra los míos, cuando sentí como mordía mi labio pidiéndome más no pude negarme me entregue completamente a él y a lo que sea que estaba haciendo ahí.
Cuando nos separamos, solo llego a mi mente la idea de que había recordado pero como ya era costumbre estaba equivocada y su respuesta solo hizo que quisiera abofetearlo pero no quería hacer un escándalo, así que mejor decidí irme.

El me siguió y justo cuando quiso seguir hablando sonaron nuestros teléfonos, mi tía y su madre estaban en la comisaria.
Después de un pequeño dialogo con ellas yo ni siquiera me gire a verlo y me dirigi a mi auto para irme, como pude ser tan estúpida le correspondi el beso porque era lo que más deseaba y porque pensé que esta pesadilla había acabado pero no paso... otra vez.

Cuando llegamos a la comisaria Melo y Engin estaban ahí pero no tenia ganas de ver a Serkan, estaba demasiado enfadada así que cuando dejaron que mi tía se vaya salí de inmediato. Las 3 llegamos a casa y después de hablar un poco nos fuimos cada una a su habitación. 

Al otro día me levante más cansada de lo normal, no podía más con esta situación, Serkan parecía no querer recordar y lo de Deniz se me estaba yendo de las manos. Así que después de un paseo decidí llamarlo y avisarle a Deniz que no quería seguir más con ese juego, no quería y no podía, él intento disuadirme pero yo no podía más, estaba tan cansada, de repente todo el peso de lo que paso, de lo que yo hice, de mis esperanzas y expectativas, de mis sueños estaban todas sobre mi espalda y ya no podía soportar el peso.

Cuando llegue a la oficina no tenia ni ganas de pelear con Selin así que me puse a trabajar, hasta que escuche a mi socio hablar del nuevo cliente que teníamos, habíamos programado una reunión con el hoy.
Cuando esta se llevo a cabo el explico lo que quería lograr con su reciente restaurante y la idea de un desfile de modas, pero todos se sorprendieron cuando el me miro y me propuso que yo desfilara con mi prometido. No sabia muy bien que contestar pero desde la distancia en la que me encontraba podía ver los celos de Serkan emanar, la rabia lo carcomia y solo por eso acepte, aun sin  saber como excusar el hecho de que ya no tenia a mi prometido falso.

En todo el día Serkan estuvo muy raro, inclusive diría que trataba de provocarme abiertamente pero como ese juego se juega de a dos no le puse las cosas fáciles, tanto así que por momentos se calmaba y me dejaba en paz.

Al otro día, tuve que ir temprano a probarme los vestidos y Melo me había convencido de que llame a Deniz, de que un día más en el compromiso falso no seria nada. Así que fuimos juntos y después me fui sola a la oficina encontrándome con Serkan ya trabajando.
Casi se atraganta el pobre cuando le comente lo que la diseñadora me dijo, sobre hablar de vestidos de novia. Era una conversación  real que había pasado y ella no sabia que era solo un juego así que lo deje pasar pero la reacción de Serkan valía la pena en ese momento.

Después de eso el decidió irse a boxear y como no tenia nada más que hacer, y como el antiguo Serkan alguna vez me invito a boxear con él no se me ocurrió mejor idea que seguirlo. Por suerte había ido a un gimnasio que ambos conociamos, estaba tan concentrado que ni me vio llegar.

Quise reírme cuando me propuso empezar despacio como si yo no supiera boxear, pero se llevo una sorpresa cuando le devolvía los golpes cada vez con más fuerza, con más rabia retenida. Eso sumado al hecho de escucharlo parlotear, sobre Deniz y sobre mi y sobre no se que tantas cosas más, no me medi cuando me subí a su espalda y empece a pegarle con todo lo que tenia hasta que el no se como hizo pero logro tirarme al suelo, quedando él arriba mio y atrapando mis manos con las suyas justo a los lados de mi cabeza.
No puedo negar que la situación me  excito, y vi que a él también le afectaba, cada vez nuestras respiraciones eran más pesadas, y cada vez sus labios estaban más cerca de los míos.
Pero por suerte recobramos el sentido, no estábamos solos así que se levanto ayudándome a mi en el proceso. Nos quedamos ahí sentados cara a cara casi pegados.

—¿De verdad quieres casarte con Deniz?— su pregunta me dejo helada, yo quería cancelar mi plan pero no sabia muy bien que contestar en ese momento. Pero por primera vez en mucho tiempo quise ser un poco sincera y no jugar.

—La verdad es que últimamente estuve pensando mucho en eso, y no lo se...— le respondi.

—¿No estas segura de casarte con el?— me pregunto con un toque de sorpresa. Era como si quisiera escucharlo pero a la vez le impactaba que se lo confesara.

—No estoy segura de si te olvide- le dije mirandolo a los ojos.

—Pensé que Deniz era mejor que yo...—me dijo haciendo que mi comisura se levantara en una pequeña sonrisa.

—Como sea que haya sido él antes, ahora o como sea que hayas sido tu... eso no quita el hecho de que te ame Serkan, de que quise formar una vida, un hogar y una familia contigo— le dije suavemente mientras lo veia procesar mis palabras.

—Entonces... si no estabas segura si me habías olvidado ¿porque aceptaste la propuesta?— estaba demasiado curioso hoy, me gustaba que se preocupara al menos por saber sobre mi.

—Porque desde el día en el que desapareciste me encerré en mi cuarto sin comer, sin dormir solo pensando en ti, hasta que él apareció y logro sacarme. No es una respuesta muy convincente pero en ese momento el que iba a ser mi esposo, el padre de mis hijos, al que le había estado llorando por dos meses, apareció como si nada agarrando la mano de otra mujer... y parecía lo correcto que yo también dejara de sufrir, que intentará ser feliz— él no pudo aguantarme la mirada sin que sus ojos se llenaran de lagrimas. —Ademas Serkan, puedes engañarte tu, puedes engañar a Selin e incluso tal vez a tus amigos, pero no a mi. No puedes decirme que justo segundos después de que te besara le pediste matrimonio a Selin porque la amabas, sino más bien se lo pediste porque tuviste miedo— le asegure.

El no pudo decirme nada, simplemente se quedo ahí y yo ya no podía quedarme así que me levante sintiéndome por primera vez más liviana y me fui.

El evento era en unas horas y tenia que prepararme.



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