Diario de una bisexual®

La reunión.

No llevo la cuenta de cuantas personas a agregado Dulce a su Facebook. Ya terminó la temporada de SAO y esta esperando muy impacientemente que salga la otra.

El maestro nos ha dejado otra exposición. Pero en esta ocasión es individual, así que Dulce y yo nos estamos turnando la computadora.

Ahora que observo detenidamente a Dulce (de nuevo) me doy cuenta de lo realmente guapa que es. No sé la razón por la cual no sube fotos suyas, aunque, bueno, Dulce tiene el corazón más humilde que yo haya visto en mi vida.

En fin.

Todos estamos realmente impactados con la cantidad de gente que ha estado agregando por internet. Algunos son de otros países y les habla muy bien, cambió su nombre de Facebook por uno japonés y está practicando el idioma también. Ya sonríe y no he visto marcas en sus brazos si es que se hace daño. Ella esta realmente muy feliz.

Y eso es bueno, definitivamente lo es.

Ella no deja de repetirme que le cambié la vida. Que si no le hubiese enseñado el anime probablemente sería la misma de antes. Que está totalmente agradecida conmigo. Se siente bien que alguien que quieres te diga eso, por alguna razón el que Dulce piense eso de mí me hace sentir importante y es la mejor sensación del mundo.

Priscila también me ha agradecido aquello, el gran cambio que hice en Dulce, porque era prácticamente imposible hacer cambiar a Dulce de opinión, pero yo ni siquiera me esforcé demasiado.

Ana (es la prima de Ricardo, le habla muy bien a Dulce) me ha dicho que sus calificaciones han subido igual. Algo me dice que voy a sobreproteger a Dul.

En unos minutos vamos a pasar a exponer y ella está nerviosa, pero ya no por lo que suceda en su vida, sino por como se verá frente al maestro.

Para ella, las cosas vuelven a estar bien.

***

El cerebro se me está secando.

La maestra de Estatal esta explicando las temáticas del nuevo proyecto que nos dejara a cargo.

Vamos a hacer una especie de revista ambiental extensa y de mínimo 15 hojas, no páginas, hojas.

Tenemos que incluir diversos temas que tengan que ver con el ambiente, y Lizbeth, Atziri, Ricardo y yo ya nos estamos poniendo de acuerdo, aunque Ricardo no deja hablar a Lizbeth porque ella quiere tomar el control de los temas, según él.

Como sólo tenemos una hora, hemos decidido juntarnos en alguna casa para terminar la revista.

—Lizbeth, está decido, vamos a ir a tu casa. —Dice Ricardo con un tono de voz mas grave que nos hizo reír a Atziri y a mi.

—Ay, ¿Por qué a la mía? Yo no pinches quiero.

—Uno, la ultima vez que fuimos a casa de Atziri, Valeria se perdió y a mi me regañaron por terminar tarde el trabajo—Tomo un pequeño respiro—, dos, mi casa no está disponible porque mis primas también están ahí, y tres, nadie sabe llegar a casa de Valeria. Así que no queda de otra que tu casa.

Lizbeth se la pensó un momento. Y al final con algo de enojo y desagrado aceptó.

—Bien, pero si va a ser en mi casa, vamos a tener que ir todos.

Celebramos por ello. Eric ya no forma parte de nuestro equipo por el simple hecho de que es irresponsable. Un día a nos toco exponer sobre diferentes tipos de contaminación y se enojó porque pusieron "Erick" en vez de Eric. Tremendo rayón que le puso a la K haciendo a Lizbeth enojar. Afortunadamente yo no estaba en aquel equipo.