Capítulo 7: Cazador

75 4 0
                                    

- Oh pero que gran honor que el mismísimo Rey Dragón nos haya venido a buscar en persona – dijo el que estaba sentado en la silla del caballo mientras abría los brazos

- Déjate de juegos – dijo Natsu con una cara demasiado seria, pero tratando de actuar tranquilo – ¿Qué es lo que quieres realmente?

- Creo que eso está más claro que el agua ¿no? Lo que queremos, no, lo que mi líder quiere es la llave que tienes para abrir los demás continentes – poniendo una cara sombría – Supongo que sabes a lo que se refiere ¿verdad? ¿Qué le pasa? Natsu-sama – dijo con cara tonta – ¿A caso tiene miedo de morir? ¿Es eso? – pregunto con una sonrisa

- Lo que me da muchas cosas en que pensar no es mi muerte – mirándolo – Sino, ¿Por qué mandar a un segundo al mando por mí? ¿Tan poca cosa me considera que mandan a un perro y no viene él por su cuenta? Así no me apetece dar mi vida para ustedes idiotas – dijo sonriendo

- Ya veo – dijo algo decepcionado – Supongo que es usted quien me menosprecia ¿no? Natsu-sama – dijo mientras su cara de odio y sed de sangre se veía – ¡¡NO ME JODAS CON ESAS COSAS!!

- Aquí esta – dijo mirando como se le resaltaban las venas de la cara – Esa es la verdadera forma de ser del consejero del líder de los Vampire Slayer, Edward Deuterios, el Vampire Slayer de la Ira – pensando – (Supongo que todo se acabó ahora para mi) – sonriendo – (Happy cuida mucho a las personas del gremio en mi ausencia, chicas, chicos, amigos, cuídense mucho y pase lo que pase... Fairy Tail siempre será el más poderoso de todos) ...

- ¡¡¿¿QUÉ ESPERAN MIERDAS??!! ¡¡¡ATAQUEEEEN!!!

Varios de los Vampire Slayer se dejaron ir contra Natsu sin pensarlos dos veces, varios elementos se pudieron ver de diferentes colores con gran fuerza, Natsu movió los ojos rápidamente hacia todos lados como analizando el patrón de ataque de los demás sujetos, en cuestión de minutos solo se vieron explosiones, tan increíbles que sacudían el campo, pero por alguna razón todos los demás no lo podían notar.

Fuera de aquella neblina no se escuchaba nada más que un sumido, Happy y Lysha eran los que podían escuchar el zumbar de las cosas a su alrededor como si un pequeño temblor los moviera, ambos volvieron a ver, pero esta vez algo más raro paso, la neblina no parecía ser más que eso, mantenía su forma a simple vista como neblina, sin embargo, cuando los dos quisieron entrar a aquella neblina era como si fuera un duro muro de acero esponjoso o algo así.

- ¿Qué rayos es esto? Happy-sama – dijo Lysha mientras la niebla no la dejaba entrar mostrando resistencia como si fuera una especie de nube de acero blanca

- No tengo idea – dijo Happy tratando de entrar – Pero esta cosa se ha puesto dura, antes no era así – algo desesperado – Natsu

La neblina se había separado donde estaba Natsu y compañía, una especie de domo blanco, dentro del domo no había neblina con un radio alrededor de poco más de 20 metros de radio, Edward también lo había notado, la neblina había cambiado a una especie de nube de acero impenetrable, sabía que "ese" sujeto había vuelto, sus ojos se pusieron fríos, ya no le importaba lo que pasara afuera, se iba a centrar en lo que pasaría dentro.

- Dime, ¿Cómo diablos lo hiciste? – pregunto Edward al mirar a Natsu con unos cuantos rasguños

Alrededor de 15 sujetos ya estaban fuera de combate, sin embargo, aún quedaban muchos miembros enemigos presentes, la cara de Natsu soltó una sonrisa de confianza como la que solía mostrar antes, él también había notado el cambio denso en la niebla, pero ya no se podía preocupar por eso. Todo lo que pasara era cuestión de tiempo para que se acabara, además confiaba en sus amigos y sabía que cada quien se podía hacer cargo de sus enemigos.

Fairy Tail - Lágrimas de un Mar de FuegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora